Perdón

1.3K 188 137
                                    

Cuando Jongdae entró a la oficina, Sehun levantó la vista de su computadora. El joven caminó con su eterna peculiar sonrisa grabada en los labios y puso sobre su escritorio el café, antes de darse la vuelta para volver a su propio asiento.

—Gracias.

Él le dio un trago a su Latte antes de responder.

—De nada. Es extraño, ¿sabe? —soltó el castaño.

Sehun le vio tomar los papeles que él había delegado a su cargo.

—¿El qué? —preguntó volviendo la atención a su trabajo. 

El chico levantó su mirada.

—Cuando iba de camino al área de descanso por el café me topé con Jongin —dijo de forma pensativa—. Y él me pidió que le entregara algunos documentos al señor Do para que él los firmara.

—Uhm —exclamó mientras tecleaba los arreglos finales del documento en el que trabajaba—. ¿Y eso qué tiene de extraño?

—¿Cómo que qué tiene de extraño? Jongin es el asistente de Do, es él quien debería de llevar esos documentos a su jefe, ¿no?

Cayendo por fin en la cuenta del punto al que quería llegar Jongdae, Sehun fijó sus ojos en él.

—¿Y tú qué hiciste?

El castaño se encogió de hombros antes de ponerse a rodar su lapicero contra el escritorio.

—Bueno, Jongin es mi amigo. Así que yo solo le llevé los papeles a su jefe —admitió. 

Sehun frunció el ceño, no le parecía que el asistente moreno fuera del tipo que dejaba hacer su trabajo a otros.

—¿Y qué te dijo Kyungsoo?

—Nada en realidad. Solo me dio los bueno días — el de pelo rizado entonces pareció recordar algo incluso mas curioso por que agregó: —¡Ah!, pero cuando estaba a punto de irme él me dijo que esperara a que terminara de firmar los documentos y que se los devolviera a Jongin.

El joven habló con un ligero tono de incomprensión.

—¿Por qué haría eso? Podía esperar a que Jongin regresara a la oficina y decírselo él mismo —declaró. Después volvió su atención a su trabajo.

Sehun decidió dejarlo pasar. Al final no era nada que le afectara, se dijo a sí mismo.

Por la tarde, cuando la hora de la comida llegó, Sehun caminaba con el almuerzo que había conseguido en el restaurant de enfrente en busca de algún lugar disponible para sentarse.

No le tomó demasiado para localizar una mesa vacía, que con la buena suerte, quedaba en una esquina escondida del establecimiento. Nunca le había gustado sentirse observado mientras comía.

Estaba a punto de llevar el primer bocado hasta sus labios cuando vio a las dos figuras que se abrían paso a través del resto de mesas para llegar a la suya. Sehun levantó la mirada para ver a ambos hombres parados a su lado.

—Con permiso —dijo Kyungsoo antes de dejarse caer en la silla contigua a la suya.

—Buenas tardes —anunció Jongin para después ocupar la silla de enfrente. 

Sehun miró de su comida hasta el jefe de presupuestos y después a su asistente.

—No piensen que estoy tratando de echarlos pero, ¿qué hacen aquí?

Vio como Kyungsoo empezaba a comer y Jongin hacía lo mismo.

—¡Mm! La comida está deliciosa —soltó Jongin, ignorando su pregunta.

El lindo esposo de Sehun ⟨⟨HunHan⟩⟩Donde viven las historias. Descúbrelo ahora