Mi Dama del Circo (Sebastian Michaelis y tu)

💜Prologo💙

El frío arrasaba en la ciudad de Londres, obligando a las personas a abrigarse y a la gente de las calles a buscar refugio. Pero no era el caso de una chica, que andaba con tan solo un vestido azul y unas botas mientras paseaba por las calles, casi desiertas, en busqueda de algo o alguien que pareciera no aparecer en ningún lado.
Por hoy se detendría pero algo tengan por seguro, hasta encontrarlo no va a dejar su busqueda...
Agotada, se encaminó para volver a su "hogar" con su "familia". Un grupo cirquero que la acogió entre ellos cuando la encontraron, perdida, buscando fantasmas que probablemente ya nisiquiera debían rondar por ahí. Ellos la cuidaron, la apadrinaron y le dieron otra oportunidad a ojos cerrados, pero ella lo tomó de otra manera... Una perfecta oportunidad para cobrar venganza sobre quien manchó el nombre de su verdadera familia, por lo que los estupidos humanos llaman resentimiento, envidia y celos.

¿Por qué hablo sobre los humanos? Porque ella no es normal, nadie en su familia lo era y ese fue uno de los motivos por el cual los eliminaron. El temor a lo desconocido, el odio.
Pero no iba a quedarse así, y ella va a asegurarse de eso.

Llegó algo cansada, pero eso no significa que pueda ir a acostarse y dormir como cualquier adolescente de 17 años, no, ella tiene que realizar tooodas las tareas que la idiota de la "Domadora de Bestias" no hace.
No logra domar sus sentimientos por el maestro de ceremonias y va a domar a una tigresa, si, claro.

- ¡Raven! ¿Dónde estabas?

- Lo siento Beast.. - la joven rodó sus ojos (c/o) y amarró su cabello para ir donde la tigresa

- Alimentala bien, mañana hay función y tiene que..

- Seeseesee, tener energía y esas cosas, ya lo sé... - la (c/c) recibió una bofetada por parte de la mayor

Quedó mirando hacia otro lado, tomó una respiracion profunda y pestañeó un par de veces.

- ¡No me hables así! ¡Y mírame cuando te hablo! Insolente...

Haciendo caso omiso, la adolescente tomó la cubeta con carne y se acercó a la puerta de la tienda

- Insolente y todo, Joker me adora - dijo con un aura de superioridad acompañada de una sonrisa

Dicho esto, se fue a alimentar a la tigresa, dejándo atrás a la mujer enojada.

- ¡Hola Cat!

- Hola Dagger - le responde al rubio con una media sonrisa y siguió con su camino

Ella era un miembro bastante querido en ese circo a pesar de ser tan fría y de complicado temperamento. Había unos pocos con los cuales dejaba de ser así y bajaba un poco la guardia, pero, como dije, son pocos.
La joven entró a una tienda donde había unas jaulas, entre ellas, la de una gran tigresa.

- Hola Betty - la felina gruñó - tranquila... Soy yo.. Te traje de comer - automaticamente al ver a la chica, el animal se relajó y pasó a ser un simple gatito

La de ojos (c/o) se acercó a la jaula lentamente, entró y se arrodilló en el suelo mientras el felino se acercaba. Metió una mano en la cubeta, dejó los pedazos de carne a su alcance y la tigresa se acercó a deborar los pedazos de carne.

Raven se encontraba algo desanimada, amaba alimentarla pero le deprimía un poco buscar tanto y no tener resultados nunca.

- No los encontré, Betty..... ¿Crees... Que sigan vivos? - la recién nombrada refregó su cabeza contra el abdomen de la chica, como si asintiera - jeje... Yo tambien lo creo... Deben seguir aquí en Londres...

La tomó de la mandíbula y juntó su nariz con la humeda nariz de la felina, mirandola a los ojos.

- Voy a encontrarlos y escaparemos juntas de aquí, lo prometo