-Amelie escúchame, todo debe tener una explicación. Estoy segurisima- dijo Rebecca.
-No, no quiero saber nada más sobre ellos- dijo Amy con voz ronca de tanto llorar.
-Antes tenes que hablar con él.
-No quiero volver a...
El timbre interrumpió en el depto.
-¿Quién es?- preguntó Amelie
Era James, estaba vestido con sus autenticos jeans y su camisa blanca. Rebecca decidió irse rápidamente. Amelie sintió como sus piernas flaqueaban. Ambos cruzaron miradas y miles de sentimientos, miles de palabras se quedaron estancadas en un segundo infinito.
-Am-melie tenemos que hab-blar- tartamudeó el rubio.
-No tenemos nad...
-Por favor, claro que si- la cortó- Yo nunca quise besarla ella se me tiro encima, se confundió cuando intentaba consolarla.
-No, digas lo que digas, nada me va hacer cambiar lo que pienso, lo que vi, lo que siento- dijo Amy gelida.
James amago entrar y Amelie le dio la espalda sin decir nada.
Ella se encontraba con la cabeza gacha y los brazos cruzados, en su cabeza rondaban miles de formas de sacarlo a James de su departamento pero sabia que si volvia a ver esos ojos, azules como el cielo, perdería todo su valor.
-Deja de pensar, tan solo escúchame. Las cosas no sucedieron como yo queria, se me fue de las manos. No logro comprender por qué no me quieres escuchar, si solo confiaras en mi. Pero no, por culpa de esa estupida pelea del pasado crees que...
-Callate, deja de hablar estupideces. No sabes nada- le gritó.
-Lo único que sé, es que estoy enamorado de vos y parece que no sentis lo mismo, ¿Por qué no confías en mi?- dijo James con voz ronca.
-No te creo ni una sola palabra.
Amelie lo miró a los ojos mientras lágrimas caían sin cesar sobre su rostro.
-Creo que lo mejor será tomarnos un tiempo, esto no esta funcionando.
-¿Tan rápido te rendís? Creí que dijiste que estabas enamorado, pero ya no puedo creer ni lo que oigo, te das cuenta? - James iba a responder pero ella lo cortó- Sabes qué? Tenes razón esto no esta funcionando hace lo que quieras pero déjame en paz. No te quiero ver más James.
Amy esquivo al rubio y salió corriendo de su propio depto.
Comenzó a caminar por el parque mientras lloraba desconsoladamente y escuchaba música con sus auriculares. El cielo estaba nublado y unos relámpagos amenazaban con tormenta. Decidió sentarse bajo un árbol para descansar. Cuando levantó la vista hacia se quedo perpleja. En aquel árbol se hallaba el corazón con las iniciales "A y J" que aquella vez James había escrito para sellar su amor. Amelie se sintió tan débil y a la vez tan molesta que tomó una piedra y la lanzó con toda su furia, creando así un hueco entre medio de las dos iniciales.
***
Semanas después...
Despertarse a la mañana, mirar hacia un costado y no ver a James causaba en Amelie un frío de pies a cabeza. Ya había pasado un largo tiempo desde la última vez que se vieron, pero ella sentía que aún no se habían dicho todas las palabras necesarias.
-Lo extraño, no se nada de él desde que decidimos tomarnos ese tiempo- dijo Amelie apenada hacia su amiga.
-Me entere que consiguió un departamento cerca del bar.
-Me siento mal, por momentos creo que todo fue mi culpa y que lo deje ir.
-No Amy, no te sientas culpable por la necedad de los demás.
-No quiero hablar de ella.
-Si tenes razón. Deberías animarte un poco- Rebecca se quedo pensando, como si se le hubiera ocurrido una idea.
Abrió las cortinas de la habitacion, hecho perfume y con una amplia sonrisa conecto su celular a unos parlantes.
-Agh, es mucha luz becca- bufó Amelie.
-No seas tonta. Quiero que escuches esta canción.
Amy cerró los ojos y se dejo llevar por la música, suave y tranquila.
"No sos tan gris,
es que todo se volvió gris.
Cerraron la puerta del sendero,
perdieron la gracia del cartero.
Antes eras una flor,
pintabas el cielo de amor.
Ahora que no tenes mas vuelo,
quedaste tan sola, ¿te vencieron?
Una nube va sin fin
trepando por el verde jardín.
Deja que te envuelva el pensamiento,
volvé a besar tus sentimientos.
In the night just follow me,
just follow me,
just follow me.
In the night give me your soul,
I keep it warm
beneath my feet.
No te dejes más vencer,
al alma hay que darle de comer
un poco de azúcar del estero,
un poco de risa y caramelos. "
***
Espero que la letra de esa canción les haya gustado, es ideal para este capitulo. No es una canción muy conocida asi que deje el video en multimedia!
No olviden votar y comentar.
Gracias.
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La fuerza del Destino (Novela corta)
RomanceUna de las primeras novelas que escribi, habla sobre las vueltas de la vida y, claramente, el destino, el amor y más. Sumergete en esta corta historia y descubre las emociones de James y Amy. Facil de leer y comprender. Todos los derechos reservados...