36 (Descendencia angelical)

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Hace muchos años,lucifer y muchos demonios más llegaron a la tierra y dejaron descendencia, Dios muy enfurecido los encerró para siempre en el infierno sin posibilidad de salir nunca más, pero sin olvidar aquellos niños que habían nacido.

Pero un caso fué diferente, el angel guardián de una muy hermosa mujer quedó perdidamente enamorado de ella.
Él siempre la protegía más de la cuenta, un dia el tomó la decisión de bajar e interactuar con la mujer, ambos se enamoraron.
El ángel que hacía todo sin que Dios se diera cuenta, un dia decidió no volver al cielo y quedarse con la mujer para formar una familia.
Dios al darse cuenta de la ausencia de ese angel, descubrió que estaba a punto de tener un hijo con una humana.
Él en su furia, al nacer ese hijo,hizo que la mujer muriera en el parto y él fue desterrado al infierno también.
A pesar de todo, Dios cuidó a ese hijo, el cual era una niña, por ser mitad ángel, cuando ella muriera, él la entrenaría como un ángel también.
Los angeles se enteraron de lo que había sucedido y llamaron a la niña "Él angel Encarnado", lucifer también se enteró de esto y al darse cuenta que la niña se volvió la preferida de su padre, para molestarlo, cuando la chica murió, él hizo que reencarnara una y otra vez, hasta tal punto que Dios la perdió en la tierra.
La única opción de Dios fue hacer que uno de los descendientes de demonios la encontrara por él.

Lo común de esa chica es que los nombres que tuvo siempre empezaron por G, era la unica pista que Dios tenía, pero existen millones de chicas de nombre empezado con esta letra.

Lo que se sabe es que la ultima reencarnación de este angel encarnado recibió el nombre de Geraldine.

La pantalla se apagó y Carlos me miraba detenidamente.

-No entiendo, ¿esto que tiene que ver conmigo?- dije

-¿Por qué eres tan tonta?- el pasó su mano por la cara como decepcionado.

-Porque para mi no significa nada, necesito que me expliques, están hablando de geraldine, no de mi-

-Niña tonta, tu eres Geraldine, bueno eras-

-¿Qué?, no, es imposible, Geraldine murió hace poco como yo-

-No, ¿Ethan no te lo dijo? Nosotros llevamos aquí unos 19 años-

-Espera, ¿tratas de decir que yo fui La Geraldine que ustedes conocieron? Y ¿reencarne y ahora soy Gabrielle?-

-Hasta que por fin comprendes-

-A ver, suena loco, creo tu teoria de Geraldine, pero, ¿Cómo puedes saber que yo fui ella?-

-Bueno, de hecho, esto lo prueba- el recogió un sobre de manila que estaba en una mesa y me lo entregó -Realmente Will no era mi complice como ves- el se acercó al Señor Will- lamento revelar tu secreto, pero tu sabias todo y no me lo dijiste-

Yo abrí el sobre, habían fotos de chicas, de epocas antiguas, no tenian nada en común fisicamente.

-¿Que se supone que ocultó el señor Will?-

-Él siempre supo quien eras, lo has olvidado, pero has llegado a este lugar tantas veces, porque él estaba trabajando para mi padre-

Miré al señor Will, estaba muy avergonzado.

-Señor Will, ¿Es eso cierto?, Entonces, ¿Yo si fuí Geraldine?-

Carlos le dió la orden a uno de los guardias para que le quitara la benda de la boca.

-Gabrielle, yo lo lamento mucho, lamento haber arruinado tus objetivos verdaderos, siempre que subes cambió tu verdadero objetivo y le hice creer a todos que era enamorarte, cuando tu objetivo siempre ha sido convertirte en ángel, lucifer me ofreció quedarme en este lugar, siempre supe que iría al infierno, y él me ofreció quedarme aqui para siempre-

-Toda mi vida ha sido una completa mentira, y lo peor es que mi destino será volver una y otra vez gracias a tu maldito padre y a usted- dije enfurecida mirando a Carlos y al Señor Will.

Una imagen sobresalía del sobre y la saqué.
Al verla, muchos recuerdos vinieron a mi mente, otra vida, otros lugares, pude recordar a Ethan, todos esos nombres que un dia vi sin sentido, esas fotos, no eran extrañas....era yo, siempre estuvieron conmigo, pero por alguna razón no las entendía.

Carlos se acercó a mi.

-¡No, no me toque!, tu no puedes hablar del señor Will, porque también buscabas tu propio bien, eres un mentiroso- me levanté y tiré el sobre hacia él.

-Calmate, te mentí, pero te estoy revelando lo que nadie más-

-¿Y qué? ¿Que conseguirás con eso?-

-Gabrielle- dijo acercandose a mí.

Lo apunté con el arma que llevaba.

-Por favor, no te acerques- el levantó las manos.

-Escucha, no te voy a hacer daño, porque tu también puedes herirme, solo quiero proponerte algo- el seguía con las manos arriba.

-¿Como podría confiar en ti?¿Que puedo ganar yo?-

-Yo puedo hacer que vayas al cielo, pero primero debes enviarme al infierno para hablar con mi padre-

-¿Qué? Yo no puedo hacer eso-

-Si puedes, eres mitad ángel, ellos tienen poder sobre los demonios-

-Pero solo soy mitad ángel, eso no significa nada, no puedo ayudarte y tu tampoco podrás ayudarme-

-Solo firma mi contrato, y si no funciona, no pasa nada-

-Por Dios, debe haber alguna trampa, eres un falso-

-Pues aquí lo tienes, puedes leerlo despacio, no hay letra menuda-

Yo aún lo apuntaba cuando tomé rapidamente el contrato.

-Quiero que los dejes ir a ellos, sino lo romperé-

-Está bien- el chasqueó los dedos y los guardias empezaron a soltarlos.

-Gaby, podemos ayudarte, no te quedes con él aquí- dijo Vero mientras era retenida por un guardia al tratar de acercarse a mi.

-No, está bien, no pasará nada, pero quiero que ustedes estén bien-

-Gabrielle- miré al Señor Will -A veces lo oculto no está en letras, sino en intenciones.

Carlos dió la orden para que lo sacaran de inmediato.

Comencé a leer el contrato, todo lo que decía es lo mismo que el me había propuesto, bajar al infierno para hablar con su padre y ofrecerle ser su suplente a cambio de que me hiciera subir al cielo, y el contrato sería nulo, si yo no tenía el poder de mandarlo al infierno.

Al terminar de leerlo miré a Carlos.

-¿Ya ves?, no hay letra menuda, todo es tal como te lo dije-

-¿Porqué serías el suplente?-

-Porque es hora de aceptar lo que me toca, estoy condenado a eso por lo que le hice a Ethan, si realmente quiere su bien y mandarme lejos de él, firmalo-

El hizo aparecer una pluma y me la entregó.

Realmente tenía miedo a equivocarme, y el Señor Will me habia dicho algo que me hace dudar, necesito una señal.
Creo que no tengo nada que perder, si no funciona, no pasará nada, de todos modos el quedará en el infierno.

Tomé el pergamino y empecé a firmar.

Gabrie...

-¡Detente!¡Es una trampa!-

-Giré a ver a la puerta, era Ethan quien se veía muy débil- dejé caer la pluma para ir a hacia él.
A poco metros de haber avanzado, Carlos me agarró y me puso una navaja en el cuello.

-Ese contrato lo terminas de firmar, así sea a la fuerza- dijo exaltado.

Gabrielle contra la muerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora