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Respiraciones relajadas, continuas y lentas. Chenle, Jisung y Haechan habían quedado en reunirse para hacer una pijamada en casa del peliverde.
Según Haechan, la primera regla del evento súper importante era no dormir, y bueno, dadas las circunstancias, adivinen quién fue el primero en rendirse ante Morfeo.
A pesar de haber acordado las reglas y estar de acuerdo con ellas, todos acabaron cediendo en algún momento de la noche, terminando así el mayor de todos en el suelo abrazando un puff, Chenle en su gran cama estirándose de tal forma que ni en una persona más podría entrar y, por último, Jisung, quien se había quedado dormido en la silla del escritorio de su novio con una frazada que le había quitado al mismo.
Todo transcurrió de una forma tan natural que era más que predecible el hecho de que ese momento iba a ser interrumpido de una forma estrepitosa, tal y como lo fue el teléfono de Donghyuck sonando con el volumen al máximo con un extraño cover de Red Flavor que parecía llevar, por alguna extraña razón del universo; la voz de Mark, un dato claramente perturbador
—¿O contestas o te rompo ese estúpido aparatito?— Amenazó el chino con un tono que causó que los otros presentes se despertaran inmediatamente buscando la forma de contestar el teléfono mientras él dormía.
Cuando ya el isleño tenía el teléfono en la mano se introdujo al baño de la habitación por un poco de privacidad. Jisung, al verse levantado se aproximó a la cama arrastrando sus calcetines en la alfombra, ideando alguna tontería y aprovechando para crear algo de estática.
Ya frente a su lindo y gritón delfín adolescente, extendió uno de sus dedos hasta dar con uno de los brazos del contrario, provocando que, en un acto de reflejo, el chino saltara sobre la cama y se incorporara a ella sentándose de forma rápida.
Una guerra de miradas inició a tal punto en el que el menor se arrepintió de su jugada anterior. Y no fue hasta que escucharon un murmuro proveniente del baño que ambos se miraron de forma cómplice automáticamente.
—¡Pero Markurie, no!— Chilló DongHyuck desde el baño, los chicos quienes escuchaban desde afuera tuvieron que aguantarse las risas.
—¡No, no haré eso! Sabes más que bien que no necesito esas cremas raras— Continuó. — Oye, yo no te armo escándalos cuando olvidas llevarte tus medias de la suerte...No ¿Qué estas insinuando Lee MinHyung? ¡No! ¡ bueno si! Está bien, está bien... Sí, yo también te quiero mucho, y no, no le diré nada a Taeyong Hyung, si, adiós Markurie... —Cortó la llamada y abrió la puerta, extrañado miró en dirección a sus amigos que, le sonreían desde la cama, ambos sentados como si fueran los niñitos más puros del mundo.
—¿Entonces Channie, Te presto mis cremas o Markurie te las trae?— Preguntó Jisung en un tono provocador.
—¿Entonces JiSung, quieres que te rompa un pie o ambos?
—Le tocas un pelo y te mando a matar. —habló ChenLe con una sonrisa en el rostro. Todos los presentes sabían que cuando se trataba de algo que pudiese pagarse con dinero, para aquel chino todo era posible.
Razón número trece de ChenLe para amar a Park JiSung; "Esdivertidojugarconél"
Razónnúmerotrece deJiSungParaodiaraZhongChenLe; "A veces me asusta"
