Capítulo 13

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Han pasado tres dias desde que Hero y yo estuvimos juntos en los jardines, y lo máximo que hemos llegado a coincidir ha sido en clase o en los pasillos. Recuerdo cómo en estos últimos una de las veces que pasamos cerca no sólo nos sonreímos tímidamente como las otras veces, sino que acercó su mano a la mía, y la acarició suavemente haciendo que, junto con su mirada mi piel se pusiera de gallina. Salgo de la ducha, y al recordarlo me miro al espejo y sonrío. Mis mejillas están rojas del calor del agua. Hoy va a ser un buen día, estoy segura.

Voy al vestidor y me pongo un pantalón negro y una sudadera del mismo color. Cojo mis botas militares y voy a mi habitación. Me siento en la cama y me las pongo, y cuando acabo miro hacia la mesilla, en la que está mi libro que actualmente estoy leyendo, mi móvil y, un pequeño papelito con la letra de Hero, lo que escribió esa noche. Lo leo deteniéndome en cada palabra, viendo el trazo de cada letra, y pensando en el mensaje. Lo dejo de nuevo sobre la mesilla, me levanto de la cama, cojo mi mochila y algunos libros y salgo de la habitación. Voy al salón, cojo las llaves y los auriculares y salgo del piso.

Hoy Brad empieza dos clases más tarde, así que voy sola a la uni. Pongo mi música y camino viendo los coches pasar de un lado a otro, la gente va con prisa, con vasos de café en la mano o mirando sus relojes.

Cuando llego a la universidad Emma está sentada en el mismo banco de siempre y me sonríe cuando llego

- Hola ______. ¡Joder! Hoy estás guapísima ¿Qué te has hecho? - dice mirándome

- Eres una exagerada. - digo riéndome

Vamos andando hacia nuestro pabellón, y cuando entramos veo lo mismo de cada día, los pasillos hechos un mar de gente. Me agobia la simple idea de tener que cruzar por ahí

- Vete adelantando - le digo a Emma - voy al baño

Ella asiente y se mete entre la gente. Cuando entró la baño me apoyó sobre el lavabo y me miró al espejo. Veo mis pestañas pintadas con un poco de rímel y mis mejillas sonrosadas un poco por el aire frío de otoño, y se lo que pasará a continuación, como si fuese una pequeña hoja seca la gente pasará por mi lado sin inmutarse, me empujarán y ni girarán la cara, en fin, seré insignificante.

Salgo del baño y me inundó en el mar de gente, y cómo he pensado en baño, todo ocurre, pero derrepente una mano me toca todo el culo y lo aprieta. Me giro rápidamente y veo una sonrisa familiar y repugnante, Peter. Muy tranquilo estaba, pero no iba a pasar mucho tiempo hasta que volviese al ataque. Sorprendiéndome a mí misma le doy doy una hostia en toda la cara que parece haberle cogido por sorpresa, pero se muerde el labio con la mirada gacha y arrogante y vuelve a ponerme la mano en el culo mientras intento soltarme de su agarre. La gente de alrededor no parece darse cuenta de nada, o simplemente pasan del tema.

- Vaya, estás aún más guerrera - dice acercándose a mi oído - y sabes lo que consigues con eso - dice susurrándome su asqueroso aliento sobre mi oreja - ponérmela aún más dura - sus palabras me repugnan, me entran arcadas, e incapaz de liberarme, mi rodilla le proporciona un golpe en toda su entrepierna

Se dobla por la mitad, pero vuelve a la carga con una sonrisa y una mirada que directamente, da miedo

- No creas que te librarás de mi tan fácilmente - pero justo cuando acaba la frase un puño le da en toda la cara haciendo que la cantee hacia un lado

Sorprendida miro hacia el propietario del puño y lo veo. Una corriente de seguridad me recorre la espalda. Hero.

Su mano me agarra firmemente la muñeca y me saca de la multitud despistando a Peter.
Llegamos a un pasillo en el que no hay nadie, y no aguanto más. Las lágrimas inundan mis ojos y corren sin control por mis mejillas. Hero no dice nada, sólo me estrecha sobre su pecho y me rodea con sus brazos. Me siento segura y protegida. Levanto la vista sin poder decir nada. Sus pulgares me quitan las lágrimas de las mejillas y me vuelve a abrazar.
Cuando me tranquilizo me separo de él sin apartar mis manos de su espalda

~ ÉL ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora