Capitulo 2:¿Tu nombre?

799 55 9
                                    

¡Como odiaba ese sonido! El puto y maldito despertador.

Perdooón, no se dicen malas palabras.

Argg. No soy una persona con mucha paciencia por lo que me desespero muy fácilmente.
Cogí el depertador y lo estampé contra la pared.

Silencio.

Así, mucho mejor. Enterré la cabeza en la almohada e intente volver a dormir un rato.

Un peso cayó encima de mío, oí como alguien cogía carrerilla y sentí como encima del peso hubo otro peso, ahogué un grito, me empecé a revolver, me estaban asfixiándose contra la almohada, de repente el peso se fue por lo que pide despegar la cabeza de entre la almohada y ver a Jayden y Will un poco inquietos.

-¡Cabrones! ¡Vosotros queríais matarme!-les chillé después de una bocanadas de aire.

-Venga va, Key no te enfades. ¡Además! Tendrías que estar emocionada ¡Es tu PRIMER DIA DE CLASE!-gritó Will lanzando las manos al aire.

Argg.Me desplomé otra vez en la cama, suspiré resignada. No quería ir.

-Ahh No, no. Arriba-dijo Will tomandome de la cintura y arrastrandome hasta acabar en el suelo dado que yo no aportaba ningún tipo de colaboración.

-¡Me da igual,dormiré en el suelo si hace falta!-les dije.

Me tomó como un saco y se dirigió hasta el baño.

-¡No!¡No!¡¡NO!! ¡Otra vez noo!–grité desesperada mientras me revolvía, lo único que conseguí era que me sujetase mas fuerte. Finalmente me dejó en el suelo de la ducha. Intente salir pero Jayden ya estaba ahí para impedírmelo.

¡ZAS! Toda el agua fría encima mío. Chillé como si me estuvieran torturando, que era casi lo que estaban haciendo, esto solo provocó que se rieran de mi y esta vez no tenia una plan de ataque por lo que me límite a girar la llave del agua y ponerla templada.

- Esto se esta convirtiendo en costumbre. Si no les importa voy a ducharme ¡Ya! fuera ¡fus!¡fus!-le dije mientras hacía gestos con las manos como si fueran pájaros.

Me senté como un indio en mi espaciosa ducha y comencé a quitarme los calcetines. Me detuve unos instantes a mirar mi tatuaje, se me hizo un nudo en la garganta.
Aparte rapidamente la mirada y me seguí desvistiendo para poder ducharme.

Estaba intentando decidir que ponerme para mi primer día de infierno. Me decidí por mis amados vaqueros negros con rotos desde el muslo hasta el final del pantalón, una camiseta de Batman que terminaba un poco mas abajo del ombligo de manga larga, me calcé mis botas militares y cogí mi cazadora negra con tachuelas en las solapas. Apenas me maquillé, un poco de crema y pasarme el lápiz por los ojos.

Agarré la mochila y salí para ir a la cocina. Allí estaba mi madre,Will y Jayden. Me senté en la barra.

-Toma-me dijo mi madre entregándome un sándwich y un vaso con batido de chocolate.

Le sonreí ampliamente-Gracias!-exclamé bastante emocionada mientras cogía mi sándwich.

Casi nunca desayunaba y si lo hacía solía ser salado salvo por los cereales si no se me hace imposible comer nada por la mañana.

-Ehh A mi nunca me haces el desayuno-se quejó Jayden mientras se metía el ultimo trozo de su bollo en la boca.

-Vamos! No seas mariquita-le dije mientras masticaba.

-MAMÁ!-protestó Jade.

-Ahh ya has oído- dijo mi madre mientras se reía y chocaba los cinco conmigo, Will intentaba contenerlas mientras comía.

Del Bronx a ManhattanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora