♱Serafín | Trevor Belmont
(Castlevania: Serie):
1/2♱Ella frunció el entrecejo con obviedad al verlo beber una vez más, a lo que suspiró sonoramente para que él se percate de su presencia o al menos entienda que ella se encuentra enfrente de él. Para que no se olvide de su tan gentil compañía. Sin embargo -conociendo a la perfección al cazador- oprimió los labios para no comentar nada al respecto o al menos tratar de ignorar la incómoda situación que se encuentra viviendo nuevamente. Ni siendo un arcángel de alto nivel podría soportar una insolencia del calibre de éste, aun así, aguantaría lo que sea por el ser que ama, por más que éste ni siquiera lo sepa o se encuentre interesado en el tema. Pero estando acostumbrada a vivir siempre la misma historia, se puso de pie silenciosamente y se encaminó hacia la salida de aquel lugar asquerosamente maloliente, es decir, él ni siquiera se percató de sus acciones.
Suspiró de forma cansada al sentir un escalofrío calarle los huesos al ver que un hombre había entrado a los tropezones a la taberna, tal cual como si fuese un mal augurio, pero trató de ignorarlo y volteó con cuidado para observar la oscuridad de esa noche tétrica.
Entrecerró sus ojos celestes y sonrió agradecida para evitar la horrible sensación de malestar en el estómago, las tripas se le retuercen a causa de los presentimientos que le generan las sombrías sombras de la noche exasperante que se alza ante su mirada.
Al cabo de unos minutos algo le llamó la atención, la cándida fémina analizó con una sonrisa endulzante al animal de cuatro patas que se encuentra amarrado a uno de los tantos postes del lugar, se encaminó hacia él con un paso lento y silencioso, una vez se encontró junto a éste no pudo evitar entristecer el semblante y sentirse perturbada.
—¿Q-Qué te ha ocurrido...? —musitó con dolor posando con cuidado una de las manos en el cuello del caballo overo y deslizarla lentamente para no provocarle más dolor. Herido. Éste se encuentra brutalmente lastimado, es decir, rasguños, ya sean profundos o no, algunos se encuentran encarnados con la melena negra del pobre ser.
El corazón se le estrujó innumerables veces al tratar de inhalar y no hiperventilarse, a lo que -con un extremo cuidado- empezó a curarle las heridas.
Manteniéndose calmada, volteó varias veces para percibir que no allá ningún pueblerino cerca, ya que éstos tienden y no son culpables a asustarse de lo desconocido con mucha facilidad. —No es culpa de ustedes temerle a lo desconocido. —susurró comprensiva, sonrió con gentileza y observó al animal que no despegó la mirada de ella una vez lo curó con su magia.
"Mi deber es encaminarlos, no pretendo juzgar sus acciones, por más que éstas sean muchas veces asesinas."
Pensó la hermosa joven una vez volteó al escuchar que un amargado y apestoso hombre salía a las corridas de la taberna. —¡Serafín! —gritó él.
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❀ One Shots | Anime/Games ❀ (CORRIGIENDO)
Fanfic❀ One Shots | Anime/Games ❀ ❥ Éste libro será mí humilde espacio de ideas descabelladas, por lo tanto, habrá de todo ya que no me enfocaré en algo en especial.