Héroes Extraordinarios

CAPÍTULO 1: EL INICIO DEL VIAJE

En un mundo sumergido por el caos y la desesperación, es donde un tirano temible gobernaba los cuatro reinos. Durante mucho tiempo oprimió a los humanos y a las demás razas de seres mágicos,  incluso los despojó de su voluntad y también de sus habilidades mágicas bajo terribles maldiciones; y así continuó sus explotaciones como mejor le parecía.

Sin embargo, dentro de este largo período de desesperación, un valiente grupo de 4 personas; Víctor Treviño, Déncio Bennett, Alba McGarden y Magnolia Millán, buscaron ponerle fin a ese largo periodo sin esperanza. Estos hombres y mujeres fueron llamados héroes que creían poder derrotar a ese gobernante malvado.

Víctor Treviño era el líder de ese grupo, él es un hombre alto y fuerte de intimidante mirada de ojos azules, con el cabello corto de color rojo. Su barba y elegante bigote son símbolo de su gran sabiduría. El usa un traje de color azul marino, con un pequeño emblema de una flama pegada al pecho.

Déncio Bennett, era el más ágil en el equipo, es un hombre de baja estatura con cabello largo de color café claro, el más rápido de los cuatro siempre se le ve con una sonrisa en su rostro, su baja estatura y cortas piernas se compensan con lo largo de sus brazos y su dominio con el arco. Se decía que Déncio era el espíritu del bosque, usaba un traje de color verde oscuro con un emblema de árbol.

Alba McGarden, la increíble estratega del grupo una mujer alta y con una elegante y delgada figura, tiene más edad de la que aparenta, su cabello es grisáceo y lo tiene atado para que no le estorbe al momento de pensar. Ella usa una bata blanca con unas botas de color azul claro, que va a juego con su cinturón con la hebilla del mismo color, su emblema en forma de gota lo portaba con gran orgullo. Ella era de las pocas descendientes mágicas que aún seguían con vida, su habilidad mágica consta de un pulso sanador, así ella curaba las heridas de sus compañeros en toda batalla.

Magnolia Millán, la más joven de los cuatros héroes, ella era la más valiente del grupo era una poderosa guerrera, una mujer de estatura promedio de cabellos dorados, usaba un traje azul y amarillo con el cual hacía resaltar más el color azul de sus ojos. El emblema de unas alas se podría apreciar en su colorido traje. A ella le dieron el nombre de la heroína número uno de los 4 reinos.

Después de una dura y poderosa guerra ellos 4 pensaban que todo estaba perdido, pero al último momento Millán logró derrocar al gobernante malvado y devolver la paz al mundo.

Cuando nuestros héroes derrotaron a ese temible tirano, cada uno de ellos se hizo cargo de los 4 reinos en cada región, Millán gobernaba la región del norte con grandes montañas nevadas y cuevas sin explorar, Treviño gobernaba la región del sur un lugar con grandes volcanes y tierras enormes, Déncio gobernaba la región del este un lugar con asombros valles y verdes bosques, Alba McGarden gobernaba la región del oeste un lugar con lagos, ríos y una abundante vida marina.

Muchas personas deseaban convertirse en uno de esos aclamados héroes. Sobre todo en discípulos de Millán, ya han pasado muchos años desde que la guerra terminó. Los 4 héroes prometieron mantenerse en contacto y por un tiempo fue así pero al pasar de los años perdieron gran comunicación entre ellos, en la época actual algunas cosas cambiaron para cada uno de ellos.

Es así como nuestra historia comienza con un joven de la región del sur llamado Gladio. Aunque su región natal era el sur, él era un gran fan de Millán, la heroína número uno de las cuatro regiones, quien había logrado derrotar al tirano en aquella poderosa y temida guerra.

Era un día normal en la vida de Gladio un joven de 19 años que era originario de la región del sur donde el héroe Treviño gobernaba, era un joven de cabello negro como la noche de ojos color azul zafiro, era alto solo un poco más que el promedio y con un cuerpo atlético por el trabajo en el campo que realizaba todos los días, también era algo despistado pero cuando tenía un problema encontraba la solución de una manera única. Ese día el cielo era claro ninguna nube se miraba en kilómetros todos en la villa estaban trabajando, pero nada podía haber previsto los acontecimientos que en ese día pasarían.