Esa tarde Wonwoo venía llegando más temprano que de costumbre. Se quitó el abrigo para tirarlo en el sofá y alzó un poco la voz, creyendo que su pareja estaba en la casa.
-¡MinGyu, estoy en casa! -Exclamó mirando a su alrededor, notó entonces que MinGyu no estaba en la casa.
Con resignación, caminó a la mesa del comedor para poder seguir con el trabajo que había traído a casa. Sacó sus varios libros para dejarlos encima pero antes de sentarse, el timbre sonó. Gruñó entre dientes, ¿MinGyu había olvidado de nuevo sus llaves?
Se levantó dispuesto a regañarlo por ser tan torpe, pero apenas abrió la puerta un enorme arreglo de rosas rojas se dejó ver. Un chico un tanto bajo apareció de uno de los costados, con una tableta en su mano. Saludó con una sonrisa.
-Buenas tardes, ¿Jeon Wonwoo? -Preguntó el chico con una cálida sonrisa.
-Soy yo -Respondió un poco confundido, apartó un poco su mirada y su boca se abrió por la sorpresa. Tras el joven repartidor había un hermoso arreglo de rosas rojas, sus favoritas.
-Tiene una sorpresa del joven Kim MinGyu -Anunció el chico ladéandose un poco para que pudiera verlo, otros dos chicos un poco mayores tomaron el arreglo entre los dos y se acercaron. Wonwoo se hizo a un lado para que entraran, indicando un lugar vacío en la sala para que lo dejaran ahí. -¿Puede firmar ahí? -Preguntó extendiéndole la tableta.
Wonwoo asintió tomando la tableta para poder firmar en todos los lugares que le eran requeridos. Luego de devolverla se despidió de los tres chicos y cerró la puerta, volteando para apoyar su espalda en ella y mirar ese enorme arreglo que ahora estaba en su sala.
Oh por Dios.
Era bellísimo, era tan perfecto, le sorprendía un poco que Mingyu hubiera recordado algo como sus flores favoritas. Suspiró con una amplia sonrisa, MinGyu podía ser todo: Despistado, impuntual, un poco bobo a veces, impuntual y empalagoso. Pero era su novio, amaba todos de él, y sabiendo que se había comportado mal con él decidió devolverle el gesto.
Empezó guardando todo el trabajo que iba a comenzar y ordenó la mesa un poco. Miró la hora en el reloj de pared, faltaba una hora -o un poco más- para que MinGyu llegara de su turno. Fue a la cocina y se colocó el delantal, hacía mucho que no cocinaba pues ni él ni Mingyu pasaban en casa, esperaba no arruinar el intento. Tras lavarse las manos, sacó todo lo necesario y empezó.
Murmuraba la receta, casi para poderse sentir seguro de lo que hacía. El silencio le ayudaba a estar tranquilo al cortar los vegetales y la carne. Prendió el horno, preparó la salsa, el plato fuerte estaría listo muy pronto. Al escuchar su teléfono lo sacó de su bolsillo, una amplia y estúpida sonrisa se formó en su rostro al ver el nombre de MinGyu en la pantalla.
-¡MinGyu-ah! ¿Qué tal va...?
Pero la grave voz de Seungcheol dándole la noticia hizo que sus ojos se llenaran de lágrimas. Apagó el horno quitándose rápido el delantal y salió corriendo en busca de un taxi.
Le habían disparado a MinGyu, y esta vez era grave.
-¡JiHoon! ¿Qué estás hacien...? -Preguntó Jeonghan levantándose de su escritorio al ver cómo el pequeño doctor entraba de golpe en la sala de urgencias seguido por un agitado policía con el rostro lleno de polvo.
-¡Hyoyoung, necesito que te encargues de Seungcheol! -Ordenaba el médico, antes de coger una de las batas y entrar al pabellón donde MinGyu iba llegando.
Seungcheol se vio de pronto detenido por la enfermera que intentó calmarlo para después llevarlo a uno de los salones y curar las heridas que este tenía. Mientras tanto, Vernon corría acompañado de Seungkwan quien le daba los antecedentes de lo ocurrido por MinGyu antes de que ambos entraran.
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LOVE'S EMERGENCY. [JICHEOL]
FanfictionLas puertas de su oficina se abrieron, salió seguido de sus enfermeras. -¿Causa de las hemorragias? -Ha recibido tres impactos de bala. Dos en el abdomen. -¿Nombre del paciente?. -Choi SeungCheol. JiHoon apresuró el paso. No se permitiría perder a...