El Secreto Del Área [Newt, Gally] En Edición

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Como siempre en las mañanas Newt e Irene se levantaron temprano con la diferencia que esta vez se dieron un beso de buenos días yendo con Sartén con una amplia sonrisa de oreja a oreja, Sartén al parecer se había desvelado, tenia una cara de miertero según Newt burlándose de él.

– Y ¿cómo va la parejita? –pregunto Sartén en tono picaron buscando molestar a ambos

– Somos novios –declaró Newt estrechando la mano de Irene con la suya sorprendiendo al moreno

– Joven Newt que yo recuerde nunca me pidió nada –dijo la chica con una ceja alzada y una sonrisa divertida

– Nunca me negó los besos anoche señorita Irene

El chico espectador miraba a ambos divertido hasta que Newt menciono la palabra "besos", lanzo una exclamación de incredulidad no esperando esa confesión.

– ¿¡Se besaron!?

– No solo una vez –contestó Newt sin dejar de mirar a Irene a los ojos

– No fue fácil despegar a Newt de mi

El rubio se carcajeo breve-mente.

– Claro que no y menos cuando te aferrabas a mi

Esta vez fue Irene la que se carcajeo sin recato con una enorme sonrisa dibujada en su rostro, uso su mano libre para agarrar la mejilla contraria de Newt dándole un beso rápido a sus labios haciendo sonreír al rubio ante la cara de asco de Sartén.

– Si se van a dar amor háganlo en privado –colocó los platos de comida frente a ellos

– Estás celoso –se burló el chico sin borrar su expresión

– Mira tu cara hermano pareces un idiota enamorado

– Y es mio –intervino Irene inclinándose hacia Newt

– Por favor no me digan que se darán la comida en la boca del otro

– No es nuestro estilo, nunca lo ha sido –contesto Irene sentándose derecha empezando a comer sin soltar la mano del rubio

Newt apretó su mano breve-mente antes de hacer lo mismo, Sartén los miraba desde su lugar recordando a Gally y Mich, lo único que hizo fue suspirar dejando el recuerdo de sus amigos en lo profundo de su mente aceptando que nada volvería a ser como antes. Recupero su entusiasmo y sonrió uniéndose a la plática de ambos presentes saludando a uno que otro habitante que llegaba en especial los corredores que eran los que tenían que estar listos desde temprano.

– Miren que tenemos aquí –dijo una voz en tono burlón

– Y Minho hace acto de presencia

– Fueron más rápido de lo que creía, apostamos a que se tardarían unos 2 meses –golpeo el hombro de Newt sentándose frente a ambos– Mi comida Sartén

– Ven por ella larcho –el chico entrecerró los ojos molesto

– ¿Por qué les serviste a ellos y a mi no? –pregunto ofendido

– Ellos fueron amables, aparte es un regalo por su reciente relación

Newt e Irene le miraron con una ceja alzada, pensando lo mismo y por su parte Minho lanzaba exclamaciones de haber conseguido un premio por algún logro importante, dando comentarios a ambos. Sartén les regreso la mirada alzándose de hombros.