SÓLO POR UN MES ➳ JOERICK [EN EDICIÓN]

Día 5.

12 de Diciembre de 2022.

"Joel toma de su café en silencio mientras que juega con sus anillos, a excepción del anillo de matrimonio que compartía con Erick, ese se lo ha quitado ya."

Día 5.

Erick despierta sintiendo un fuerte dolor de cabeza y una humedad en sus mejillas, sin mencionar sus labios fríos y resecos.

Él está muriendo de sueño literalmente. No pudo dormir durante toda la noche y esto se debe a una simple razón: Joel.

Erick en verdad está muy asustado por lo que sucederá de ahora en adelante. Sabe que aunque le diga mil veces a Joel como fueron las cosas él jamás le va creer y no lo culpa, sabe que la escena de los labios de Johann chocando contra los suyos no juega a su favor en lo absoluto.

Erick se maldice, debió detener a Johann, debió decirle que no le agradaba su cercanía pero la lástima le ganó a la valentía y ahora se ha jodido todo y es solamente su culpa.

Erick se levanta y se dirige al cuarto de Tania, abre la puerta y siente angustia al no verla ahí por lo que rápidamente baja las escaleras y camina hacia la cocina, su cuerpo se invade de alivio al ver a su pequeña niña sentada desayunando junto a Joel, los dos hablando.

—Entonces, ¿Qué le respondiste? —la voz ronca de Joel suena por la cocina, Erick siente como los vellos de su piel se erizan al escucharlo.

—Le dije que que era cool tener dos papás, luego me fui a jugar con mis amigas —Joel sonríe hacia Tania y acaricia su mejilla. Erick decide que es tiempo de hacerse notar por lo que entra por completo a la cocina.

—¡Buenos días, papi! —Tania le saluda, Erick besa su frente y después se dirige al refrigerador para poder tomar un poco de jugo.

—Tania, apresúrate, se hará tarde —ella asiente y acata las órdenes de Erick, luego, sale corriendo a toda velocidad hacia su cuarto para poder lavar sus dientes y arreglar su cabello.

Joel y Erick quedan solos en la cocina.

El silencio incómodo no tarda en presentarse. Sólo unos cuantos traqueteos al momento en el que el pelinegro logra sacar un plato que estaba apilado es lo único que se escucha. Joel toma de su café en silencio mientras que juega con sus anillos, a excepción del anillo de matrimonio que compartía con Erick, ese se lo ha quitado ya.

Erick, a diferencia de él, aún usa el anillo de matrimonio.

Cuando finalmente el menor está decidido a hablar, Joel se levanta y sale de la cocina, el ojiverde pierde su oportunidad así que hace un puchero.

Luego de unos minutos en los que el desayuna, Tania baja completamente preparada para ir a la escuela. Ambos salen tomados de la mano.

—Tania —la aludida que venía jugando en la calle, saltando para intentar no pisar las líneas que hay sobre el pavimento, le voltea a ver.

—Uhmm.

—Alcancé a escuchar algo sobre lo que hablaban tú y tu papá Joel mientras desayunaban. Algo sobre una respuesta que le dijiste a alguien.

—¡Oh, sí! ¿Qué tiene eso, papi? —ella no logra comprender el porqué su papá le ha preguntado sobre aquello.

—Bueno, quisiera saber sobre qué hablaban, princesa.