8. I

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—Es solo intuición. -Luke se defendió mientras rodaba los ojos.

—Como digas. -Calum se puso de pie.

—¿A dónde vas?

—A buscarla. -contestó como si la respuesta fuera tan obvia.

—¡¿Qué?!

—¿No quieres conocerla?

—No de esa manera. -negó levemente.

—Perdiste tu oportunidad en la tienda de música.- comenzó a contar con los dedos de su mano derecha. —En los bolos, en el concierto...

—Ya, ya entendí tu punto. -se rindió. Calum carcajeó.

—Vamos Luke. -entró en tono de seriedad. —Es muy raro que una chica llame tu atención, y ahora que al fin tienes una en tus bellas narices decides huir. ¿Sabes? No me llaman Calum Atrevido Hood por nada.

—¿A qué te refieres? -inquirió con una mueca extraña y ambos rieron.

—Voy a acabar con tu timidez. -y antes de que Luke pudiera interrumpir, Calum salió a un destino indefinido. Ojalá no haga alguna tontería.

Al día siguiente Ashton despertó en casa de Gracie.

Llegando del concierto ambos habían decidido tener una de esas pijamadas que solían hacer casi todos los días, y como se habían desvelado estaban despertando demasiado tarde. Ya eran las doce, mediodía.

—Buenos días. -treinta minutos después, Ashton apareció en el marco de la puerta de su amiga, ya duchado y cambiado pues tenía planes.

—¿Vas a algún lado? -respondió tallandose los ojos. Ella aún quería dormir.

—Vamos. -le corrigió. —Cambiate, date una ducha. Hueles feo. -bromeó.

—¿Ya me olfateaste a caso? -Ashton negó y se acercó senrándose al borde de la cama.

—Anda, duchate, vístete.- le dió un suave golpe en la pierna.

—Ya voy. -se puso de pie. —Pareces mi padre. -se quejó y entró en el baño.

El celular de Ashton comenzó a sonar.

—Hey, Michael. -atendió.

—¿Estás libre hoy?

—No para los videojuegos. Estoy con una chica.

—¿Y está buena?

—Es Gracie, idiota.

—Está buena.

—Ya cállate. ¿Qué quieres?

—Estoy aburrido, Ashton. -rió. —Traeme algo de comer y traeme a Gracie. -bromeó. Amaba molestar a Ashton de ésa manera.

—Ya. ¿Nos vemos en el McDonald's o algo? Iba a invitarla.

—No quiero arruinarles la cit... ¿Al fin la invitaste a salir? -preguntó gritando. Ashton sonrió y negó con la cabeza, aunque sabía que Mike no podía verlo.

—Es una cita de mejores amigos y lo sabes.

—Atrapado en la friendzone una y otra vez. -canturreó al otro lado de la línea.

—Nos vemos allá en media hora. -colgó.

Minutos más tarde, Gracie estuvo lista y salió del baño.

—Vamos a comer. -le dijo al instante en que la vió.

—Que amigo tan amable amaneciste. -le sonrió. Amigo.

(...)

—Mira, allá está Michael. -Ashton señaló y ambos avanzaron hasta una de las últimas mesas del establecimiento.

—Hey. -saludó Mike.

—¿Verde, Michael? ¿En serio? -ella se acercó sentándose junto a él y comenzó a tocar y mirar su cabello. —Pareces el increíble Hulk. -rió.

—Te equivocas. El se ha tintado así por parecer un umpa lumpa. -una voz desconocida para Gracie se dirigió a ésta y quitando sus ojos encima del tinte de Michael, pudo ver de donde provenía aquella voz.

—¿Hola?

—Permíteme presentarme. -extendió su mano. —Soy Calum. -estrecharon ambas manos y Calum se sentó en la misma mesa, junto a Ashton; frente a Michael y Gracie.

—Es Gracie. No la conoces. -explicó Michael. —Y ése de ahí es Ashton. Iba en la escuela con nosotros... Era el que te molestaba por que eramos menores.

in my placeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora