CAPÍTULO 50: DANIELA Y PRISCILA VS DAISY

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    Gladio, Amber y Michael atravesaban el bosque a toda velocidad sobre el mágico bastón, que había sido potenciado por las antiguas palabras del libro de Millán, ellos tres van en busca de respuestas y de sus demás compañeros. Mientras ellos avanzan a una ciudad envuelta en llamas, en otro lugar del bosque, una feroz batalla se libraba entre Daniela, Priscila y Daisy.

El rostro de Daniela exhibía una fusión de enojo y determinación. Sus rasgos tensos y su pelirrojo cabello desordenado caían sobre su frente, aún marcada por la sangre. Aunque sus manos temblaban ligeramente, no era por miedo, sino por la adrenalina que fluía a través de sus venas. Consciente de que había llegado el momento de enfrentar a Daisy, Daniela no retrocedería.

Priscila, plenamente consciente de la gravedad de la situación, tomó la decisión de permanecer al lado de Daniela para confrontar a Daisy. En un acto de determinación, envió a Regina hacia la ciudad en busca de refuerzos. Daniela y Priscila, preparadas y alertas, se alistaron para el inminente enfrentamiento, reconociendo la épica magnitud de los desafíos que se avecinaban al enfrentar a Daisy.

— ¡Tu, maldita loca! No sabes lo que has desatado. Voy a hacerte pagar por cada gota de sangre que has derramado— Mientras habla, Daniela se acerca a Daisy con pasos lentos pero determinados. Su rostro está contraído por la ira, y sostiene su espada cimitarra firmemente en su mano herida.

— Tú eres la que está equivocada, guerrera, si es que se te puede llamar así. Eres patética. No tengo miedo de ti, ni de nadie— Mientras Daniela se acerca, Daisy se mantiene firme, con una sonrisa burlona en el rostro.

—Daniela, no te dejes llevar por la ira. Necesitamos un plan para derrotarla— Priscila permanece al lado de Daniela, su mirada alternaba entre Daisy y su amiga. Su expresión es preocupada pero determinada.

—Después de lo que haga contigo ¡No volverás a lastimar a nadie más! Loca inútil— Daniela elevó su espada en el aire mientras se dirige a Daisy más rápido, demostrando su determinación en la batalla.

— ¿Vas a vengar a tu amiga, eh? Buena suerte con eso, guerrera— Daisy dio un paso hacia atrás, preparándose para el enfrentamiento. Su mirada era desafiante y no se aparta de Daniela.

—Daisy, esto no terminará aquí. No importa cuánto poder tengas, no dejaré que lastimes a más personas— Priscila tiene un mal presentimiento, en ese momento se colocó en una posición defensiva, sosteniendo su espada con firmeza.

Con sus armas en mano y corazones valientes, estaban listas para proteger a Mireya y enfrentar a la temible Daisy. La princesa Regina había corrió lo más rápido posible, sabe que si la llegaban a capturar todo por lo que había pasado ella, sus amigos, las pérdidas de las personas importantes, todo eso sería en vano. Su corazón era un mar de sentimientos agitados que le apretaba el pecho.

El escenario estaba preparado para cada uno de nuestros héroes. Daniela y Priscila se enfrentaban a Daisy. Con Mireya petrificada y la princesa Regina dirigiéndose hacia la ciudad, ellas dos debían derrotarla. En la ciudad donde Glacie y Evan siguen atrapados bajo los escombros, el fuego se comienza a intensificar cada vez más.

Gladio, Michael y Amber habían logrado escapar a duras penas de Leroi y Luna, dejando atrás a Leonardo, quien permanecía petrificado. Ellos tres están a punto de llegar a la ciudad en llamas. El héroe Miguel sigue descerca a Gaspar que junto con sus creaciones de piedra acaban de detectar a Mireya así que se dirigen a ese lugar.

Anna, Mimí, Mariana, y Orson habían conseguido esquivar los poderosos ataques de Gaspar y Alonso, pero sus compañeros Lyra, Pedro y Giovanni no tuvieron la misma suerte y también habían sido petrificados. Mario, por otro lado, había sido capturado y su destino era incierto en este momento. La situación era crítica, y los héroes que aún se mantenían en pie se enfrentaban a un todo o nada.

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