Capítulo 14

979 146 12
                                    

Un Ángel mensajero. Y Asmodeo lo estaba matando justo frente a sus narices, ese pequeño Ángel era la solución, ¿Pero por qué no se defendía?.

Los ángeles eran fuertes, debía poder hacerlo, pero Yuta no pudo tener mucho a su favor luego de ver rápidamente el cuerpo de aquel joven, no se veía para nada fuerte.

—Yuta, no podemos solos con él —mencionó YoungHo poniéndose a su lado.

—¿Y qué sugieres? Ya te dije que no podemos esperar a Papá, al menos debemos hacer que lo suelte, no permitiré que mate a nuestra única esperanza —escondido en una bota, Yuta sacó un cuchillo grande, como una daga bastante filosa.

La lanzó dando en el brazo de Daios haciendo que soltara al Ángel, que inmediatamente desapareció en un destello de luz, para aparecer de nueva cuenta tirado al lado de YoungHo. Tosía intentando tomar aire. Daios se quitó el arma clavada en su brazo, no parecía que le hubiera dolido en lo más mínimo.

—Él es mío —dijo con voz molesta, señalando al joven de blanco que intentaba recuperarse.

—No veo tu nombre escrito en él —le respondió Yuta sonriendo de medio lado, pero estaba cometiendo un grave error al provocarlo, YoungHo no sabía si seguirían vivos para la cena.

—¡Es un ángel! ¿Tu pequeño cerebro de híbrido no puede reconocerlo?

—¿Por qué quieres matarlo? No entiendo por qué te molestas con él —Yuta no quería que Asmodeo pudiera darse cuenta de que lo protegían, si era así entonces sospecharía de todos los íncubos y descubriría la alianza con los de arriba.

—No quiero matarlo, solo le daba la bienvenida —respondió riendo—. Este pequeño puede serme de utilidad.

Al parecer Daios quería a JaeMin para así poder encontrar a su hija, de esa manera no se preocuparía por seguir buscando, si el Ángel la encontraba rápido, evitaría que todos los Ángeles capturaran a su hija primero.

—Ahora háganse a un lado, si no obedecen me encargaré de que este sea su último día —relajó sus manos.

—¿Y si digo que no?

—¿Por qué lo proteges? —Daios parecía bastante curioso por ese pequeño detalle.

—El Angelito es bastante atractivo, digamos que me gustaría tenerlo antes de que le cortes la garganta —Asmodeo chasqueó la lengua.

—Íncubo tenías que ser, pero me parece una tontería. Hazte a un lado —Yuta supo que esa fue la última advertencia de Daios, pero no podía simplemente obedecer, no a él.

—No.

Vio en el Demonio las intenciones de llegar velozmente hacia su lugar y deshacerse de él de una buena vez, pero sintió una pequeña mano que lo sujetó medio segundo después, luego todo se fue desvaneciendo en lucecillas blancas y brillantes.

Parpadeó varias veces al percatarse de dónde se encontraban.

Estaban en el camino hacia el bosque, ¿Cómo habían llegado ahí? Vio a un lado al ángel y enseguida a YoungHo, que lucía tan o más confundido que él. Las llamaradas podían visualizarse muy a lo lejos, ¿Se habían transportado?

—Tú, ¿eres el Ángel que los de arriba mandarían? —preguntó Yuta yendo al grano, tiempo es lo que menos tenían ahora.

—Sí, soy JaeMin —respondió con la mirada al suelo, parecía cansado.

That boy is a MONSTER »YuTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora