XIV

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― ¿Como te fue en la rehabilitación? ― preguntó Haruka en un Whatsapp, habría querido ver a Sousuke y hacerle esa pregunta personalmente pero entre el horario de la universidad y su entrenamiento no había tenido tiempo.

― Lo mejor que me puede ir, hoy seguí con los ejercicios pero sigo teniendo problemas para mover el hombro correctamente ¿y a ti como te fue en las clases?...

Paulatinamente se había vuelto una costumbre entre ellos mandarse mensajes para saber del día del otro ya que por culpa de sus responsabilidades no se habían podido ver otra vez.

Haruka guardó su teléfono en su bolso despues de responder y se fue a los vestidores para desvestirse y así dar comienzo a su entrenamiento.

...

― Buen entrenamiento el de hoy, Nanase ― felicitó Ryuuji a su pupilo mientras ambos salían hacia las calles de Tokio ― Iba a decirte que fuésemos a comer algo pero creo que te están esperando ― le informó mientras miraba por sobre su hombro. Haruka volteo de inmediato pensando que seguramente era Makoto pero se sorprendió mucho al ver a Sousuke observándolos con seriedad.

― Sousuke... ― ¿que haces aquí? ― preguntó con curiosidad mientras su corazón latía a toda prisa y se acercaba hacia él.

― Tú apellido es Yamazaki ¿cierto? ― preguntó Ryuuji ignorando completamente el ambiente y extendió una mano hacia el moreno quien después de un momento de duda la estrecho con fuerza sintiéndose un poco confundido.

―Eres de los 10 mejores del país en la natación estilo mariposa, pero no te vi en el invitacional de Tokio ni en ninguna competencia individual ¿No te interesa la natación profesional?

Sousuke sintió un pinchazo un su pecho ante esa pregunta así que le contó su precaria situación a Ryuuji acerca de su operación, su lesión y de que por supuesto quería adentrarse al mundo de las competencias internacionales pero que por el momento eso no era posible.

― Bueno ― respondió mientras le daba unas palmadas de ánimo en la espalda ― Cuando te recuperes del todo te puedo entrenar, me gustan lo que luchan por su sueño como si su vida dependiera de ello, creo que entiendes ese concepto. A Nanase no le importara que entrene a alguien más ¿cierto, Nanase? ― le preguntó girándose hacia él. Haruka respondió negando con la cabeza, nada le gustaría más que ver a Sousuke cumplir su sueño.

Ryuuji se despidió de ambos chicos y se montó en su bicicleta adentrándose en las calles de Tokio dejando solos a ambos jóvenes.

Cualquier animadversión que pudo sentir Sousuke cuando vio tan cerca a Haruka de ese hombre y luego cuando lo invitó a comer se esfumó con sus palabras, jamás pensó que un entrenador se fuese a fijar en él a pesar de todo. Quería ir a celebrar en algún sitio de la ciudad.

― ¿Tienes hambre? Podemos ir a algún sitio ― preguntó a su compañero.

Realmente a Haruka no le apetecía salir pero entendía que tal vez por eso se había aparecido repentinamente en la piscina, de igual manera propuso algo que tal vez a Sousuke le interesaría más.

― ¿Te gustaría ir a mi apartamento?.

Y eso por supuesto Sousuke no se pudo negar así como tampoco se pudo negar el placer de probar nuevamente los labios de Haruka mientras acunaba su rostro con una mano y acariciaba un mechón de cabello con la otra.

― ¿Como conociste a ese hombre? ― preguntó Sousuke mientras comenzaban a caminar hasta la estación de metro más cercana.

Haruka le contó todo, que también había venido hasta el, más que él buscarlo, así como también que le pagaba con comida, eso último tranquilizó mucho más a Sousuke.

Una mala reputación.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora