All I want is everything *COMPLETA*

Una estrella del patinaje

Desde hace un tiempo tenía la idea de escribir una historia de YOI en el Omegaverse pero al final ninguna idea me gustaba. En realidad, aún no sé cómo llegue a la idea que a continuación leerán pero espero sea de su agrado.

BTW me gusta la idea del Omegaverse pero no lo sigo al pie de la letra, lo adapto según mi imaginación... sorry, not sorry.

Debo decir que las imágenes no son de mi autoría, crédito a sus creadores y los personajes tampoco son mío.

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Viktor Nikifotov POV

Suspiré mientras veía caer la nieve por la ventana, de fondo escuchaba las noticias mientras a un lado de mí se encontraba mi mejor amigo, un alfa de origen suizo: de veinticuatro años, alto, piel bronceada, con los músculos exactos para el patinaje, labios gruesos y rojos, ojos verdes, unas largas y tupidas pestañas. ¿Su nombre? Christophe Giacometti.

Lo conocía desde hacía más de seis años, éramos inseparables a pesar de que él era un alfa y yo un Omega. Al principio todos creían que nos casaríamos, que por fin me retiraría del patinaje y sería un Omega normal quedándome en casa y teniendo cachorros pero en realidad gracias a Christophe había podido adentrarme más en el mundo de los Alfas con la seguridad de que nadie se intentaría pasar de la raya o faltarme al respeto.

Chris estaba ahí para mí en todo momento y dándome un lugar no por tener algo romántico, en realidad, esa posibilidad nunca nos pasó por la cabeza, nuestra relación de camadería era natural. Él me daba consejos para enfrentar a Alfas (incluso me enseño defensa personal) y yo le decía cómo funcionaba la mente de un Omega, lo cual le servía de mucho al ser un conquistador nato, bueno, me gusta decir que yo pulí ciertos detalles.

Claro, sobra decir que no le enseñaba a propasarse con las chicas (o chicos, él no hacía distinciones) Omegas ya que él nunca actuaba sin el consentimiento y siempre era educado, esto gracias a que pertenecía a una gran familia con valores arraigados, sus padres era amorosos y me había recibido perfectamente también.

Pero basta de mis aventuras con Chris ¿Quieren saber un poco más de mí? Bueno, soy ruso, nací en San Petersbusrgo, tengo 20 años, huérfano, mi familia es mi tío Yakov, mi tía Lilia y Makkachin, soy patinador artístico desde los seis años, soy el segundo mejor patinador del mundo lo cual sería celebrado y destacado de no ser mi segundo sexo: Omega.

Empecé mi carrera desde chico y desde el inicio mi tío, mi entrenador, notó mi potencial. Avancé, conquisté y gané muchas medallas, era el rey de la montaña en mi categoría hasta que cerca de mi décimo sexto cumpleaños llegó mi primer celo y no era como un Alfa, no, era como Omega.

Al darnos cuenta de esto y después de que un doctor nos dijera algo que ya sabíamos, mis tíos se preocuparon ya que nuestra sociedad condenaba a los Omegas que aspiraban a ser algo más que madres.

A mí no me importó, aquel día pude haber descubierto que era un unicornio y nada cambiaría en mi sueño de la vida: ser el mejor patinador artístico del mundo sobre cualquier alfa.

Y con el apoyo de mis tíos decidí seguir adelante, en se momento supe que sería un camino difícil pero no me importó, sería fuerte en todos los sentidos: en la pista, emocionalmente y psicológicamente, no dejaría que me intimidarán. En conclusión a VIktor Nikiforov le valía una papa lo que la sociedad pensara, brillaría más que los mismos diamantes.

Y era como ahora me encontraba en una competencia antes del Grand Prix Mundial, me encontraba en la Copa de Patinaje de Canadá. Este era un evento importante, debía clasificar en los primeros tres lugares para estar dentro de las grandes ligas.