— ¿Rosa o azul? ¿Uno o dos? ¿Diamante o prisma? ¿Fresco o reservado?
— Ambos, trece, diamante, práctico.
“AHHHHHHHHHHH YA DÉJENME EN PAZ.”
Pensó aquel platinado de profundos ojos cafés y espesas pestañas. ¿Cómo no? Si a sus veintitantos debía mantenerse al tanto de todo y todos. No lo tomen a mal, no se arrepiente de tener presente a las doce personas más importantes de su vida, pero el liderazgo requiere más que solo responsabilidad de por medio.
Comprensión, cuidado, compromiso, respeto...
Amor...
“Amor”, una palabra breve pero poderosa. Cuatro letras con un significado que escasos corazones logran encontrar en su escencia más pura. Amor por aquellos a tu alrededor, aquellas personas que sacrifican hasta la última gota de esfuerzo por hacer realidad un anhelo.
Indudablemente, las gotas de sangre, sudor y lágrimas derramadas no podían faltar, incluyendo la propia y la de otros para seguir adelante y eso le aterraba.
Solo buscaba lo mejor para todos...
Pero no saben lo difícil que se tornaba para el joven líder, es decir, si, el resto de sus talentosos compañeros estaban al tanto en todo, coreografías, canciones, pistas instrumentales, entre otras actividades, mientras que su relación con sus mayores era más compleja. Personalidades chocantes, diferencias creativas, poca fé en sus acciones, decisiones y diálogos, y sus menores sufrían las consecuencias gracias a ello.
Un efecto mariposa y círculo vicioso que deseaba destruir.Y evidentemente, deseaba llegar a la sala de descanso y aislarse de todo por un instante. Sin responsabilidades, sin órdenes que seguir ni dictar y dejar de existir por un mísero segundo. El abrumado chico apresuró sus pasos de manera ansiosa hasta llegar a la habitación, cerró con fuerza la puerta a la vez que pegaba su frente contra la áspera madera y por fin se permitía suspirar pesadamente.
“Por fin, en p...”
— Ahm ¿Quién eres y qué haces aquí?
Y ahí estaba yo, con el rostro de todos los colores luego de ser descubierto en pleno acto de curiosidad.
— Solo buscaba el baño. —No exagero, en serio debía ir. Él solo se dedicó a asentir y señalar una puerta extra en ese lugar a la vez que se aproximaba al sofá de color café del lugar.— Gracias.
Sin siquierar respuesta, me retiré por aquella puerta que me señaló.
Mientras tanto, el platinado se dejó caer sobre él sofá con la disposición de tomar una pequeña siesta.
Hasta que abrieron de golpe la puerta...
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"The Door" (SEVENTEEN)
Short Story"No sé si es solo por curiosidad, pero quiero conocer el mundo detrás de esas puerta..." Atte: ???