¿Qué es el tiempo?, ¿Cuánto dura un momento?
Los números señalados por las manecillas de algún reloj no fueron coincidencia, llevará a esa persona al lugar que pertenece y desea llegar.
Las reglas están establecidas, será su decisión el enfrentar...
No sé qué es lo que odio más, si el dormir sabiendo que tendré esa pesadilla, o despertar y tener que vivirla. Todos los días se repite lo mismo una y otra vez. Desearía no cerrar los ojos, aunque en otras ocasiones, quisiera lo contrario.
En mi cama se encuentra un remolino que la vuelve un desastre cada noche, girando por horas al no lograr conciliar el sueño. Rendido y cansado, el remolino parece calmarse entre mis suspiros, he cerrado los ojos, y puedo verme a mí mismo en medio de la calle. Quiero cambiar la realidad de mis pesadillas, intentando alcanzarlo corriendo con todas mis fuerzas, nunca lo logro, él, se sigue alejando. Mi corazón se acelera tal cual motor, advierto lo que está por ocurrir, el auto que persigo por la calle se encuentra lo suficientemente lejos para que me rinda, ¿de qué sirve intentarlo? "Jooheon" mis piernas pesadas como el plomo dejan de avanzar, es entonces cuando el torbellino de mi cabeza repite el accidente automovilístico que sufrió mi mejor amigo...
Despierto bruscamente en el mar de sabanas revueltas de mi cama, bañado en sudor frío, temblando de impotencia, llorando de una amarga melancolía. Lo he intentado como cada noche.
Si el reflejo de mi espejo hablara, me amenazaría para evitar a que pase a mirarme cada mañana, soy un desastre.
Los antidepresivos ayudan un poco a que levante mi culo de la cama, cambiando de doctores y psicólogos como cambio de calcetas en la semana, ¿de qué sirven las frases motivacionales? ¿Si no saben ni una mierda de mi vida? De lo que estoy sintiendo.
– "Señor Yoo Kihyun, usted hizo lo que pudo", (claro que no); "no se podía hacer nada", (está equivocado); "era parte del destino", (¿el destino estaba escrito?); "déjelo al tiempo".
¡ESTUPIDECES! Sus palabras vacías no logran llegar a mí. Hablan fingiendo sentir empatía por mis problemas, así que les respondía de igual manera.
–Me siento mejor...– mentía, quise huir, pero los recuerdos me retenían. Siguieron recetándome medicamentos para evitar una recaída en la que claramente ya vivía en ella. El dolor de mi pecho sigue sin desaparecer.
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Era pasado del medio día y la casa de empeño sigue sin visitas, fui a refrescar mi cara en el baño. Y ahí estaba a quien trato de evitar, mi reflejo demacrado por las noches en vela. Tallé mis ojos hinchados y sentí los principios de la migraña, necesitaba un café. Bajé si no antes de cerrar con llave la tienda dirigiéndome a la cafetería.
El brillo del sol era cegador, a medio camino pensé: "debí prepararme un café instantáneo". A unos metros por llegar al Traveler, divisé a Minhyuk arrastrando consigo a Hyunwoo dentro del local. Al entrar, contemplé la cafetería sola, a excepción del mesero alarmado que movía sus manos al hablar, explicando algo al chico moreno que había sentado en una mesa del fondo.
–¡Te digo que...!
– ¡Hey! – Kihyun le cortó la habladuría a Minhyuk, – baja el volumen de tu voz ¿sí?, no aguanto la cabeza.
