» Wrong Train •• KookV «

» 03 «

—Jungkook, ¿Estás escuchándome?

—Sí, dijiste que Seokjin es fastidioso.

—¡Es que lo es! Dios, ¿Acaso miras cómo viste y actúa? Detesto que sea taaan gay —apoyó la palma de su mano en su mentón—. No quiero trabajar con él.

—No puedes decir esas cosas sabiendo que una vez te vestiste de mesera para cumplir un fetiche del innombrable... Eso es aún más gay.

Yoongi quiso reír al recordar aquel momento, estaba claro que aún no superaba por completo su ruptura, pero que cosas como esa regresaran a su mente cómo deja vú, era divertido.
Definitivamente Jungkook tenía razón, vestirse de esa forma para hacer feliz a alguien era aún más ridículo que los vestuarios y cabellera  en rosa extravagante de aquel sujeto.

—¿En qué piensas? —preguntó ladeando su cabeza, examinando a su amigo con detenimiento al notar que la distracción lo consumía desde hace más de una semana—. ¿Te sientes bien?

—S-sí, yo...

—¿Cómo se llama?

—¿Quién?

—Tú crush —sonrió ampliamente dejando a la vista sus encías cuando el pelinegro comenzó a ponerse nervioso—. Eres raro...

—¡No es mi crush! —dijo más alto de lo que tenía pensado—. Sólo me causa curiosidad, me incomoda no saber su identidad —se cruzó de brazos, mirando a su amigo quién lo observaba con una ceja alzada pidiendo por una respuesta coherente—. Bien, no me gusta pero... No lo he visto desde hace una semana.

—¿Sigues pensando en aquel chico de la otra vez? ¿Acaso tienes idea de su nombre o algo así?

—¡Kim Taehyung! A-así se llama.

Yoongi se dirigió hasta su computador, comenzando a buscar aquel nombre por diferentes redes sociales sin encontrar alguna cuenta con el nombre del chico misterioso.
El pelinegro se acercó junto a él, observando a detalle todas las fotos de perfil, deteniendo a su amigo al encontrar una cuenta que llamó por completo su atención.

—Detente ahí... Es él...

—¿Cómo sabes que...? Dios, Jungkook, ni siquiera sabes cómo es su rostro y él ni siquiera se llama Vante —posó su mirada en el pelinegro y rodó los ojos, su amigo realmente parecía muy interesado en el sujeto de la estación de trenes.

—Tal vez no... Pero estoy seguro de que es él. ¡Míralo! Es muy apuesto. Ah, Yisus Hyung, ¿Por qué me haces esto a mí? —habló demasiado alto, alzando las manos hacia el cielo mientras se preguntaba una y otra vez el por qué era necesario ponerle ese chico interesante en su camino—. Espera... Esa fotografía es en el parque que está a media hora de aquí, ¿Verdad?

—Sí. No me digas que irás a buscarlo.

—¿Por qué no? Ya tiene días que no aparece por la estación de trenes y no tengo ni idea de qué transporte toma o en qué colegio estudia —hizo un pucheros sentándose de nuevo en la orilla de la cama—. Ah, qué estrés.

—Bueno, notando que en serio quieres saber más de él, deberías ir en su búsqueda —el pelinegro sonrió unos segundos para luego regresar a su expresión decaída—. Aunque... Nadie te asegura que lo encuentres, tendrás que esperar un buen rato.

Jungkook asintió antes de despedirse de Yoongi e irse del lugar. Su amigo tenía la total razón, pero en verdad estaba angustiado. No sabía nada de Taehyung y el hecho de no verlo, le preocupaba de cierta forma.
Tomó el transporte que lo llevaría a su destino y en cuanto llegó, lo primero que hizo fue buscar con la mirada al pelirrubio.