Fuerte y caliente, esas eran las dos palabras que Sehun mas amaba, las que describían todo aquello que le gustaba, lo que mas adoraba. No podía evitarlo. Siempre le había gustado de esa forma, desde su juventud, desde la primera vez.
Y aunque ni él mismo llegó a pensar que sería de esa forma, ahora mismo se encontraba aquí, en su hogar, pidiéndoselo a su amado.
Luhan rodando los ojos y sonriéndole después de escuchar su respuesta. Y aunque a su esposo no le gustara así, él siempre era muy complaciente y no le negaba ni un solo capricho a Sehun.
Le había dicho hasta el cansancio que no era muy sano de esa forma y que debía dejar de gustarle así en algún punto pero Sehun siempre renegaba que no era malo y que debía admitir que incluso algunas veces a él también le gustaba así.
—Y no intentes negarlo, Lu. La última vez terminaste pidiéndome mas.
Dijo mientras se ponía de pie y caminaba alrededor de la mesa hasta posicionarse detrás del rubio.
Con su ventajosa posición, llevó sus manos hasta la cintura de su esposo y recargándose en su hombro, depositó un pequeño beso en la base de su cuello. Sintió el breve estremecimiento que causó en el mas bajo.
—S-sí, pero...
—Pero...
Repitió mientras besaba cerca de su clavícula. Sus manos envueltas sobre la cintura de Luhan le permitían sentir las rápidas sucesiones de su respiración ahora agitada.
—No hagas eso...me distraes.
Susurró. Sehun rio antes de dejar a su quijada descansar sobre sus hombros. En su lugar, guio una de sus manos hasta levantar levemente la camiseta de su esposo. Sus dedos pasearon juguetonamente sobre su vientre.
—S-sehun...
Siseó cuando sus dedos helados entraron en contacto con la cálida piel de su estómago.
—¿Y bien?
Preguntó, aún sin dejar de acariciar su tersa piel. Luhan se mordió el labio inferior y asintió débilmente.
—Está bien, pero que sea la última vez. Realmente no me gusta así y tú lo sabes.
Sehun sonrió victorioso.
—De acuerdo.
Agregó antes de deslizar su mano fuera de la ropa de su amor. Reacomodándose la camiseta, su hermoso esposo le dedicó una linda sonrisa de lado.
—¿Ves que no es tan difícil? —dijo antes de volver al otro lado y sentarse.
Luhan suspiró audiblemente y tomó de vuelta la taza de la meseta donde la había dejado.
—De verdad que nunca voy a entender cómo puede gustarte así el café.
Admitió, resoplando y abultando sus labios.
Sehun rio mientras llevaba la humeante taza hasta su boca. Cuando el sabor amargo y la sensación ardiente explotaron en su paladar, él suspiró. La experiencia era casi orgásmica.
Solo había dos cosas que podían llevarle a este nivel de éxtasis. La primera de ellas era, por supuesto, la increíble belleza rubia que tenía en frente. Su adorable esposo que soplaba su propia taza antes de dar pequeños y pausados sorbos al contenido.
Todo para después hacer una obvia mueca de disgusto, arrugando su nariz de esa tan, pero tan, increíblemente dulce manera. A Sehun le daban ganas de ir y pellizcarla cada vez que Luhan hacía ese gesto.
La otra cosa que él mas amaba y solo después de Luhan, por que todo estaba muy pero muy por debajo de su esposo, era el café cargado o en palabras de Lu "la cosa fuerte y caliente que te gusta".
Sehun disfrutó cada instante mientras desayunaban y veía a Luhan tratar de tomar el café que había preparado, como a él le gustaba, claro. Y no es por que estuviera tratando de hacerle alguna maldad a su esposo, sino mas bien por que el sustituto de crema favorito de este se había agotado y él se negaba a tomar cualquier otro de alguna tienda cercana.
—Bwha... —dijo Luhan mientras sacaba su lengua, a la espera de que el sabor amargo se desvaneciera de ella—. Espero no tener que tomar esta cosa de nuevo. La última vez tenía mucho trabajo que hacer en la noche y por eso acepté tomarlo pero no pienso hacerlo de nuevo...
Admitió su esposo mientras llevaba un pan tostado con mucha mermelada de fresa hasta su boca, para aminorar el sabor.
Fue el turno de Sehun para hacer una mueca de disgusto. Nunca fue fanático de lo dulce.
—No te preocupes Lu, cuando vuelvas del trabajo ya habré hecho la despensa y traído tu sustituto de crema.
—Está bien, gracias cariño —dijo el rubio antes de dejar su pan sobre el plato y llevar su mano hasta la de Sehun. Le dio un breve apretón en el dorso de esta. Sehun sonrió en su dirección.
Alejándose para seguir comiendo, escuchó a Luhan decir de forma pensativa:
—Aunque esto explica muchas cosas...
—¿Qué cosa? —preguntó mientras llevaba la taza de vuelta a sus labios.
—Ya sabes, lo del café. Una vez leí por ahí que el buen sexo debe ser como el café: fuerte, caliente y sobre la mesa.
Sehun casi se atraganta ante esas palabras. "Casi" por que en ese momento estaba mas ocupado viendo a la silueta de su esposo deslizarse fuera de su asiento y yendo hasta el suyo.
Luhan sonrió mientras se dejaba caer sobre su regazo, aspirando su aroma. Sehun se estremeció ante el cálido aliento de su esposo soplando contra su cuello.
Llevando sus deliciosos labios hasta su oreja, Luhan susurró:
—¿Deberíamos poner a prueba esa teoría?
Sehun esperaba que fuera cierta, mientras deslizaba sus manos hasta la cintura de su amado.
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El lindo esposo de Sehun ⟨⟨HunHan⟩⟩
FanficSinopsis: Para Sehun, existe un antes y un después en la vida. Luhan es quien marcó la diferencia para él. Luhan, su lindo esposo. * * * ✨ Portada: @chogibook ✨ Contenido: Romance | Comedia | +18.