Love Triangle [Thv, Myj, Pjm]

6

   

Tiempo de recordar.

Los aspectos de la vida aveces no son favorables, los momentos son perjudiciales incluso para las personas más importantes en la vida misma. El amor no es fácil y nunca lo será, podrás ser correspondido pero también puedes ser rechazando a tal forma de quedar herido con tan solo unas palabras hacía ti mismo.

— ¡Geu Roo! — gritaba el chico frente a mi — Que piensas, crees que ella en verdad me ame.

Que podía decir. Hace unas semanas atrás Jimin había llegado tan enojado por el simple echo de encontrar a Yoongi en el sofá que por unos momentos me hizo creer que tenía celos de el y eso elevo mis esperanzas a un nivel tan alto que no quise ver las verdaderas razones a su comportamiento, el solo se preocupaba por mi como un hermanó mayor era tan simple de saber.

El tenía otras expectativas para su chica ideal y al parecer la había encontrado.

— Ella lo hace Jimin — respondí cabezabajo — Creo que ella enverdad te ama.

No podía expresarle mi felicidad a algo que me destruía por completo. Jimin era el unico verdadero amigo que había tenido y por esos motivos mi corazón lo eligió, el me protegía de todo lo malo que pasara en la escuela de las burlas que yo resiciviera el estaba para defenderme, el era mi todo y al parecer en estos momentos de vida que había tenido junto a el lo estaba perdiendo.

— Eso crees — suspiro — es que no se, creo que vamos muy rápido ya vamos a cumplir cuatro meses y siento que es la persona con la que debo compartir toda mi vida.

Parecía tan feliz que era obvio de saber lo que en verdad sentía por mi y era más fácil aceptarlo ahora o nunca, su pequeña hermana menor.

— Sonríe — si es lo que tu crees esta bien... Lo que importa es que los dos se quieran y no... Juegues con sus sentimientos Jimin. 

— Eso jamas — comenzó a jugar con sus dedos de manera nerviosa y estresada — Ella es la chica que necesito en mi vida, Suzy  Mi chica.

Su chica "ideal" claro tan obvio, linda con buen cuerpo, cabellera totalmente perfecta y una amabilidad tan estupenda que era un ángel enviado para hacer el bien entre todos los seres humanos todo lo contrario a mi que  solo soy gruñona, pesimista con un carácter terrible  y una cabellera de estropajo terrible.

¡Todo en mi es horrible!

No se si llorar, no se si caer entre la realidad de mis defectos y descualidades de todo lo malo que tengo. Siempre término tan mal que el mismo chico que e querido en toda mi vida jamás se fijara en mi como una mujer si no como una niña pequeña.

— Eso suena muy lindo de tu parte Jimeno — Estaba tan dolida que solo podía mostrar sonrisas tan falsas, no tenía el animo de seguir hay con el seguir esperando que un día el llegara y me tomara por ambos hombros y me dijera que todo este tiempo fingió no podía con la misma mentira que yo me cree — Creo que es momento que me valla, debo irme con mamá a su repostería o se enojara mucho.

— Si entiendo, ve con cuidado por favor  — Respondió. Comencé a recoger cada uno de mis cuadernos encontrados en la butaca principal del aula, antes de comenzara un momento incómodo entre nosotros

— Si eso haré. Te veo en el edificio — dije para salir rápidamente de aquél aula.

Mi consciencia no estaba muy perfecta. Las cosas malas que había echó, las mentiras que por obvias razones había creado, todo eso estaba en mi mente ahora y no podía sacarlo puesto a que entre más las cosas se acumulaban más empeorarían y comenzaría una guerra entre decir y alejar a la persona más especial por mis estúpidos sentimientos que jamás debieron a ver existido.

Pero notarialmente había algo que agradecer y era el caminar en los pasillos de la escuela, realmente me estaban ayudando a tomar consciencia y a recapacitar en mis actos extrañamente. Los pasillos se notaban demasiado sólos sin vista a ningún alumno en ella o eso creía.

— ¿Tu eres In Geu Roo?  — preguntó una chica. Totalmente estaba confundida en una escuela tan grande y con alumnos de promedio quién sabría quién soy yo.

— Eh. Si creo que sí — respondí. La joven chica solo me miró y luego comenzó a sonreír para unos instantes tomar de mi brazo y guiarme a un lugar.

— Eso es perfecto — tomo de mi brazo — todos están esperando a que tú llegues — mencionó feliz.

Esta chica totalmente no me daba buena pinta, era muy linda y agraciada pero su mirada mostraba más que una simple chica buena era como si totalmente de esa cara de ángel por dentro tuviese una cara diferente, una al mismísimo demonio.

— ¿A que yo llegué? — pregunte confundida, no sabía a que se refería con exactitud pero fuese lo que pasara no sería muy bueno.

Caminamos unos cuantos pasos para poder llegar a la puerta de la cafetería, era algo sorprendente por que al poco tiempo la chica solo me soltó y dijo que era mi turno de caminar sola y ver lo que me esperaba dentro del comedor.
Camine y a pasos lentos me comenzaba de percatar de ciertas  imágenes tiradas al piso e incluso de frases como "Solitaria" "De donde vienes" "largate" "Roba novios" "Matate" "No vuelvas" y más cosas ofensivas que en algunos momentos dolían. 

Pero al diablo me valía lo que estas personas hablaran de mi.

No quise entrar a la cafetería pero ya no había vuelta atrás así que solo lo hice y entre.

— ¿Que significa todo esto? — pregunte entre mi. La pared del comedor se encontraba forrada por un enorme cartel donde se podía apreciar el detalle que habían echó para "avergonzarme" y arruinar la escasa reputación que tenía.

— Así que andas con todos ellos — hablo la misma chica de hace unos momentos — Yoongi, Jimin, Taehyung y también con nuestro Hoseok. — comenzó a chasquear su lengua — No, no. En tu casa nunca te enseñaron a no ser una cualquiera.

Mi sorpresa creció aun más, la gran mayoría de la escuela se encontraba en la cafetería observando y riendo de manera descontrolada y burlesca.

—  ¿ Quien hizo esto? — Solo pude susurrar. Realmente nunca me metía en problemas o cosas así por la simple razón de evitar estos tipos de problemas.

— Oh! realmente no sabemos, esto ya estaba echo y yo solo te traje asta aquí —  respondió la chica — es una lástima que te hayan echó esto verdad y enfrente de todos los de la escuela.

Pocos minutos me valían, no me importaba la verdad escucharla, lo único que realmente importaba era saber quien me haría daño para hacer algo  tan malo por simple maldad, como mostrar imágenes obscenas sobre mi, cuando jamás había sido de problemas y cosas así, tal vez dios me daría la respuesta y hací fue.

De la puerta entro un chico, el maldito chico que había echo esto por mera venganza, por mero propósito de dañar mi integridad y autoestima algo que jamás lograría.

— ¡¡Tu fuiste!! — dirigí mi mirada al chico — eres tan patético que no sabes hacer algo mejor ¡Idiota!