Mystrade One-shots

Mystrade Potterlock

El accidente esta vez fue demasiado severo para Greg, tanto así que terminó inconsciente y con la muñeca rota. Desde que lo encontraron desmayado en el campo ha estado sin despertar desde entonces, así son 10 horas y contando, y el estudiante de Slytherin de cuarto año, Mycroft Holmes siempre lo acompañaba en el hospital de Hogwarts cada vez que podía. Apenas decía algo, sabiendo que era tonto hablarle a una persona inconsciente, pero no le importaba mucho, de desahogaba haciendolo. Sherlock y John a veces lo visitaban también, igual que el equipo de Gryffindor y las admiradoras como tal...Ellas siempre le incomodaban a Mycroft, ya que nunca había tenido ni esperaba aquello, pero que su mejor amigo tuviera tantas, no sabía, se sentía incómodo.

El accidente ocurrió en el partido de Quidditch de Gryffindor contra Hufflepuff en la semifinal del campeonato, estaba diluviando, cuando la pelota le dio en el brazo después deun fuertísimo golpe, haciendo que se lo partiera. Greg aún así intentó continuar, pero en un brusco movimiento finalmente cayó de la escoba desmayado. Según Madame Pomfrey, la causa de su desmayo no fue el brazo, sino otro golpe en la cabeza que tardó en reaccionar al dolor. Y por ello estaba inconsciente ahora mismo. Se estimulaba su sueño a 12 horas máximo, pero ya estaban cerca del medio día y Greg no había mostrado señal alguna de querer despertar, y eso preocupaba un montón a Mycroft.

Este día el pobre cazador de Gryffindor se encontraba prácticamente rodeado de sus fans de otras casas y de la misma también, y de los compañeros de su equipo, cuando apenas Mycroft llegaba a la enfermería después de clases. Miró incrédulo frunciendo el ceño la escena, parado en la entrada de la enfermería, con la maleta colgando al hombro y la bufanda verde y blanca alrededor de su cuello. Miró a todos aquellos estudiantes algo molesto, le daba igual que pasaran a visitarlo, pero ya estaban demasiado cerca de Greg, y cuando se acercó a reclamarles aquello, Madame Pomfrey se encargó personalmente de ello con un buen regaño. Mycroft pudo evitar una sonrisa y cuando ya todos se iban alejando de la sección de Lestrade, entró él atravesando las cortinas que delimitaban su espacio.

-- Oh, viene a ver al señor Lestrade, Holmes?

-- Así es, señora. Podría sentarme a su lado? Yo no hago desorden a diferencia de esos chicos.

-- Mire, señor Holmes. Lestrade de verdad necesita descansar, y... -- Pomfrey se interrumpió al ver que entraba otro estudiante a la enfermería que lucía realmente grave, quemaduras severas en el rostro y torso, y antes de ir a atenderlo suspiró mirando a Mycroft. -- Bien, pero solo unos minutos.

Mycroft asintió sonriendo agradecido y fue a por una silla para sentarse a lado de  Gregory, y mirarlo mientras seguía durmiendo y recuperándose lentamente. A ser verdad...A veces incluso había visto a Gregory...Demasiado guapo para ser su amigo, demasiado servicial y fuerte, como todo Gryffindor, pero en este mismo momento, lo veía de una forma que jamás había visto a nadie en su vida. No se consideraba gay, ni tampoco bisexual, pero viendo a su amigo más detalladamente mientras dormía...Le hacia dudar un poco, bueno, bastante. Bajó la mirada y tomó su mano, cálida y algo pálida a la vez, y la acaricia suavemente. Menos mal esta área estaba tapada con cortinas, así tenía más "privacidad" con él y como a veces lo hacía, le empezó a hablar de forma apenada.

-- Heh...Idiota. Otra caída en los partidos, sé que eres muy bueno, el mejor cazador del equipo de Gryffindor de hecho, pero aun así...Te excedes mucho de confianza y de querer ser más. Ya eres grande, tienes más que suficiente, con tu puesto, con tus amigos...Conmigo...No entiendo porqué pides más. Es la décima segunda vez que te caes en el campeonato, y la décima quinta en el semestre, tienes porfavor que tener más cuidado, la próxima vez...Puede que ya no despiertes de tu sueño. Porqué? Porqué siempre te levantas a seguir jugando? No ves que ya estas herido, que no puedes seguir, aun así sacrificas tu cuerpo a cambio de la victoria...Porqué te levantas? No entiendo... -- Dijo apretando cada vez más su mano, cabizbajo y algo molesto con finalmente desahogarse, con un inconsciente. Cerró con fuerza los ojos, tratando de que no se les cristalicen, y soltó su mano, secandoselos finalmente con la manga de la túnica, para retirarse y dejarlo descansar.