La Purga Loud: La noche de Lincoln

Epilogo

Las horas se hacían eternas.

Una semana.

Una maldita semana antes de que la familia tuviera noticia alguna de Lincoln.

Toda la familia se había desmoronado en el transcurso de esa semana que continuó a la purga.

Cuando la purga terminó oficialmente, las defensas tardaron veinte minutos en ser levantadas. Trató de preguntarle a Lisa exactamente porque las defensas no se habían levantado cuando terminó la purga, pero lo que encontró fue la cuna de Lily afuera en el pasillo, y la puerta de Lisa totalmente bloqueada.

Había gritado como loca frente a la puerta de Lisa mientras la golpeaba tratando de que saliera y levantara las defensas, pero no obtuvo nada. Lynn había sido más violenta con las llamadas de atención a Lisa y había tratado de tirar la puerta abajo, pero era como si la puerta estuviera hecha de acera solido. No se movió ni un milímetro.

Lori se estaba preguntando exactamente de que material habría construido Lisa su puerta cuando todas las defensas de la casa Loud bajaron y fueron libres otra vez.

No fue hasta que Lori dio el primer paso afuera que comenzó a entender porque el sistema de seguridad había tardado veinte minutos en levantarse.

El cerco electrificada había sido derribado y todo su jardín destruido. En todos los años que habían sobrevivido juntos a la purga, algo como esto nunca había pasado. Es cierto que a veces encontraban señales de que habían tratado de traspasar el cercado, o que disparaban contra la casa, pero nunca habían tirado el cercado abajo.

La peste a gasolina quemada y porquería era terrible. Lori sintió nauseas de sólo estar parada en la puerta de su propia casa, era tan asqueroso que se sujetó el estomago. Ni siquiera se atrevió a dar otro paso hasta que su estomago se hubo recuperado por completo.

Detrás de ella las reacciones eran idénticas. Algunas de sus hermanas demostraban miedo y preocupación cuando vieron la ceca abajo, y Lori dio gracias de que las menores no parecieran haber visto el mensaje escrito con sangre en la pared.

"Siempre existe otro año"

Sólo esperaba que fuera sangre de cerdo o cualquier otro animal.

Lynn insistió en salir junto a ella, de forma bastante dura. Lori jamás había tenido tantas dificultades para convencerla de algo en su vida, tuvo que recurrir a la carta de "protección" para sus hermanas en el caso de que sucediera alguna emergencia. Y aun así lo tuvo bastante difícil.

Vio las caras de sus hermanas antes de irse.

Leni se veía preocupada, pero le dio una sonrisa de aliento. Ya le había dicho como no estaba dispuesta a hacerle caso a ese mensaje en su mano nunca más, y lejos de enfadarse, Lori misma le había ayudado a borrarlo. Luna aun tenía la cara roja e hinchada de tanto llorar, se le veía destrozada, y no estaba en condiciones de salir. Luan, ella parecía más decidida que Lynn por salir en busca de Lincoln, pero se había quedado para acompañar a Luna y las gemelas. A Lori no se le escapó la mirada de resentimiento que le mando tanto a ella como a Lynn. Estaba segura de que las cosas con Luan seguirían siendo complicadas aun si superaban esto. Muy complicadas.

Pero Lori se había encontrado particularmente molesta cuando Lucy se había puesto contra la ventana y sonreía mientras miraba todo afuera.

-La bestia ha venido a vernos...

Las gemelas estaban durmiendo arriba. Parecían haberse desvelado anoche jugando, y ni la bocina las había despertado. Se veían tan tranquilas que Lori no quiso despertarlas.