El Asistente ||Vkook||Kookv|||

Capítulo 10

Al día siguiente, Jungkook no esperaba que las personas estuvieran felices. Todos estaban hablando y cuchicheaban entre ellos. Lo más curioso que podía notar eran los sobres que tenían en sus manos.

Parecía como una invitación a un evento.

Pasó de largo y miró a Keyla entregando esos curiosos sobres que miró en la entrada principal de la empresa. Estaba extrañado de eso.

¿Sería una fiesta?

De solo pensarlo se aburrió y decidió buscar a Jimin para que le trajera su preciado café. Hoy más que nunca necesitaba un trago de ése líquido amargo que hacía que sus días fueran más llevaderos y tranquilos.

Además le evitaba la migraña.

La noche anterior no había conciliado el sueño fácilmente. Una boca sensual y con un tenue color rojizo lo había tenido con un serio problema en dejarlo dormir. Ese recuerdo en donde Taehyung estaba solo a unos milímetros de distancia de poder besarle lo había dejado frustrado.

Muy frustrado.

Caminó con paso lento por los pasillos que lo llevarían al piso en el que trabajaba. Tomó su teléfono en manos y le envió un texto a Jimin para que estuviera en la oficina en quince minutos. Necesitaba organizar su agenda y cancelar varias reuniones que tenía en esta semana. El desfile que iba a presentar en solo unos días necesitaba toda su concentración.

Además, quería que Jimin conociera al publicista con el que iba a trabajar en su proyecto, necesitaba que el se familiarizara con él para así dejarlo conocer el tipo de ambiente en el que iba a trabajar muy en el futuro.

Jungkook estaba pensando seriamente en hacer de Jimin un profesional, ya que por lo que había observado durante estos meses, el rubio era de esas personas que tomaban en serio lo que hacían. Y lo que más le gustó de él era que amaba su trabajo. Se dedicaba de lleno a ello.

Las puertas del ascensor se abrieron y cuando se dispuso a pasar, una mano larga y delicada lo tomó suavemente del brazo.

El conocía esas manos.

- Hola. - Taehyung lo saludó con una sutil sonrisa en sus labios. Jungkook miraba como el mayor se sonrojó por el pequeño gesto que había hecho hace unos segundos.

Alzó las cejas divertido cuando Taehyung quitó sus manos rápidamente.

- Buenos días. - Jungkook se adentró al ascensor junto con él mientras admiraba el conjunto del castaño. Cada día lo impresionaba más.

Taehyung respiro hondo mientras en cámara lenta miraba como las puertas del ascensor se cerraban. Una vez que el ascensor se puso en marcha, Jungkook tomó su teléfono y empezó a teclear rápidamente con el ceño fruncido.

Taehyung miró divertido como el menor estaba gruñón a las siete de la mañana.

- No llegarás a los cuarenta si sueles enojarte apenas empieza el día, Jeon.

Jungkook alzó la vista con las cejas unidas del enojo.

- Jimin llegará tarde. - Dijo con un suspiro.

Taehyung miró curioso como Jungkook se tomaba la cabeza y le hacía leves masajes.

- ¿Te duele la cabeza?

Jungkook negó. -De solo pensar que no tendré mi café en mi escritorio en estos momentos me provocará dolor de cabeza.

El menor no había dicho nada que fuera divertido o risible, pero por la manera en como eso salió de la boca de Jungkook fue demasiado para Taehyung. Solo habían pasado dos segundos y el mayor se estaba riendo como si le hubieran contado el chiste más gracioso de todos.