Capitulo 16: ¿Por qué?

103 6 0
                                    

Pasaron dos días de lo que ocurrió con Kim y nunca se dignó a venir a hablar conmigo. Yo no salí nunca de mi casa. No quiero ver a nadie. Estuve comiendo solo comida chatarra y algunos aperitivos, como papas fritas y maníes. Estoy durmiendo todo lo que no pude dormir desde miles de años y mi cuerpo lo agradece. Mis nudillos están sanando de a poco y siempre los estoy desinfectando para que no me agarre una infección. Todo esto lo aprendí cuando me hacía los cortes en mis brazos. Sabía a la perfección que mis cortes eran tan profundos que si se llegaban a infectar, eso iba a terminar muy mal. 

Ya está cayendo la noche en mi habitación y estoy por dormirme nuevamente para despertar en mi tercer día de no querer ver a nadie. Mis párpados pesan tanto que me es fácil conciliar el sueño.

Me despierto de repente en mi habitación con el pulso acelerado y no comprendo la razón hasta que escuchó nuevamente un ruido en la cocina. Creo que alguien debe haber entrado a robar. Quizás piensan que no hay nadie debido a que no salí hace días. Me propongo levantarme para revisar si lo que escuché realmente es un ladrón o no. Cuando llegó a la cocina no encuentro nada. Revisó toda la casa y no encuentro nada en ningún rincón. Me digo a mi mismo que simplemente debe haber sido mi imaginación. 

Me encamino hacia mi habitación y siento una punzada extraña en el pecho, pero no le hago mucho caso. Abro la puerta, que de los cuales la había dejado abierta antes de salir, y es justo en ese momento en que la veo. Está junto a la ventana, lleva un vestido blanco que le queda increíble, como todo lo que se pueda poner. Su cabello cae suelto en su espalda y se de antemano quien es. Pero es imposible. Ella ya no está más conmigo. ¿Por qué puedo verla? ¿Qué hace acá? Entonces, como si pudiera oír mis pensamientos, se gira para verme directamente a los ojos. Sus ojos que antes eran marrones casi negros, ahora son blancos casi grises y eso me desconcierta un poco. Ella parece estar queriendo decirme algo pero las palabras no salen de su garganta. Quiero correr a abrazarla y decirle que la extraño demasiado pero no puedo moverme. Es como si mis músculos no reaccionan a la acción y no entiendo que pasa. Quiero gritar su nombre pero tampoco soy capaz de articular alguna palabra. No se que me esta pasando. Una punzada dolorosa me saca de mis pensamientos. 

En ese momento me percato de que no estoy parado en la puerta, si no que estoy acostado en mi cama sin poder moverme. Mi cuerpo no recibe las señales de mi cerebro y mi boca solo puede articular quejidos. Me estoy desesperando demasiado y esto no es bueno. Trato de tranquilizarme pero cuando lo intento, mi vista cae en la persona que se encuentra en la punta de mi cama, observando como si mi situación la hiciera feliz. Tiene todo el cuerpo bañado en sangre. ¿Por qué Eli me esta haciendo esto? ¿Qué está pasándome? Mi pulso está tan acelerado que podría jurar que se saldrá y hará un hueco en mi pecho. 

Lágrimas comienzan a recorrerme las mejillas y cuando parpadeo para que mi vista no se nuble. Cuando abro los ojos, no hay nadie en mi habitación. Mi cuerpo parece reaccionar repentinamente y mis extremidades duelen demasiado, como cuando tienes un calambre durante la noche. Como puedo me llevo las rodillas al pecho y escondo mi cabeza en el hueco que hay entre medio. No puedo parar de llorar. No entiendo que me esta pasando. ¿Qué acaba de ocurrir? ¿Fue todo un sueño? ¿Producto de mi imaginación? ¿Delirio por mala alimentación ? ¿Qué carajos fue todo esto? 

Estoy tan sumergido en mis pensamientos que no me percato de que alguien está llamado a la puerta de la casa. Me doy unos minutos para tratar de tranquilizarme y limpiar mi rostro que debe ser un asco. El timbre no deja de sonar y eso me esta alterando. ¿Quién carajo puede ser? 

Me muevo con lentitud debido a que mi cuerpo aun se siente adolorido. Llegó a la puerta y le quitó el cerrojo para ver quien está del otro lado de la puerta. Cuando abro la puerta, Kim se encuentra del otro lado, con los ojos lloroso y ojeras debajo de ellos. Nuestros ojos se encuentran y ella no duda ni un segundo en tirarse encima mío para abrazarme. Quedó paralizado durante unos segundos pero cuando reaccionó, le devuelvo el abrazo.

-Lo lamento demasiado. Me siento como la peor amiga en el mundo. Lo lamento tanto. Pensé que simplemente estabas ignorándome, pero cuando me enteré por tus compañeros de curso que hace rato no ibas a cursar, me empecé a desesperar. Te había dejado millones de mensajes pero nunca te llegaron. Pensé que me habías bloqueado y cuando te llame, me mandó directo al contestador. Pensé lo peor. Lo lamento tanto.- dice en mis brazos y con lágrimas que no dejan de caer de sus mejillas.

-Tranquila. Estoy bien. Nada puede pasarme. Hierba mala nunca muere. No te desharás de mí tan fácilmente. Solo quería descansar un par de días de todo los estudios.

-¿Y porque no contestaste mis llamadas?- angustia tiñe su tono de voz.

-Rompí mi teléfono el día que peleamos. Lo rompí en mil pedazos contra la pared. No dejabas de llamar y me estaba desesperando- digo, porque es cierto.

-¿Qué hiciste que?- su mirada baja a mis manos y levanta una para revisar. Entonces se da cuenta del estado en que se encuentran mis nudillos- ¡Por Dios! ¡Josh! ¿Qué hiciste? Mira esas heridas. Hay que ir a un hospital a que te las revisen.

-Tranquila, mamá. Me las desinfecto todos los días. Gracias a mi pasado desastroso, supe como curarme yo solo y nunca me paso nada. Así que no hay necesidad de ir a un hospital.- trato de sonar divertido pero no lo logró.

-Eres un idiota.- trata de sonar enojada pero nunca le ha salido.

-¿No me ves hace bastante y esta es tu forma de decirme que me haz extrañado hasta la médula?.- bromeo.

-Eres un tonto, pero no sé qué haría sin ti.- me abraza nuevamente y me siento completo por unos instantes.

¿Cómo Vivir Sin Ti?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora