Ruthless [ EDITANDO ]

Capítulo 79

Kate

Me levanto y camino como puedo con las dos cañas bajo mis brazos.

Al llegar fuera de la casa Ethan y Scott toman una caja cada uno, yo camino hasta el auto y me subo.

-¿A dónde ahora? -Pregunta Scott.

-Mmm... no lo sé ¿Donde Alex y yo nos dimos nuestro primer beso? -Digo pensando.

-Eso día tuviste un ataque de asma -Dice Ethan sonriendo.

-¡Es cierto! En el auto de Alex -Digo emocionada -Rápido vamos.

-Esta bien, tranquila.

Al llegar nuevamente a la casa de Alex, corro hasta el garaje que por pura casualidad está abierto, nótese mi sarcasmo, al llegar a esta abro la puerta del auto de Alex y en el asiento veo la caja.

La abro y saco de ella un inhalador color rosa y la tarjeta.

Esto es para que jamás se te olvide, aunque si se te llegará a olvidad podríamos arreglarlo como aquella vez.

Ve al lugar que hemos pasado mad tiempo en nuestro viaje a Roma.

Te amo, nunca lo olvides.

Vuelvo al auto riendo por las ocurrencias de Alex, al subirme le paso la caja a Scott para que la deje en la parte de atrás.

-¿Dónde? -Pregunta Ethan.

-Al hospital.

(...)
Al cabo de unos minutos llegamos al hospital, corro dentro de esta y apenas cierro la puerta de entrada mi celular comienza a sonar.

Llamada telefónica.

-¿Hola? -Contestó sin mirar la pantalla.

-Hola hermosa -Dice Alex.

-Alex, me tienes a las corridas con todo esto. Con una cena para manos ya hubiera perdonado.

-Te amo y te mereces esto y mucho más.

-Yo también te amo.

-Nos veremos en unas horas, dejaré de distraerte, ve a la habitación 123 -Dice y corta la llamada inmediatamente.

Fin de la llamada telefónica.

Corro hasta la recepción y pregunto dónde queda la habitación 123, cuando me lo dice corro hasta ella.

Me paro frente a la puerta de esta y la abro, es una habitación vacía, es igual a la habitación en la que he estado todo está tiempo. Sobre la cama está la caja.

Abro la caja y saco de ella un celular y la nota.

Esto es por romper tu celular.

Ve a tu casa, en tu cuarto encontrarás todo lo necesario.

Te amo, nunca lo olvides.

Guardo las cosas dentro de la caja, y en la puerta de la habitación veo a los chicos esperándome.

(...)
Al cabo de unos minutos llegamos a mi casa, he estado toda la tarde buscando los regalos de Alex, no me había dado cuenta que ya está oscureciendo.

Subo hasta mi habitación y en la calma veo un precioso vestido color plateado y blanco, con unos zapatos plateados, a un lado de esta está el collar que me dio Alex hace algunos meses, el que tiene una A.