Cap 9 (De frente a Kelly)

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-...Oh mira, ya llegamos- el abrió la puerta del lugar y la detuvo mientras yo entraba, el lugar era algo pequeño, pero muy acogedor, las sillas y mesas eran de madera, las mesas eran redondas, yo me senté en una silla de estas y el frente a mi.
Un mesero nos trajo la carta, habian panes y postres y batidos.

-Elige lo que quieras, no hay problema con el dinero- agradecí

El mesero llegó con una libretita y pluma

-A mi me da un batido de fresa- hand me miró

-¿Es todo?-

-Pues si- encogí los hombros

-Esta bien, a mi me da un pan de estos- señaló la carta mostrándole al mesero mientras el apuntaba- y un batido de fresa también.

El mesero recogió las cartas y se fue, ahora que me doy cuenta hand es un chico muy simpatico, tiene su rostro lleno de pequeñas pecas, tiene el cabello liso que va hacia la derecha, cejas pobladas, y su sonrisa se ve tan linda, es como si hubiera sido hecha para ser perfecta
De repente espabilé, el me habia preguntado algo no sabia que responder

-Sii- dije rogando que fuera algo de respuesta de si o no

-Pero te pregunté que, ¿que hacias en el parque sola?- ok, no fue de si y no

-Yo, eh buscaba a mi hermana, que...olvidalo, no es importante

-¿Siempre eres asi?-

-Si un poco- empece a jugar con un mechon de mi cabello

-Bueno, ¿vives con tus padres entonces?-

-Si, claro-

-te puedo ayudar a buscar a tu herma...-

-¡No!- di un golpe en la mesa que llamó la atencion de los otros clientes, me agaché un poco por vergüenza- es decir, no necesito ayuda, tu sigue con lo que hacías-

-Eres algo terca, ¿no lo crees?-

-No te lo pregunté- llegaron los batidos y el pan que ordenó Hand

Yo lo tomé muy rapido, de hecho fue tan lindo volver a sentir que tu cerebro se congela, si lo se, es raro, pero realmente estando allá, extrañas la vida
Al terminarlo dije:

-Ya debo irme enserio, no me va a dar tiempo de hacer algo que debo hacer-

El le dió un mordisco grande el pan para acabarlo y tomó un gran sorbo de su batido

-Espera, yo puedo ayudarte- dijo aun con la boca algo llena

-no, no es necesario- me levanté y corrí para que no me fuera a seguir, me detuve frente a una libreria.
Por Dios, ¿esta soy yo? Olvidé que estoy en otro cuerpo, de hecho no es tan distinto al mio
Conservo mis ojos grandes y oscuros, cabello largo, y creo que la estatura, pero si se ven diferentes mi nariz, tipo de pelo, pues mi pelo es liso, este es ondulado, tengo unas cejas mas pobladas, y creo que este cuerpo es algo mas moreno que el mio, llevo una blusa blanca puesta, jean y sneakers, metí la mano en los bolsillos...

-¿Esto es dinero?- dije mientras tocaba los billetes- bueno, ¿porque Carlos no lo dijo? Con esto podré pagar el transporte publico a mi casa, ah no esperen- vi el reloj tras el cristal de la libreria- mi hermana debe estar en clases, pero no se donde estud...- de repente me invadieron recuerdos, como el nombre de la escuela, su grado, que yo estudié en ese mismo lugar, vi rostros, supongo que debían ser de algunos compañeros que estudiaron conmigo.
Ya se que hacer para entrar
Al llegar le inventé al guardia que yo era egresada y debia buscar unos certificados, me fui directamente al salón de mi hermana, estoy muy nerviosa, al asomarme un poco, la pude ver, por Dios, creo estar llorando, ella se ve tan linda como siempre.
Tomé fuerzas y le pedí a la profesora que la llamara, inventé que era su prima
Ella salió y me miró desconcertada que estuvo a punto de entrar
Yo me limpie las lagrimas de las mejillas y me agaché un poco para verla directamente a los ojos

-¡Espera!- la tomé del brazo

-¿si?- ella se soltó- yo no te conozco, ¿Que necesitas?-

-Kelly, te ves tan linda como siempre- sonreí mientras caian mas lagrimas por mis mejillas- Estás lindella como siempre-

Ella abrió los ojos como platos

-Tu...tu, ¿Quien eres? Solo gaby me llamaba asi-

-¿Kelly, no me conoces?, ¡yo soy gabrielle!-

Vi como su mirada se volvió mas inquieta y se aguaban sus ojos

-No, no llores, yo quería que estuvieras feliz, porque sabes que estoy bie...- fui a tocar su brazo y lo apartó de golpe

-¡Tu no eres ella!, ¿como puedes jugar con eso? Extraño a mi hermana y ¿tu vienes a burlarte de mi? Es imposible que seas ella- enseguida me dió la espalda y se dirigió a su salón.

-Además de lindella, yo tengo un diario, un día te encontré revisandolo, y me enojé tanto que te mordí en la espalda, y luego tu me regresaste la mordida en un brazo- dije en voz alta para que me escuchara bien.

Gabrielle contra la muerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora