Hoy nos hemos despertado muy tamprano para llegar a Sevilla al anochecer (para salir de dudas íbamos mi padre que también había buscado trabajo allá, mi madre, mi hermano pequeño de 9 años, y yo que tengo 15).
Las maletas las habíamos echo la noche anterior, no llevábamos mucho porque la mayoría se lo había llevado el camión de mudanzas.
Nos montamos en el coche, eran las 8:30, no había dormido muy bien, así que dormí hasta que fue la hora de comer y mi padre paró en un restaurante del camino.
Intentaba imaginarme mi nueva vida en Herrera (así se llamaba el pueblo Sevillano donde íbamos a vivir de ahora en adelante), era verano y hacia calor, acababan de empezar las vacaciones de verano.
Terminamos de comer y nos pusimos otra vez el marcha.
El viaje no se me había echo pesado para nada y eso que eran 10 horas.
Cuando por fin llegamos a Herrera, eran las 20:00, porque nos habíamos entrenido mucho en las paradas durante el viaje.
Llegamos a la casa que habíamos comprado allá, como comprobareis mi madre fue a lo seguro, en muy poco tiempo compró una casa y llamo al camión de mudanzas e hizo todo, mi madre era lista cuando quería.
Cenamos un poco de fruta que mi madre había traído y nos fuimos a la cama, estábamos cansados.
Al día siguiente mi madre me llamo para despertarme.
-____ despiertaa!!!.
-Vooy mamá.
Me puse unos shorts azul cielo y una camiseta de tiras fresquita, allá hacía más calor aún que en Barcelona.
Desayune leche con cereales y me puse a juguetear con el móvil.
-____vete a comprar pan porfa que aqui estamos muy escasos de previsiones.- me dijo mi madre.
-Voy mamá.- me daba un poco de pereza pero a si aprobechaba y conocia un poco la ciudad(Herrera era una ciudad pequeña, no os vayáis a pensar que era tipo Londres o así)
