Daniela era una chica normal, llevaba con felicidad su vida. Pero en un momento se desmoronó todo, a causa de una mirada que la observaba desde lejos.
Esta experiencia comenzará en una escuela de arte, donde nuestra protagonista llamará la atención...
Ya ni si quiera podía concentrarme en jugar a las cartas. A veces notaba como me miraba, sentía su mirada desde lejos.
Jose: ¿otra vez has perdido? -extrañado- que raro -dice mientras baraja sus cartas-
Rusty me miró de forma comprensiva. Los chicos de la otra mesa se levantaron dispuesto a irse, por lo menos ahora estaré tranquila. Pasaron por detrás nuestra, pero Chandler no me dijo nada, solo me dedicó una sonrisa.
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Le respondí de la misma forma sin saber muy bien porqué.
Rusty: ¿habéis hablado? -me susurra en el oído-
Asentí levemente.
Daniela: Encima me pone las cosas difícil -suspiro- y ahora esto -miro a Rusty-
Rusty: tu pasa -baraja sus cartas- vamos a jugar y aquí no ha pasado nada
Y así hice, pasamos la tarde jugando hasta que llegó la hora de irnos. Como al día siguiente tocaba clases me acosté temprano.
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A primera hora nos cruzamos Mikel y yo en mitad del pasillo.
Mikel: Buenos días, Dani -sonríe-
Daniela: Hola -sonrío- ¿cómo llevas el trabajo de autoedición?
Hizo un gesto de desgana con los hombros.
Mikel: Paso ya de esa asignatura -indiferente- esta profesora no nos va a dejar hacer las prácticas.
Podrías pasar, pero ya me jodería no poder aprobar este curso y tener que repetir. Me paré a la fuente a beber agua y Mikel me esperó para subir a clase.
Mikel: Oye, ¿te interesaría ser la cantante de un grupo? -oigo detrás de mi-
No me esperaba esa proposición y escupí el agua que tenía en la boca.
Daniela: ¿Qué? -lo miro extrañada-
Mikel: Tienes buena voz -dice convencido- y creo que podrías cantar cualquier cosa
Estábamos justo delante del taller, no me acordaba que a Chandler le tocaba ahora claro ahí, lo vi venir de lejos y sin querer me sonrojé y bajé la mirada, intentando ignorarle.
Daniela: ¿tú como sabes eso? -digo mientras voy subiendo las escaleras para subir a clase-
Mikel: -ríe- a veces crees que estás sola y te pones a cantar inconscientemente
Daniela: Oh, mierda -sonrío de la vergüenza- pero, ¿qué me propones exactamente? -curiosa-
Pero cuando me iba a contar lo que tenía en mente la profesora vino por detrás.
Profesora: Buenos días, chicos -sube las escaleras casi ahogada- vamos para clase -nos adelanta-
Los dos la miramos con una cara de asco impresionante.
Mikel: Luego te cuento en el cambio -susurra-
Me parecía raro la propuesta de Mikel, no se que pretendía. A lo mejor tocaba algún instrumento y quería hacer videos o algo así, no tengo ni idea.
Nos sentamos todos en la gran mesa central de la clase, nos tocaba hacer bocetos para un cartel que íbamos a hacer. Así que no dudé en ponerme los auriculares y ponerme a dibujar sin ningún tipo de imagen de referencia, dibujé lo que tenía en mente y lo que sentía en ese momento.
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Así pensando mientras dibujaba la idea de Mikel no me parecía tan mala. Estoy estudiando en artes, pero realmente mi curso no puedo sacar toda la inspiración que tengo dentro de mi, ya que los que nos graduemos solo nos considerarían técnicos, no diseñadores.
Solo podía transmitir lo que sentía a través del dibujo y la música.
Mikel miró mi boceto sorprendido. No sabía que se podía interpretar perfectamente a simple vista. Me sentía tan mal por estar con mi novio y pensar en otro, que preferiría no sentir nada.
