Mamá, mi novia es una Serpent // CHONI // COMPLETA.

Capítulo 2: Sweet Revenge.

Buenos días, hermosa Thornhill.

Cheryl despertaba una hora antes para llegar con puntualidad a Riverdale High, pero este día, era una ocasión especial. Había arreglado con Reggie para verse media hora antes en la entrada, antes de que lleguen los profesores y más importante aún, antes de que lleguen los del Southside a su primer día de clases. Tenían el plan perfecto, perfecto para una dulce venganza, obviamente, idea de la pelirroja. Venganza por el simple hecho de meterse donde no fueron invitados.

—¿Que haces despierta tan temprano?—Jason, algo dormido, se acercó a la habitación de su hermana.

—Tengo cosas que hacer.—Respondió, poniendo una última capa de labial rojo sobre sus labios.

—¿A las siete de la mañana?

Cheryl, viendo la hora, tomó su pequeña mochila con lo necesario, asintiendo con la cabeza.

—Ten cuidado, Cheryl.

—Siempre, Jay-Jay. Nadie puede cuidar a una Blossom como ella misma lo hace.

Cheryl dejó un pequeño beso en la mejilla de su hermano, bajando las largas escaleras de Thornhill intentando hacer el menos ruido posible. No sería una buena situación si sus dos padres despertaran.

Quince minutos después Reggie se encontraba en la entrada de su colegio esperando la llegada de su cómplice.

—¿Tienes todo?—Reggie alzó la ceja al ver a Cheryl llegar.

Ella abrió con cuidado su mochila para sacar dos latas de pintura en aerosol color verde, mientras, el morocho forzaba la cerradura de la puerta trasera, que gracias a sus músculos, en cinco minutos estaba abierta. Una vez dentro, los dos caminaron sigilosamente hasta el pasillo principal, donde estaban todos los trofeos detrás de un ventanal y el escudo de los Bulldogs en el suelo.

—Estoy de humor para algo de caos.—Cheryl sonrió, satisfecha, viendo como Reggie dibujaba el escudo de las Southside Serpents justo arriba del escudo del equipo. Eso les iba a traer muchos problemas, solo en su primer día.

Cheryl y Reggie decidieron esconderse en la cafetería hasta que el primer timbre del día suene, indicando la entrada de los alumnos como la de los profesores.

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—Estoy harto Toni, no pueden solo pasarnos por arriba, ese colegio era nuestro hogar, y por unos putos drogadictos tienen que cerrarla y transferirnos a este lleno de niños ricos.—Dijo Sweet Pea a unas cuadras de Riverdale High mientras terminaba de fumar su cigarro.

—Lo sé, yo tampoco quiero cruzarme con más gente como la niña mimada que nos cruzamos ayer en Pop's.—Toni rodó sus ojos recordando la situación de ayer, donde la pelirroja había culpado a los Serpents de ocupar su escuela.

—Cheryl. Es la hermana de Jason, ¿sabías eso?

—¿Qué? ¿De Jason, Jason Blossom?

El morocho asintió con la cabeza.

—Lo tienen en la sangre, supongo.—Respondió Toni alzando sus cejas y observando de lejos su nueva escala, suspirando profundo al desear que pronto se acabe.

En la entrada se encontraron con Jughead, que tenía en su rostro una expresión de enojo peor que nunca, no estaba nada de acuerdo de volver a Riverdale High, del mismo lugar que había decidido marcharse porque simplemente no encajaba.

—Tienen que ver esto.—Jughead tomó el brazo de Toni y rápidamente comenzó a correr por los pasillos de la secundaria hasta llegar al principal, donde se encontraba la hermosa obra de arte que Reggie había echo. Y todo el mundo alrededor de la misma.

—Pero que mierd...—Sweet Pea frunció el ceño mirando a sus amigos, no habían sido ellos, lo único que querían era que pase rápido la estadía en ese infierno y volver a su propia secundaria, la primera regla era, no meterse en problemas.

Sweet Pea fue interrumpido por el sonido de unos tacones, y todos los alumnos se movieron para que ella pueda pasar.

—Si director, mire lo que hicieron. Le damos la solidaria oportunidad de disfrutar de nuestra institución y la dañaron el primer día... es decir, quien sabe de que son capaces en una semana, o en un mes.—Cheryl actuaba inocente ante la situación, con el director de un lado y Reggie del otro, apoyándola.

—Ustedes. A mi oficina, ahora.—Dijo el director con enojo, señalando a los tres chicos con chaquetas negras con el símbolo que también estaba pintado en el suelo.

La pelirroja sonrió mirando directamente a Toni, ella, enojada mordió su labio inferior negando con la cabeza. Los tres siguieron al director mientras todos los alumnos volvían a sus asuntos.

Toni estaba ultima y se acercó a Cheryl posando una de sus manos en la cintura de la pelirroja, presionando sus dedos.

—Las vas a pagar, Blossom.—Murmuró mirándola a los ojos de forma intimidante.

Cheryl solo tragó en seco mirándola de la misma forma, había ganado esa vez, pero ahora cualquier cosa podía pasar.

—De ahora en más, sin sus chaquetas, ni ningún otro símbolo que represente a su pandilla. Los tatuajes, tapados.—Dijo el director con sus brazos cruzados.

—¿Qué? Eso es injusto, ni siquiera tiene pruebas de que fuimos nosotros, no puede simplemente...

—Jughead, basta.—Dijo Toni intentando calmarlo, sabía que seguir discutiendo iba a ser solo peor.

—Hágale caso a su amiga, Jones.

—Esto no se va a quedar así.

Y Jughead tenía razón, Cheryl nunca dejaría que eso termine allí.

—Genial, ahora no solo tenemos que ir a detención, sino que tenemos que dejar de vestirnos como queremos, en el primer día. Suerte de serpiente.—Suspiro Sweet Pea al salir de la oficina del director, junto a sus dos amigos que llevaban el mismo enojo que él.

—Debemos hacer algo, a Cheryl, o a Reggie, es obvio que fueron ellos dos.—Respondió Jughead bajando las escaleras para salir de la escuela.

—A Reggie.—Dijo Toni.

—¿Disculpa? Sabemos que ella es la arpía que esta a cargo de todo.—Sweet Pea alzando las cejas ya que era una buena razón como para actuar. 

—Vamos Pea, no caigas tan bajo. Esa niña ya tiene una vida de mierda, no necesita otro castigo.—Toni suspiró acercándose a sus motos. 

—Por un lado...ella tiene razón. Sus padres están jodidamente locos y la maltratan constantemente.—Jughead decidió darle la razón a Toni esa vez, poniéndose su casco. 

—Si dejamos que esto pase, ella seguirá haciéndolo, lo que nos traerá aún más problemas.—Sweet Pea se prendía otro cigarro mientras observaba a su amiga.

—Tranquilos, ¿sí? Yo me encargaré de ella, ustedes de los Bulldogs. Gracias a Jughead Veronica y Betty no tienen ningún problema con nosotros. Solo debemos hacer que nos dejen de molestar y fin, creo que sobrevivimos cosas peores.—Toni rodó sus ojos soltando una pequeña carcajada.