Como si de un cuento se tratara, el lobo había encontrado a Caperucita, pero lo que no sabía Caperucita era que estaba viviendo con el lobo y que esta vez ningún cazador vendría a salvarla, no por ahora, así que Caperucita tendría que aprender a dejarse cazar por el lobo muchas veces para que este no consiguiera matarla todas las noches mientras dormía.
Alba se incorporó de una manera violenta de la cama suspirando pesadamente, a su lado dormía Tony, quien no se había inmutado en absoluto y intentó calmar su respiración pero aquel sueño de una manera o otra, se hacía presente en su cabeza. Se levantó de la cama y cogió su teléfono móvil de la mesilla auxiliar saliendo descalza de la habitación que su novio y ella tenían en común. Desbloqueó su teléfono, tragando difícilmente y marcó a aquel número mientras que esperaba la voz de la única persona que sería capaz de calmarla al al otro lado de la línea.
─¿Sí?
Alba respiró de forma entrecortada y intentó hablar con todas sus fuerzas, aunque esta vez las palabras no encontraban la forma de salir de su boca, pero después de algunos intentos, consiguió suspirar y formar aquella palabra con todas sus vocales y consonantes.
─Mamá...
Fue lo único que dijo la peligris aquella noche a las dos de la mañana mientras que su madre la escuchaba llorar en silencio y de vez en cuando le decía un suave, estoy aquí cariño, que hacía que Alba no frenase sus ganas de llorar. La madre de Alba siempre había sido mas que una madre, una mejor amiga y siempre había escuchado a su hija y sabía de sobra por la situación por la cual esta pasaba y el gran miedo con el cual también vivía diariamente. Alba apoyó su cabeza en la parte trasera de unos de los sillones del salón y frotó uno de sus puños con su ojo como si fuera una niña pequeña de nuevo. Cuando la chica paró de llorar, estuvo escuchando las palabras de su madre atentamente.
─Sé por lo que me has llamado y puedes dormir tranquila porque Luis está bien, ahora hazme el favor y vete a descansar, mañana es tu primer día y no quiero que te quedes dormida en la presentación.─ Pero sin embargo después de aquello, Alba no colgó, había algo que dentro de ella que seguía asustando a la mayor de los Hiráldez y cuando su madre escuchó la respiración pesada de su hija de nuevo dedujo cual era el otro motivo que le había quitado el sueño a su hija.
─Todo va a salir bien, confía en mí lo mismo que yo lo hago en ti, sé que en el fondo de su corazón te sigue y te seguirá queriendo sin importar cuanto tiempo pase, pero quizás el sentido del querer no sea lo mismo para ambas. Ahora vete a dormir, Alba y deja de lamentarte por el pasado, hay algunas ramas rotas que es mejor no volver a tocarlas o intentar arreglarlas de otra manera.
Ramas rotas.
Ella.
No tocarlas.
Ella.
Intentar arreglarlas de otra forma.
La he cagado y ella ya no está aquí para arreglarlo.
Se levantó del suelo con el móvil en mano y camino de manera cabizbaja hasta llegar al dormitorio, donde para su sorpresa Tony la miraba de forma adormilada con la cabeza inclina hacia un lado y Alba soltó una leve risa al ver a su novio de aquella manera dejando su móvil en la mesilla de nuevo y metiéndose en la cama junto con el chico de nuevo. El rubio se acercó a ella mirando atentamente sus labios para después subir la vista hasta los ojos azules de la chica y Alba entendió que lo que estaba haciendo era pedirle permiso para besarla y la chica cerró los ojos intentado controlar aquellas ganas de llorar que de nuevo amenazaban con salir y si es que la chica siempre vivía con la imagen de la morena allí a donde fuera, desde que la peligris había puesto los píes en Madrid, absolutamente todo le recordaba a Olivia. Pero como no iba a hacerlo si Alba había vivido parte de su adolescencia en aquella ciudad y otra gran parte de su adolescencia la había vivido con la cercanía de la morena en todo lo que hacía y Alba sabía que había un granito de ellas dos en casi todas las calles que pisara de ahora en adelante y como le hubiera gustado haber seguido haciendo granitos de arena en el resto de calles que les quedaban.

YOU ARE READING
broken roots.
Teen FictionDoce chicos con historias pasadas y futuras en común y con algunas otras totalmente paralelas, viviendo un presente e intentando arreglar las ramas rotas del pasado y otras muchas que encontraran en un futuro más cercano de lo que creen. Pero las am...