Habían transcurrido ya poco más de tres semanas.
Tres semanas en las que Yoongi no había podido parar de espiar a Seokjin pues por lo visto, desde aquel beso, habían empeorado las cosas, tanto para el castaño, cómo para él.
No había momento en que la imagen de su rostro, apareciera en su cabeza, tanto que ya ni siquiera pensaba en su ex novio.
Decidió saltarse la última de sus clases y tomó asiento en aquel lugar desolado donde se había atrevido a besar a Seokjin, y es que jamás había notado lo mucho que extrañaba hablarle y que aquel chico se le acercara.Escuchó unos pasos acercarse a dónde él y levantó la mirada, encontrándose con el castaño, quién sólo se mantenía inexpresivo con las manos en su bolsillo.
—¿Vienes a decirme que me largue de aquí? —preguntó regresando la mirada al suelo.
—No, pero me gusta venir aquí de vez en cuando... Los recuerdos son lindos.
—Escucha, Jin... Estas semanas han sido difíciles —dijo firme tomando la mano del castaño para evitar que se fuera—. Extraño que me hables.
—Yo extraño los momentos donde no te conocía, mi vida era jodidamente fácil, Yoonie —sonrió a medias observando la mano del chico puesta sobre la suya.
—Dame una oportunidad, Jinnie. Por favor, te juro que no puedo más —suplicó al borde de las lágrimas.
—No llores —se acercó para besar la frente del peliverde con ternura—. Tengamos una cita en la cafetería del colegio, ¿Quieres?
—S-sí, yo... —murmuró apenas sintiéndose un tanto estúpido por aquel beso.
Seokjin tomó la mano de Yoongi para ir juntos a dónde ya habían dicho. El tacto de castaño era tan suave, cálido y protector, que Yoongi estaba seguro de poder tomar su mano por el resto de sus días.
Cuando llegaron al lugar, ambos pidieron un café y mientras esperaban por él, se miraron fijamente sin decir una sola palabra.
Yoongi sintió con rapidez la forma en que el calor se agolpaba en sus mejillas, jamás tuvo un contacto como ese en toda su vida y a pesar de tener vergüenza, no le desagradaba en nada. Las primeras nuevas experiencias junto a Seokjin, estaban viéndose demasiado lindas.—Te he observado, estás loco por mi, lo sé —dijo sin darle más vueltas al asunto, soltando aquella risa tan peculiar al notar como el rostro del peliverde se volvía rojo hasta llegar a sus orejas.
—Ah, tú... Basta —sonrío ampliamente mostrando sus encías—. Aunque tienes razón en verdad.
—Dime todo lo que te has guardado este tiempo, anda bebé... Te escucho —se movió junto a su silla hasta quedar muy cerca de Yoongi, mientras éste jugueteaba con sus dedos por el evidente nerviosismo y por aquel apodo usado.
—Seré sincero entonces... Sé que aquella tarde fui muy cruel, pero creo que desde ese día me di cuenta lo valioso que eres. Tampoco se debía a que extrañaba a Jimin, pero en verdad comencé a sentir un vacío cada vez que me desplazabas, jamás intenté llenar ese espacio contigo... Fue algo que ni siquiera yo me esperaba... Me gustas, Seokjinnie, me gustas mucho y ya no puedo seguir ocultándolo —tomó al castaño por detrás del cuello y lo atrajo hacia sí para chocar sus labios de una vez por todas.
Sin negarse, Seokjin entreabrió su boca para permitirle el paso a la lengua de Yoongi y así iniciar un gran beso que ambos habían estado deseando por mucho tiempo y que por supuesto, daba inicio a una hermosa nueva relación.
Jimin amplió sus ojos al ver tal imagen frente a él. Estaba tan arrepentido de haber cambiado a Yoongi por alguien más que estaba decidido a recuperarlo, pero ahora observar a ese par, mirándose fijo como si no existiera alguien más, le dejaba todo muy claro. Yoongi ya pertenecía a otra persona.
▫▪▫▪▫
—¡Taehyung-ssi! Te extrañé tanto —gritó en la estación mientras corría a abrazar a su ahora novio, restándole importancia a las personas que los miraban con evidente antipatía.
—Pero nos vimos ayer, Jungkookie...
—Ya sé, pero aún así lo hice. ¿Tú no me extrañaste? —infló sus mejillas esperando por una linda respuesta.
—No voy a mentirte... Te extraño hasta dos minutos después de que te vas de casa —su mirada recorrió los mosaicos del piso al sentirse ligeramente mareado—. ¿Vendrás hoy? Tengo algo especial para ti.
—¡¿De verdad?! De todas formas pensaba acompañarte a casa —dijo pasando uno de sus brazos por los hombros del pelirrubio para caminar y entrar al vagón del tren—. Tus sorpresas me gustan, son geniales.
El pelinegro besó a Taehyung por encima de la tela de su cubrebocas y ambos tomaron asiento para el camino que les esperaba.
A decir verdad, el trayecto a casa de Tae era un tanto largo y agotador, pero desde que Jungkook lo acompañaba, pareciera que todo pasaba menos lento de lo usual.
Abrió sus ojos con pesadez cuando el pelinegro lo movió para decirle que estaban cerca de llegar, y estaba sorprendido porque no se percató el momento en que se había quedado dormido.
—Lamento eso, no he dormido muy bien...
—Eres hermoso cuando duermes —depositó un casto beso en su frente y luego bajaron del transporte para llegar al fin a casa de Tae —. ¿Te parece si me quedo a dormir esta noche? —preguntó mientras tomaba asiento en la cama.
—Claro, pero avísale a tu madre, no quiero que piense que estoy secuestrándote —rió por lo bajo y sacó la cámara de su mochila—. Bien, aquí va mi sorpresa.
—A ver...
—A ver al cine... —ambos soltaron una gran carcajada que incluso, les provocó soltar algunas lágrimas—. Ya, esto es serio... Quiero tomarme una foto junto a ti, Jungkook...
—¿Me pongo el cubrebocas también?
—Quiero una foto de ambos, sin usarlo —Jungkook abrió ligeramente la boca, queriendo decir algo pero sin lograr emitir palabra alguna—. La idea es esta, pondré el temporizador y me quitaré esto, pero tú mira al frente y no me observes... Yo te daré esta foto y me verás cuando sea el momento indicado, ¿bien? —el pelinegro asintió.
Decir que estaba emocionado, era muy poco. Realmente estaba ansioso por conocer finalmente al amor de su vida.
En el momento que Taehyung comenzó a colocar la cámara en un buen lugar, su corazón comenzó a latir de forma insistente y sin parar.El pelirrubio se acomodó a su lado y se descubrió el rostro.
Jungkook sonrió con sinceridad y amplitud, sabiendo que el chico a su lado estaba haciendo lo mismo.El sonido del obturador se hizo presente y después Taehyung se giró de pronto para besar a Jungkook de sorpresa.
Por inercia, el pelinegro cerró sus ojos ante el contacto y sonrió entre aquel acto. Estaba contento y esperaba en verdad que nadie le robara esa gran felicidad.▫▪▫▪▫
Sólo queda un capítulo y un extra.
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» Wrong Train •• KookV «
Fanfic"Y no me importaría tomar el tren equivocado por el resto de mi vida, con tal de descubrir quién eres" || HISTORIA CONECTADA A "Miss You - Two Shot" || 🐝 Publicada: 16/09/18