-Mira, mi amor. Te he comprado el nuevo celular que querías.
-¡JiMin! ¡Es genial! ¡Me encanta, bebé!
-A mi me gusta mucho mas poder darte gustos, porque se que los mereces y-
-¡NamJoon! -se tocó rápidamente la cabeza, y abrió los ojos alarmado por los gritos de su novio.
-¿Por qué me despiertas a esta hora? -gruñó, volviendo a cerrar los ojos.
-Ayer prometiste llevarme a la escuela, tengo que llegar temprano hoy, y dudo hacerlo en autobús.
-Tengo mucho trabajo en el taller hoy, no molestes- volteó, intentando volver a dormir.
-Pero...
-¡JiMin! Para, por favor.
No escuchó nada más cuando cerró los ojos, y quedó dormido.
No escuchó los suaves sollozos de su novio.
JiMin lloraba, porque se sentía inútil. Buscó debajo de la cama sus zapatos, y los vio ahí, tan viejos y desgastados. Lloró porque no tenía otros, y porque en vez de comprarse unos, pasaba comprando el café favorito de su novio. Miró sus pies, y vio las pequeñas heridas que adornaban sus dedos. Esos zapatos eran los mas baratos que había encontrado, y eran tan incomodos, mas si se pasaba caminando de un lado para otro en su trabajo. Era mesero en una pequeña cafetería, pero con muchos clientes.
Se lo calzó con cuidado, esperando no lastimarse y caminó a la sala. Buscó su mochila, y vio que el cierre no funcionaba, y pensó en que tendría que cambiarlo otra vez.
Eran las 7:15. Estaba llegando tarde. Casi sollozó cuando comenzó a correr y sintió otra vez el fuerte dolor en sus pies, pero era importante llegar temprano.
Lo que nunca pensó fue que podría pasar un conductor ebrio a alta velocidad por su camino.
NamJoon despertó de mal humor al ver su techo con manchas de humedad. ¿Qué había hecho él para merecer esa vida? No tenía una vida con mucho dinero, pero decidió independizarse con su novio. Según él, había cometido un error. Tal vez nunca debió de conocerlo, y tendría una mejor vida.
Suspiró y caminó a la cocina. Prendió el televisor y buscó algo en la heladera.
-Estamos en el lugar en el que ocurrió el trágico accidente, lamentablemente no podemos mostrarlo en este horario. No pudieron contactar a ningún conocido del joven, ya que no traía celular.
JiMin tampoco había llevado su celular ese día.
-¿Puede contarnos como fue la escena?
-El chico iba muy apurado, y creo haber visto que estaba llorando también. Cruzó la calle sin mirar, y solo pasó. La policía me informó que el conductor iba borracho, y no he sabido nada de el desde entonces. Espero esté bien.
Miró con curiosidad el televisor, y vio la pequeña florería en una esquina. JiMin pasaba por ahí para ir a la escuela.
¿Eran... solo coincidencias? ¿Verdad? JiMin no iba apurado.
"Hoy no puedo llegar tarde"
Mierda. Miro su celular en la mesa y corrió a él, pero cuando estaba por marcar el número del hermano de su novio, apareció una llamada en su pantalla.
-¿SeokJin?
-Ven al hospital, por favor... -pidió entre sollozos lastimeros.
Salió como estaba y subió a su moto, ni recordaba si había cerrado la puerta, pero no le importaba si le robaban algo. Porque nada material importaba si el amor de su vida estaba en peligro.
Cuando bajó, corrió lo más rápido que pudo hasta SeokJin, que estaba tirado de rodillas llorando.
-SeokJin, dime, d-dime algo... -susurró, sintiendo su alma romperse.
-Y-Ya no hay n-nada que hacer... Se ha ido...
Y desde ese día, nunca más soñó con tener una gran casa, un auto de lujo o un celular de última generación.
Desde ese día, soñaba con besar los suaves labios de su bebé, o con comer la comida recalentada del medio día que preparaba JiMin. Simplemente verlo le daba alegría, y estuvo tan cegado, porque envidiaba a las personas de su entorno, que decían ser felices con los lujos de su vida. Pero el nunca se dio cuenta de que tenía en sus manos el tesoro mas valioso de su vida.
Lo amo con cada célula de su cuerpo, pero se dio cuenta tarde.
Y ahí estaba el, encerrado en el baño, tomando a montones pastillas. Se miró en el espejo, y dijo que cualquier forma de morir era digna si con eso iba a tener la felicidad otra vez.
Le pidió perdón a sus padres, a SeokJin, a su hermana y a JiMin, por no ser fuente, por no cambiar al mundo de matiz.
Cerró los ojos y sonrió. Finalmente podría amar a JiMin como merecía.
Volví, tan depresiva como siempre.
Tengo ideas en las notas de mi celular y la mayoría son tristes.
¿Les gustan las cosas tristes? A mi si xd.
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NamMin | ᴏɴᴇꜱʜᴏᴛꜱ
FanfictionOneshots Nammin. 🍂Algunos capítulos contienen violencia, o contenido para adultos.