PROLOGO
Adrianna es una mujer de 25 años, que lleva ya 8 años lejos de su país natal Colombia, vive en Colombia city, pero por huir de un doloroso pasado se va vivir a Seattle y sin darse cuenta, encuentra el amor que le traerá mucha alegría y dolor...
Dios me duele mucho pero mucho, donde esta Johan, no puedo gritar porque no quiero que Thomas venga y me vea, empiezo a caminar por toda la habitación para poder dilatar más rapido.
-Tú donde estabas me duele mucho.
-Estaba trayendo unas mantas limpias y agua tibia, ahora viene la Señora de la cocina, me dijo que te iba ayudar, también me dijo que no deberías estar teniendo esos mellizos aquí, sin la presencia de un médico, porque se puede complicar, déjame decirle a Thomas, para que te lleve al hospital.
-NO...... No quiero que él sepa que estoy en trabajo de parto, además esta esa ahí con él.
Veo que llega la Señora de la cocina, me indica que me acueste y que abra las piernas, que me va hacer un tacto para ver cómo voy de dilatación, Dios mío esto duele mucho, siento que mis caderas se me van a reventar.
-Señora Adrianna necesito que empiece a pujar cuando yo se lo diga, ya siento la cabeza de uno de los mellizos, Johan ayúdame con las sabanas y necesito que busques una tijera, pero desinféctala ok, Señora puje por favor.
Yo empiezo a pujar lo que más puedo, me dice que ya tiene la cabecita por fuera, que apenas vuelva la contracción puje nuevamente, yo lo hago, de un momento a otro siento que algo sale y escucho el llanto de mi bebe.
-Déjame verlo por favor.
-Mire Señora es un niño, esta completico. -Yo lo miro y las lágrimas empiezan a bajar por mi rostro, luego vuelvo a sentir otra contracción, cojo nuevamente el trapo y lo muerdo para que Thomas no me escuche.
-Señora vuelva a pujar hay que sacar a la niña. -Yo empiezo a pujar duro pero no siento que progreso.
-No puedo más, siento que me voy a desmayar.
-No Señora Adrianna le falta poquito ya empiezo a sentir la cabecita, por favor no se rinda. -Empiezo nuevamente a pujar cuando veo que entra Thomas con esa.
-Johan que se salgan por favor, no los quiero aquí, lárgate de aquí. -Les grito, no quiero que él me vea así.
-Sal de aquí, espérame abajo, voy a esperar a que Adrianna termine su trabajo de parto.
-Que te largues de aquí, no quiero que me veas. -Se me acerca y me dice.
-De aquí no me muevo te guste o no, no sabes lo placentero que se siente verte como sientes dolor.
-Estas enfermo Thomas, SAL YAAAAAAAAAAAAAAAAAAA.
Se le ve la excitación en la cara, este hombre tiene la cabeza sinceramente mal, me llega otra contracción y pujo, siento que algo sale, escucho el llanto de mi pequeña.
-Mire Señora es una niña, es muy hermosa.
Me siento muy cansada, pero no me puedo dormir y más que aquí esta Thomas.
-Dámelos por favor.
-Espere un momento Señora, voy a limpiarlos y se los doy.
-Dame Johan un poco de agua por favor. -Thomas se me acerca rápidamente y me lo sirve, yo se lo recibo de mala gana.
-Te felicito están muy lindo tus hijos, espero que los que pronto vayas a tener conmigo se han mucho mejor, voy a llamar a la doctora para que venga a revisarte y los revise a ellos también, para saber si ya se los pueden llevar, no soporto verlos aquí.
Me los va a dejar unos días, gracias Diosito lindo me cumpliste mi deseo, de poder tenerlos más tiempo entre mis brazos, veo como los limpian y me los dan.
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