La guerra contra los vampiros había terminado hace más de diez años, no habíamos tenido incidentes con ninguno de ellos. Hasta esa noche, donde yo encontré a mis mates y me convertí en la reina de los lobos.
Mire a Damon y Harry quienes se habían quedado dormidos, uno a cada lado de mi. Después de nuestra tranquila discusion y del día tan pesado que habiamos tenido; el Alfa Antony nos había cedido una habitación para que pasaramos la noche.
Suspire sin saber realmente que hacer, lleve ambas manos a mi rostro, intentando calmar mi dolor de cabeza. Antony y yo habiamos hablado un poco sobre lo que iba a pasarme cuando hablara con Mila Jopkins, una mujer muy poderosa. Pero lo que no entendi es que para poder entrar al campamento tenias que hacer una acto de valentia. Sonaba confuso, puesto que no sabia lo que haria o que prueba me pondria esa mujer.
-Admes- Levante la vista ante la mension de mi nombre. Frunci el ceño inmediatamente. La voz era suave, tranquila y venia de lo lejos. Mire a mis mates, para ver si alguno de los dos había escuchado aquello. Pero no fue asi, ambos permanecian completamente dormidos. Decidi salir de la cama, mi mente realmente no llego a pensar el peligro que podria pasar en ese momento, solamente segui la voz, perdiendome en ella.
Mis pies tocaron el frio suelo, haciendome estremecer de pies a cabeza. La camiseta larga de Harry me llegaba solamente hasta los muslos, por lo que sentia frio después de esta.
-Admes-Susurraron nuevamente. Esta vez decidi caminar mas rapido. Con miedo a despertar a Harry y Damon, quienes dormian placidamente; gire el pomo de la puerta de manera lenta y sin hacer mucho ruido. No queria causar un disturbio. Abri la puerta un poco, y sali rapidamente. Mire hacia ambos lados del pasillo, intentando ver cualquier señal de vida, pero los dos se encontraban completamente vacios, lo que me confundio profundamente. Suspire y desganada baje las escaleras, poco a poco. Deslice mi mano por el barandal de madera de esta, que estaba frio.
-¿Quién esta ahí? -Pregunte en un susurro. Me di una palmada mental, cualquier persona idiota preguntaria eso. Como si el asesino fuera a responderme. Negue con la cabeza, me acerque a la puerta de salida.
-Admes- La voz venía desde fuera. Por lo que abri, pero...me encontre con la pura nada. Alrededor de la mansión de Sky había un enorme bosque, y lo que mis ojos pudieron ver fue una luz metida entre los arboles, pero esta se movia constantemente, como si alguien cargara con una vela. Intente ver mejor, pero no pude, la obscuridad inundaba la noche, como si fuera esta la mas obscura del año.
Baje las escaleras de marmol de la entrada. Pense inmediatamente que si los guardias no debian de estar haciendo rondas, pero no vi a absolutamente nadie. Lo que me confundio un poco mas.
Cual tonta, me adentre en el bosque, a mitad de la noche. Sintiendome valiente y temerosa al mismo tiempo. Persegui la luz como un niño a un dulce. Mis pies descalzos comenzaron a sentir molestias por las ramas, las hojas, las pequeñas piedras, y estas comenzaron a encajarse, haciendome cortaduras. Me recargue en un arbol, limpiandome la planta de los pies, mientras soltaba quejidos dolorosos. Aprete los labios mientras me quitaba una espina enorme.
Pero no deje de seguir la luz con la mirada, hasta que esta se detuvo en un punto y cayo al suelo. Aproveche ese momento para correr hacia ella, sin importar que las ramas con espinas dieran en mis piernas, brazos y cara.
Me detuve, consternada, solte un enorme suspiro. Y vi como la vela en el piso se apagaba poco a poco. Me agache hasta su altura, levantandola, intentando que la llama siguiera viva. Demonios...no sabia como regresar a casa. ¿Cuanto había caminado? Ni siquiera lo sabía. Pero para mi fortuna, la llama no duro mucho, y se sumio junto con la obscuridad. Dejandome completamente a obscuras. Sin señales de vida, sin...nada. Me incorpore, dando vueltas a mi alrededor. Intentando ver la luz de la casa. Pero...solo habia un humo negro esparciandose entre los arboles. Me estremeci. Entonces sentí como todo empeoro a mi alrededor. La brisa de los arboles movio hojas y todo a mi alrededor. A lo lejos, escuche como unas ramas se rompian, como si algo o alguien viniera rapidamente hacia mi. Negue con la cabeza, gire sobre mis talones, y comence a correr en la dirección opuesta.
El sonido de mi respiración lo escuchaba con tanta fuerza al igual que mi corazón, eso me hizo pensar que tenia aún más miedo del que había tenido nunca. Las ramas romperse detras de mi no cesaron, sino que el rugido de un animal me alerto demasiado. Fue cuando me di cuenta de que habia ido directamente hacia el peligro. No podia ser, no tenia la ayuda de nadie. Pero...¿la necesitaba? Comence a llorar, me sentia tan perdida, asustada, corriendo a mitad de la noche con algo detras de mi.
Fue cuando gire un poco la cabeza y me di cuenta de que algo habia volado por sobre mi cuerpo. Me distraje tanto que no me di cuenta cuando lo tenia frente a mi.
-¿Que es lo que quieres? -Grite entre todo el viento y el sonido de los animales alterados en el bosque.
El demonio sonrio.
Su piel gris, y sus enormes alas me daban escalofrios. El rostro arrugado, con colmillos grandes y finos hizo un gesto de triunfo.
-Pequeña Admes... -Su voz retumbo por todo el lugar- He venido para llevarte conmigo, a la Infratierra.
-¿Para que me necesitas? -Este rio con gran fuerza.
-Para el sacrificio que nos liberara a todos y cada uno de nosotros. Cada mounstro, cada asesino, cada...animal deseoso de venganza.
-No -Me plante frente a el- No me llevaras.
-Oh, querida...si no es una pregunta -Sonrio maliciosamente- Es una aformacion -Lo siguiente que vi fue como intento abalanzarse sobre mi. Pero mis manos reaccionaron antes, lanzandole todo mi poder. Por algo era la reina de hielo. Este comenzo a retroceder, pero hubo algo que me llamo sorpresivamente la atención, fue como su piel comenzo a derretirse por mi toque, este me miro entre sorprendido y furioso. Pero no pudo mas, y desaparecio entre una nube negra, dejandome nuevamente sola. Aunque lei algo en sus labios al final.
Volvere.
Me tire al piso, sumamente exahusta y asustada. Si alguien liberara a los mounstros de la infratierra, todos...y cada uno de nosotros moririamos.
Todos.
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2 anuncio: En mi perfil tengo una novela que estoy comenzando en el universo de HARRY POTTER. Es la TERCERA GENERACION. Y la verdad se va a poner padrisima.
