Teenage dream {Dougie Poynter y tú}

Capitulo 8

P.O.V Danny

Estaba en la cocina de mi casa con Geo, preparando la cena. Los invitados estarían por llegar. La mesa estaba lista y habían cervezas suficientes para todos en la nevera.

Tan puntual como el reloj, llego Tom acompañado de su novia Gi, siempre decía que esos dos eran la pareja más feliz que podía haber en el mundo.

Sentados todos en el comedor, hablando y riendo sonó el timbre, fui a abrir.

- ¡Hey ___ has venido! Me alegro mucho que estés aquí.

- Hola Danny, muchas gracias por invitarme... - Dijo ___ con una sonrisa.

- No es nada, además se que acabas de llegar a la ciudad y no quiero que te sientas sola. -Sonreí y ella me devolvió la sonrisa.

Al entrar a la casa Tom saludo a ___ . Le había sorprendido que ella llegará pero sabía que Tom no se molestaría por ello. Le presento a Gi y yo le presenté a Geo, las tres se quedaron en el comedor hablando, yo y Tom nos dirigimos a la cocina.

- ¿¡Danny como se te ocurre invitar a ___!? - Me pregunta Tom un poco angustiado.

- ¿Qué? ¿Por qué? ¿Qué pasa? Yo no veo nada de malo en ello...

- Jones, eso es lo que pasa contigo que nunca ves lo malo. Te recuerdo que esta manaña y los otros días que Doug a estado cerca de ___ se pone de malas, ¿Cómo piensas que va a reaccionar Doug? - En ese momento el timbre sonó.

- Ahora lo sabemos... - Le dije mirándolo con una sonrisa y saliendo de la cocina.

Abrí la puerta, ahí estaba Doug con una chica morena de ojos azules. Ella sonreía y Doug iba con cara sería, salude a la chica y a el y fuimos al comedor. Todos se saludaron, pero no habían señales de ___ . Mire hacia todos lados y no estaba allí. Geo paso por mi lado camino a la cocina y le susurre:

- ¿Donde esta ___?

- Esta en el baño, tranquilo - me respondió con una sonrisa en su cara.

Me senté en el sofá juntó a Tom, no quería imaginar que podría pasar en unos minutos.

P.O.V ___

Saliste del baño y te dirigiste al comedor. No se escuchaban voces no risas y por un momento pensaste que toda aquella cena había sido una broma, pero al asomarte por la puerta te diste cuenta que todos estaban ahí sentado. Entraste sonriendo.

-Danny creo que en tu baño cabe todo mi apartamento... - Levantaste tu cabeza y todos estaban callados. Al mirar a tu derecha sospechaste cual podría ser el motivo.

Estabas sentada en el sofá uniplaza, todos miraban al suelo y tu no sabías que decir. Doug ni te miraba, susurraba cosas al oído de una chica la cual no conocías de nada. El silencio se rompió cuando Geo entro en la habitación diciendo que la cena ya estaba lista, todos nos levantamos y nos fuimos a la mesa.

La cena había estado silenciosa, temas sin sentido habían salido como conversación pero el ambiente era incómodo.

Estabas en el jardín de Danny, sola con tus pensamientos y con los pies en la piscina. Mirabas el agua y te veías reflejada en ella, te preguntabas por que estabas ahí en esa casa en la soledad de la luz de la luna.

Unas risas saliendo al patio te distrajeron de tus pensamientos, te giraste y viste como Doug salía cogido de la mano de la chica. El te miraba y la chica solo reía y le miraba a el. Te volviste a girar.

- ¿Lia, por que no vas a buscar algo para beber? - Escuchaste que le decía.

Escuchaste como sus pasos se acercaban a la piscina y decidiste levantarte para irte dentro con los demás. Comenzaste a caminar pero el te cogió por el codo.

- ¿Qué haces aquí? - Te preguntó acercándose a ti tanto como para que sintieras su respiración en tu cuello.

- Y a ti que te importa... - Respondiste alejándote de él unos centímetros, pero no lo suficiente.

- ¡Claro que me importa, son mis amigos, es mi vida y has llegado a arruinarmela!

- Perdóname, pero seguro que tu vida así de arruinada hace siglos...

- ¿Qué te dije sobre lo que hablarme así?

- Mira, tu a mi no me vas a mandar, así que sueltame - Liberaste tu brazo de su mano - Pero que por ahí viene tu putita... - La chica entraba por la puerta.

Te pusiste las zapatillas y entraste a casa. No querías estar más tiempo juntó a Doug, te sentías incómoda, su mirada te hacia sentir realmente estúpida y recordar aquel beso te hacia estar confusa. No te explicabas por que su mirada era tan fría y sus labios eran algo tan adictivo.

Te fuiste de ahí con la excusa de que al día siguiente tenías que madrugar.

Al salir de la casa cogiste un taxi y le enviadte un mensaje a Jake.

"Acabo de pasar un momento bastante malo, ¿quieres pasar un rato por casa y hablamos?"

En menos de un minuto respondió con un "sí" sonreíste ante la rapidez de la respuesta.

Al llegar a casa te cambiaste y te pusiste el pijama. Jake toco el timbre a los diez minutos de que llegarás a casa, hablar con él te hacia sentir mejor. Esta noche sería eterna, tenías cosas que contarle y el a ti.