The Healer | Kim Yugyeom/Im Jaebum

24.

- ¿Cómo te sientes hoy, Jinho? - le pregunté al pequeño, mientras le hacía una revisión de rutina.

- Duele. - replicó, señalando el vendaje en su cabeza.

- Es por el golpe, pero pronto pasará. - anoté en mi libreta lo que el hermano menor de Yugyeom había dicho y luego, le devolví la mirada. - Hoy te harán algunos examenes, ¿bien? Sé bueno con mis compañeros.

- Está bien. - accedió él, antes de que su madre entrara a la habitación con dos vasos de café.

- Buenos días. - saludó la mujer y al llegar a mi lado, me extendió uno de los vasos. - Le traje esto, espero que no haya resentimientos por lo ocurrido ayer. No sabía que el doctor Im era su novio.

- Descuide, está todo bien. Muchas gracias. - luego de hacer una pequeña reverencia, tomé el café de sus manos y le di un sorbo.

De verdad necesitaba una dosis de cafeína, especialmente porque no había podido dormir bien en toda la noche por lo ocurrido con Jaebum. Y que la madre de Yugyeom me lo recordara, no ayudaba mucho.

- Una enfermera vendrá a preparar a Jinho para la resonancia y yo volveré con los resultados para informarle, ¿bien? - la mujer pareció tensarse con la mención de la enfermera y apretó su vaso descartable con ambas manos a tal punto que pensé que este estallaría en cualquier momento.

- ¿Podríamos conversar afuera? - pidió y sin esperar respuesta, salió de la habitación de Jinho, dejándome sin más remedio que acompañarla. - Doctora Ross, probablemente, usted no sepa esto, pero mi familia y yo preferiríamos mantenernos alejados de cierta enfermera.

- Lo sé, conozco la historia. Ella no pertenece a Pediatría, no se preocupe. - repliqué, sin ánimos de escuchar la historia de Ga Young y Yugyeom.

Lástima que la mujer no lo tomó de esa forma e interpretó mi respuesta como un pase para que continuara hablando.

- Mi hijo tomó una mala decisión y tuvimos que arreglarla. - explicó. - Hay niveles jerárquicos por una razón y deben respetarse.

- Señora Kim, el hecho de que la ex novia de Yugyeom sea una enfermera, no debería ser motivo para que ustedes la rechacen. - la mujer comenzó a negar con la cabeza, rehusándose a aceptar lo que le decía.

- Lo que hice fue por proteger a mi hijo, doctora Ross. Lo entenderá cuando...

- Cuando sea madre. - completé su oración, recordando las palabras de la mía cuando se negaba a dejarme partir a Corea. - De igual forma, señora Kim, Yugyeom es un hombre adulto hecho y derecho, debería dejarle tomar sus propias decisiones, especialmente si es sobre con quién quiere compartir su vida. - la mujer negó con la cabeza inmediatamente.

- Ella no amaba a mi hijo, solo amaba el dinero y la posición que le podía dar.

- ¿Cómo sabe usted eso?

- Porque bastó un cheque con un par de ceros para hacer que se alejara de él.

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Probablemente, iba a arrepentirme de aquello después, pero a pesar de ello, continué caminando a paso apresurado en dirección al área de Cardiología.