Capítulo 7

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El caballero negro

Era una mañana sin brillo en donde el mismo cielo cubierto con grandes nubes negras clamaba por sangre y cuya llovizna gritaba muerte.

Se escucha en toda la arena los gritos y vituperios de los presentes animando a su mejor luchador.

---Vamos Marcus mata de un solo golpe al bastardo.

---Sí... saca su corazón y cómelo.

Los gritos de la muchedumbre acalorada ensordecían a Milo y no lo dejaban pensar bien. Su mirada se concentraba solo en Aldous al ver el rostro asustado de su amigo y el dolor que le infringía sus ataduras.

Milo no tuvo tiempo de seguir analizando la situación porque Marcus se abalanza sobre él, con sus miembros enreda las piernas de Milo y lo hace caer a la arena dándole un golpe seco en el pecho con su puño haciendo que Milo gima de dolor.

Marcus lanza otro golpe pero esta vez Milo lo bloquea sujetando sus brazos lo cual hace que los dos ruedan por la arena.

Marcus por el tiempo que ha pasado en los entrenamientos tiene más proeza en el combate cuerpo a cuerpo por eso se libra del agarre de Milo y le da una patada en el estómago haciendo que éste lleve sus manos a la parte adolorida y con sus piernas lo empuja con fuerza cayendo Milo de espaldas.

Marcus brinca encima de Milo y lo toma del cuello haciendo que éste se le dificulte respirar.

---Marcus escúchame por favor. Recuerda somos amigos no quiero lastimarte. –-Milo en su dolor exclama a su amigo por ayuda y que entre en razón.

---Pues lástima tu cobardía porque yo, sí que voy a lastimarte... ---para Milo su amigo de infancia es alguien irreconocible, sus ojos ya no tienen luz, solo puede ver oscuridad en ellos y sed de sangre.

---Vamos Marcus aprieta un poco más su cuello y termina de una vez con su insulsa vida ---grita Malvus a la distancia y se le dibuja una pequeña sonrisa de satisfacción en su rostro.

<<Vamos Medrán no vas hacer nada por ayudarlo>>

<<En serio lo dejarás morir>>

<<¡Pues bien! sino te importa entonces que muera>> grita Malvus en sus adentros de rabia e inconformidad al ver que su plan no ha resultado en su totalidad pero se conforma con la muerte de Milo.

Aldous se afloja las ataduras de sus manos, se quita el tapabocas y grita....

---Miloooo.

---¡Levántate!

---Eres mi escudo. Lo prometistes.

Milo casi sin aire escucha a lo lejos las palabras de Aldous, abre sus ojos ya sin fuerzas y ve como Aldous se escapa del agarre del perro fiel de Santay y trata de correr en su auxilio pero el esbirro de Malvus lo atrapa y lo golpea en la nuca haciendo que éste caiga al suelo.

Aldous trata de arrastrarse en el lodo que ha dejado la llovizna pero Santay jala su pierna con la cadena que lo sujeta y lo retiene haciendo que éste gima de dolor.

Milo al ver esa escena saca fuerzas de lo más recóndito de su alma agarra las manos de Marcus que aprietan su cuello y las retira bruscamente. Con su pierna le da un rodillazo en la espalda a Marcus logrando que éste ruede al otro lado y con su antebrazo le da un golpe firme en la nariz haciendo que ésta sangre dándole por unos minutos espacio para respirar y recobrar fuerzas.

Malvus al ver tal acción se enfurece y en especial al notar que Medrán aunque no vislumbre ninguna reacción su rostro sabe muy bien que está satisfecho por el resultado.

Uriel y  el  Medallón de la  OscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora