* Entre el Amor y el Odio *

Prólogo

Jude Heartifilia, presidente de la empresa mejor reconocida de publicidad en todo Nueva York por tener miles de contratos con muchas marcas reconocidas. Un contrato de negocios con Jude era éxito seguro. Sin embargo no todo es fama y fortuna para Jude.

Se caso con Layla Liones, una rubia de Ojos azules proveniente de Bretaña, vino a probar suerte en el modelaje a los estados unidos, llegando a la empresa de Jude. Quien comenzaba recién a ser dirigida por él, al morir su padre. Al conocerse una gran conexión se dio y poco a poco comenzaron a tratarse dia a día y asi comenzando su relación.

Al poco tiempo de comenzar su noviazgo, layla quedó embarazada de su primer hijo Varón. Sting.

Antes de que su vientre crezca mas se casaron y así comenzaron a vivir juntos.

A los 4 años de Sting, layla quedó embarazada nuevamente de las gemelas Elizabeth y Lucy.

Él parto fue muy difícil pero layla y las niñas sobrevivieron.
Continuando así sus vidas sin ningún contratiempo.

Pero a unos días de cumplir los 18 en vísperas de Navidad la tragedia llegó.

Jude cayo enfermo, quedando la empresa al mando de Sting quien estaba próximo a graduarse de su carrera a los ya 22 años.

Layla cuidaba con mucha devoción a su esposo. Pero no estaba muy de acuerdo con lo que él quería hacer.

-¿Comprometer a las Gemelas? Son muy jóvenes Jude, además ¿Con quienes pretendes comprometerlas?- preguntaba asombrada ante la decisión que tomó recién su esposo.

-Ignacio Dragneel es mi mayor socio el tiene dos hijos de diferente matrimonio. Meliodas de su primera esposa, ella murió cuando su hijo era apenas un niño y a los pocos años se volvió a casar con su actual esposa con la que tuvo a su segundo hijo Natsu, quien tiene la edad de sting.- hablo algo dificil y con muchas pausas

-Conozco a Ignacio y su pasado pero es mala idea, estamos en otros tiempos, las chicas no van a aceptar esa decisión.- volvió a responder Layla

-Necesito dejarlas bien protegidas por si muero.

-¡Deja de decir tonterías Jude.!- grito ahora enojada Layla.

Se puso de pie y soltó la mano de su esposo mientras algunas lágrimas caian.

En ese instante sus hijas entraron no sin antes golpear la puerta.

-¿Papa? ¿Mama? ¿Podemos pasar? - pregunto con voz dulce una de ellas, mientras metía un brazo y asomaba su cabeza a la habitación.

-Pasa cariño- hablo entrecortado su papá.

La chica rubia de ojos azules paso, seguida de la gemela igual rubia pero de ojos chocolates.

Lo que diferenciaba a una de otra era él color de ojos. Elizabeth era de ojos azules y Lucy de ojos chocolates. Ambas tenían pechos grandes, cintura pequeña,un trasero firme y piernas definidas. Él cuerpo digno de una modelo. Herencia de su madre claro está.

-¿Como te sientes padre?- preguntó dulcemente Elizabeth.

-Bien preciosa, y ahora contigo aquí todo estará mejor, que bueno que estan juntas debo hablar con ustedes dos.- hablo seguro y despacio y se sentó poco a poco en aquella gran cama.

Layla seco sus lágrimas y estaba por darse vuelta para irse de aquella habitación.

-¿Porque te vas mamá?- pregunto Lucy un poco confundida.

-Lo lamento hijas pero no voy a ser cómplice de las estupideces de su padre.- dijo algo enojada.

Layla tenia un carácter fuerte a veces, terminando de decir esas palabras salió d la habitación ante la confusión de sus hijas.

-¿Porque está molesta Mamá?- preguntó amable Elizabeth.

-Sientense las dos a mi lado, tu aquí Elizabeth a mi lado derecho y Lucy aqui de mi lado izquierdo. Primero tengo que decirles que las amo a las dos, con toda mi alma, son las niñas de mis ojos, su hermano Sting es mi orgullo, se que dirigirá la empresa en mi ausencia, pero ustedes dos son mis lindas princesas.- Dijo mientras apretaba las manos de sus hijas.

Elizabeth soltó unas lágrimas y lo abrazó levemente mientras que Lucy solo continuo tomando su mano esperando que siga hablando.

-Estoy muy enfermo hijas, el doctor quiere que me haga unos análisis mañana mismo, pero mañana como saben es Navidad y su cumpleaños, pero nose si pueda estar presente en la cena que organizo, así que les adelantare la sorpresa de mañana. Viene Ignacio Dragneel con sus hijos a pedir su mano de ambas en matrimonio.

-¿¡Que!? ¿Estas bromeando padre?- pregunto Lucy mientras soltaba su mano y se ponía de pie.

-Lucy tranquila, espera a que papá termine de hablar.- respondió Elizabeth mas calmada y tranquila que su hermana.

-Con razón estaba molesta mamá, no voy a permitir eso. Tu serás obediente y sumisa Liz, pero yo no. Me opongo rotundamente. -Contestó molesta y salio de aquella habitación.

Elizabeth solo suspiró mientras miro de nuevo a su papá.

-¿Porque tomaste esa decisión padre?- pregunto aun tranquila.

-Quiero dejarlas protegidas, se que dije que vienen a pedir matrimonio pero en realidad es solo si ustedes aceptan. Pueden salir y conocer a los chicos, y si les agradan a ambas, pueden casarse con ellos luego, de esa forma me sentire seguro que ustedes estaran bien y a salvo.

-Pero padre, no pienses en él futuro aun falta mucho por vivir y estaras bien, es algo precipitado ni yo aceptaria algo tan trivial. Pero te prometo que en la cena me comportare lo mas educada y amable con ellos. ¿Si?- hablo con mucha calma Elizabeth, beso la frente de su padre y lo dejo descansar para luego salir de la habitación.

Camino por aquel pasillo llegando hasta la habitación de su gemela.

-Lucy, lo que hiciste ahí con papá fue muy alocado, él lo hace por nuestro bien.- habló mientras entraba poco a poco a la habitación y se acercaba a la cama de Lucy.

-Yo no soy tan sumisa como tu Elizabeth, aunque tengamos un rostro muy parecido ambas somos muy diferentes. Tu eres sumisa y obediente yo soy rebelde y desobediente.- hablo Lucy con un tono de voz fuerte.

-Losé Lucía, pero entiende a papá, esta preocupado por su salud, además no es que nos casemos mañana, yo al igual que tu no aceptaré casarme con un desconocido, pero si le prometí a papá que estaría en la cena con ellos y sería amable.- contestó tranquila mientras se sentaba en la cama junto a su gemela.

-Solo me dices Lucia cuando vas en serio con lo que dices Elizabeth.- Contestó mientras miraba a su hermana sentarse junto a ella.

-Porque ese es tu nombre Lucia, de cariño te decimos solo Lucy así como tu me dices Liz.- volvió a responder con una sonrisa.

-Bien, quizá si me precipite a las cosas, le daré una oportunidad a esos chicos, quien sabe como sean ni quienes sean. ¿Tu sabes de quienes se tratan? - pregunto Lucy dudosa.

-Ahora que lo mencionas papá no lo mencionó- respondió de nuevo mientras pensaba un poco la situación.

-Yo si se quienes son.- hablo su madre quien entraba junto a Sting.

-¿Mama? ¿Hermano? ¿Ya esta listo él día de hoy? - hablo Elizabeth mientras se ponía de pie seguida de Lucy.

-Hola bobas, si ya todo bien. 😝- hablo Sting algo burlón, él al igual que sus hermanas era rubio, ojos azules y alto. Mas alto que su mamá y hermanas. Vestía siempre formal y elegante por su trabajo, esto le daba un extra para verse aun mas guapo, al menos eso decian las amigas de sus hermanas.

-¿A quien le dices bobas? Eres un torpe Sting.- contestó molesta Lucy.

-Calma chicos. Lucia, Elizabeth, Sting. Su padre está muy preocupado debemos estar unidos por su bien- hablo layla mientras tomaba la mano de Sting y de Elizabeth.

Lucy se unió a ese apretón de manos y los 3 asintieron a lo que su mamá decia.

Quiza un nuevo amor le llegaría a las gemelas o quizá no.

El destino aun no estaba escrito.

*Nuevo fic!!!!!* Mezclare a Nanatsu con Fairy Tail. Dos de mis animes y de mis parejas preferidas. Espero les guste. 😁😁