El Diario De Rose.

Capítulo 11 - Nada es como antes.

21 de agosto de 2014

No sé si debo sentirme feliz o enfadada ante este día. Como ya os conté, yo ya no soy la misma. Sé que es difícil cambiar, pero todo lo sucedido ha echo que lo hiciera. Así que, relataré mi día de hoy.

Como todas las mañanas, cuando el sol dio de pleno en mi cara me levanté, algo malhumorada pero con bastantes energías que los días anteriores. Me desperecé y Lía salte a mi cama en cuanto noto un movimiento mio. Yo la abrace y la acaricie durante varios minutos. Tras llenarme la cama de pelos baje de esta. Me miré en el espejo. Mi cuerpo estaba delgado, podía coger mi muñeca con dos dedos. Había quitado aquellos michelines que tanto odiaba de mi tripa, y me sentía orgullosa de eso. Mi pelo caía desproporcionadamente por mis hombros. Lo tenía liso y oscuro.

Me froté los ojos y baje las escaleras, a paso lento ya que aún estaba dormida. Mi padre me había dejado una nota en la cocina. Volví a frotarme los ojos para leerla.

" Hola Rose, quería decirte que hoy llegaré tarde a casa, he quedado con Bella y hemos ido al bosque. Espero que no te moleste mi amor. Un beso, te quiero más que a nadie. Papá."

Mi padre creía que yo estaba celosa por mi comportamiento cuando el me hablaba de ella. Y lo que él no sabía es que no era por ella, si no por su hijo.

Tras tomarme unas galletas de pepitas de chocolate (de la panadería y echas por Josh) subí a mi habitación y tras lavarme la cara y los dientes y peinarme, decidí salir a dar una vuelta con Sam y Travis.

Abrí mi armario y busque algún conjunto que ponerme. Finalmente escogí mi crop top negro, junto con mis shorts rasgados negros y mis zapatos de plataforma, negros también. Abrí la puerta y llamé a Lía, que vino corriendo. Tras cerrar toda la casa caminé hasta el punto de encuentro con Sam y Travis. Era un simple banco desgastado.

Tras esperar unos minutos, vi a lo lejos a Sam y a Travis. Últimamente les había visto muy juntos y y cariñosos. Yo sabía que Sam estaba coladita por él, pero Travis no me quería hablar d lo que sentía por ella, así que me límite a pasar del tema. Tampoco quería meterme donde no me llamaban y tampoco quería añadir uno más a mi lista de problemas.

Pasamos unas horas juntos hasta que ellos se tuvieron que ir, A LA MISMA HORA Y JUNTOS. Qué coincidencia, ¿no? Estaba segura de que algo pasa entre ellos pero no sé por que no me lo quieren contar.

Miré mi reloj, las 13:40. Decidí ir con Lía al sitio quemas me encantaba, y que más malos recuerdos me traía. Al viejo árbol de laa rueda. ERa mi sitio favorito para pensar, aunque siempre que lo hacía me derrumbaba sin poder evitarlo.

Al llegar allí dejé que Lía corriera un rato por los limpios prados verdes. Me senté en la rueda y me balancee un rato en la rueda, mientras cantaba Olor A Mandarinas, una canción de Zahara, mi artista favorita. Esta canción habla del amor, de lo que yo una vez sentí, de lo que más feliz me hizo en su día. Y es que, yo no quiero un final feliz, solo quiero serlo. (1)

Esa canción realmente me encantaba. Y a otra persona también. Alguien la cantaba detrás de mi. Era un chico, lo supuse por su grave voz. Esa voz que había hecho que mis pelos se pusieran de punta. Y que lo había vuelto a conseguir. Oía su voz a solo unos centímetros de mi.

La letra de aquella canción seguía saliendo por mis letras, mientras mis ojos se inundaban, y una lágrima luchaba por salir de aquel mar. Miré hacia abajo. Y vi unos pies, además de los mías. No aguantaba más. No podía. No. Más no. ROSE HA CAMBIADO.

Me levanté con las fuerzas que aún me quedaban y comencé a caminar. Como si nada hubiera pasado. Ignorandole. Por que es lo que mi mente necesitaba, pero lo que mi corazón odiaba.

- Rose... Espera. Dejame almenos mirar tu cara una vez más. Dejame observarte una vez más.

- No, no puedo -mi voz sonaba mas fría de lo necesario.

- Sé que tenía que habértelo dicho, y que ahora no querrás escucharme pe...

- Tienes razón. No, no quiero escucharte - finalmente me giré, cuando me aseguré de que aquel mar había cesado. - No quiero oír más ni una de tus mentiras. No quiero volver a ver tu sonrisa falsa. No quiero volver a verte más. Me estas arruinando mis días. Me has roto por dentro Josh. Jamás te lo perdonaré. No creas que con dos palabras vas a conseguir que te perdone.

-Rose... Un momento, solo te pido eso - su voz se estaba quebrando, y su pelo tapaba sus ojos. No me moví, así que él lo tomó como un sí. - Te... Te amo. Te he amado como a nadie. Sí, es verdad que he jugado con esas chicas, pero por que me sentía solo. Necesitaba saber que alguien me quería. Pero al final me daba cuenta de que yo no las quería y... por eso las dejaba. Pero contigo es diferente Rose, te lo prometo.

- Muchas gracias por tan bello discurso. Pero, ¿cómo me aseguras que es verdad? Yo ya no puedo confiar en ti.

En ese momento vino mi salvación, Lía. Le dirijí una ultima mirada y me di la vuelta ignorando sus palabras. Y tras volver a casa, me derrumbé otra vez, enredada en las sábanas que habían secado tantas veces mis lágrimas.

¿Es verdad que él me quiere? ¿O es otra mentira? No sé como podré averiguarlo...

(1) La frase "yo no quiero un final feliz, solo quiero serlo" que se encuentra en la novela es un fragmento de la canción Olor A Mandarinas. (Link más abajo)

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¡Hola! Bueno, creo que se esta volviendo algo más interesante. ¿Qué creéis que pasará con Josh y Rose? ¿Y con Sam y Travis? COMENTAD, Y DADME UNA ESTRELLITA DIVINA, PLS.

Aquí os dejo el link de la canción Olor A Mandarinas, por si queréis escucharlos. La cantante es Zahara. Sinceramente sus canciones me transmiten muchismas cosas, así que os aconsejo que escuchéis varias canciones. https://www.youtube.com/watch?v=Mo_Hd0HTPZk

Un beso, y gracias a todos los que leen esta novela.