The best day of my life (Bakugou x tú)

VI

11 años

— ¿Y es grande?

— Lo es.

— ¿Qué tanto?

— Demasiado.

— ¿Hay muchos alumnos?

— Si.

— ¿Qué...

— ¡Cállate de una maldita vez!

— ¡Bien! — Kacchan es tan malhumorado ¿porqué siempre me tiene que gritar? Le estaba preguntando acerca de su nueva escuela, pareciera que yo estaba más emocionada por él en su nuevo día, con nuevos profesores y compañeros, emocionante, muy emocionante a mi parecer, pero si no desea hablar conmigo ¡bien! Ya no me interesa... oh, tengo otra pregunta ... — ¡Kacchan! — grite para llamar su atención, estaba en su habitación acostada en su cama mientras que él se encontraba en su escritorio haciendo tarea o eso creo.

— ¡Agg! — gritó lleno de frustración — ¿Qué? — giró la silla bruscamente para mirarme

— ¿Midoriya está en la misma clase que tú? — pregunte sonriente, el frunció en ceño mucho más... creo que le molesto mi pregunta.

— Si. Lo está. Ahora cállate. — Okay, está siendo cortante... se enfadó. Ya no pregunte, sabía lo mucho que le molesta Midoriya, aún que sigo sin saber por qué.

Me acosté por completo en la cama de Kacchan, mirando el techo que no tenía ninguna gracia, el mío estaba adornado con pequeñas estrellas que brillaban en la oscuridad y el de él era completamente blanco. Pasaron varios minutos en completo silencio... comenzaba aburrirme.

— Kacchan... — le llame con sutileza.

— Cállate.

— ¿Sigues molesto? — no contestó, claro que lo estaba — Te quiero. — ¿Qué? Fue lo primero que se me ocurrió.

— ¿Eso es todo? — no me miró e incluso sonó mucho más frío que antes. Bien, plan B.

— Conocí a un chico.

— ¡Bien! Quieres mi atención, la tienes — Él sabía que mentía, siempre que me ignoraba le decía lo mismo, una vez le dije te amo... cuando le dije lo que realmente quería decir me ignoró por una semana.

— ¿Cómo es?

— ¿Qué cosa?

— La secundaria.

— Igual.

— ¿Igual?

— Si, sólo que más difícil y aburrida ¿listo? — Lo estoy fastidiando demasiado, sus amigos siempre me preguntan cómo es que aún no me ha matado.

— ¿Piensas entrar al equipo de fútbol? — pregunte a la par que quitaba las sábanas de su cama para acostarme en ella.

— Aún no lo sé, creo que probaré mejor con el Basquetbol. Deja de hacer eso. — Me replicó por estar desordenando su cama, pero demasiado tarde, ya estaba dentro.