Youtubers [ElRubius y Tú]

FAMILIA Y NOCHE [2/4]

Coloque mi ropa y la de Rubius en el armario y poco después escuchamos un ambiente animado abajo.

-Habrán llegado mi madre y mis abuelos.-Dice Rubius.

-Me da un poco de vergüenza…-Digo. Estoy nerviosa. Como reaccionaran? Y si les molesto? Solo espero que podamos llevarnos mas o menos bien... Además, mi noruego esta muy olvidado ya, y solo se lo básico, aunque confió en que Rubius me ayude con ese tema.

Bajamos y exacto, su madre y sus abuelos habían llegado.

-Rubén!!-Exclama la que parece ser su madre, cosa que confirmo cuando Rubius susurra "mamá" mientras la abraza.

-Mamá, esta es _____.-Dice Rubius señalándome con la mirada.-Es mi…

-Oh, si si, hola a ti también!! -Dice dándome dos besos.-Encantada, soy Ari, también conocida como la madre de este chaval.

Rubius frunce el ceño ante ese comentario, aunque yo me río.

-Encantada, Ari...-Digo sonriendo.

Rubius saluda a sus abuelos con algunos comentarios en noruego que casi ni entiendo. Entonces se acercan a mi y me saludan, y yo hago lo mismo.

-Tranquila, no necesitaras hablar mucho con ellos…-Me susurra Rubius.-Pero si de verdad necesitas algo, dímelo y se lo digo a ellos.

-Gracias…

La madre de Rubius nos explica que fueron a una ciudad que había cerca de allí a por algo de comida, y que no esperaban nuestra llegada tan pronto.

-Bueno, ____ quería escaparse del trabajo, y me suplico venir...-Dice Rubius.

-No seas mentiroso!-Digo dándole un golpe en el hombro.-Si me lo pediste tú!

-Ya ya, pero estabas deseando venir, o no?

-Eso si, pero…

-Sois como un matrimonio, eh…-Comenta el Padrino riendo.

-____!!-Carol entra en el salón corriendo.-Ven ven mira!

Salgo de casa con ella de la mano.

-Alaa…

Esta nevando muchísimo. Y los copos son enormes.

-Nieva!-Dice Carol saltando sobre el manto blanco que cubre el suelo.

Rubius llega de repente y me coje por la cintura, elevándome.

-Rubius!! Sueltamee!!-Digo riéndome.-Para para!

Me da la vuelta y me empuja con él hacia la nieve. Caigo encima suyo, pero parece que no le hago daño.

-Les has caído bien…-Me susurra sonriendo.

-Que bien!-Le beso a la vez que sonreímos.

-Hermanito!!-Carol salta encima de Rubius llamando su atención.-No ligues.

-Dios, ya eres como Mangel.

-Como mi otro hermanito?

-Si, como ese.

Me río. Es normal que le considere su otro hermano.

-Chicos, a cenar!!-Grita Ari, desde el humbral de la puerta.-Pero sacudiros la nieve antes de entrar!

Le hacemos caso, y luego entramos. Hace calor dentro. Todos están en la mesa ya.

Hay carne con patatas y una salsa desconocida para mi.

-Esta todo riquísimo…-Digo al terminar.

Rubius se lo dice a su abuela,que por los visto, es quien ha cocinado. Ella asiente y me sonríe. Me siento muy acogida en esa familia, son todos estupendos.

Después de estar hablando un rato todos, mientras nos tomábamos un café, decidimos que hoy iríamos pronto a dormir para que mañana nos despertáramos pronto.

-Mm… No tengo ni pizca de sueño…-Dice Rubius al llegar a nuestra habitación.

-Yo tampoco…-Digo, tirándome encima de la cama.

Rubius hace lo mismo, aplastándome con la mitad de su cuerpo.

-Me encanta que estés aquí…-Me susurra.

-Te quiero.

Nos besamos.

-Se me ha ocurrido algo…-Dice levantándose de golpe.-Ponte el abrigo.

-Que? Por qué?

-No confías en mi?

-Plenamente, pero…

-Hazme caso.

Me pongo el abrigo y las botas. Rubius me pasa su famoso gorrito de Jake y me lo pongo, provocándole una sonrisa. Él se pone el del Goomba.

-Sigueme, pero en silencio, vale?

Asiento, y, de la mano, salimos de la habitación.

Con cuidado bajamos las escaleras. No veo nada, pero Rubius se conoce este sitio de memoria. Abre la puerta de casa y salimos.

-A dónde vamos?-Pregunto, aun de su mano.

-A un sitio espectacular.

Caminamos un rato. Las luces de las farolas no alumbran mucho, así que no vemos mucho por delante de nosotros.

-Ven, por aquí.-Susurra Rubius, cogiendome del antebrazo para que pueda subir por un camino muy empinado sin muchos problemas.

-Espero que el sitio valga la pena porque…-Digo entre jadeos.

-Veras como te gusta.

Después de unos minutos, llegamos a un plano. Rubius me guía por entre la oscuridad. Su respiración es profunda.

-Ten cuidado aquí…-Dice cogiendome bien fuerte de las manos.

Estamos en el borde de lo que parece ser un saliente de la montaña. Rubius me indica que me siente junto a él, al borde. Lo hago y le miro.

-Ahora, mira abajo.-Me dice.

Miro debajo de mis pies. Estamos encima de un gran lago, de agua cristalina. Me sube la adrenalina. Estar en ese sitio… Y con él…

-Rubén…-Digo y él me abraza.-Esto es…

-Paisaje nórdico, nena.-Susurra riendo.

Miro al cielo. No hay luna llena, pero casi. Hay mas estrellas de las que yo podía haber imaginado nunca.

-Esto es precioso…

-Tú también lo eres...

-Ay, Rubén…

Distingo sus labios entre la oscuridad y le beso.

-Me hice una promesa, a mi mismo.-Susurra, mirando al cielo.

-Ah, si?

-Aja…De niño, solía venir aquí a pasar la tarde, solo. Y me prometí que… Si conseguía venir aquí de noche, con una chica, haría que esa chica se sintiera la chica mas feliz del mundo.

-Es por tu miedo a la oscuridad?-Pregunto.- A lo de que conseguir venir de noche, me refiero...

-Exacto…-Dice él.-Pensaba que si conseguía sentirme a gusto aquí, en una noche tan oscura como esta, era porque realmente amaba a mi acompañante.

-Y, es cierto lo que pensabas?

-Creeme, _____, que cuando digo que ahora mismo soy el hombre mas feliz de mundo, y que además, mi miedo se ha quedado en Madrid.