Enamorado de Granger {Dramione} {Terminada}

Capítulo 2.

Las clases comenzaban a a las 09:00 am, Draco se encontraba en el Gran Salón desayunando un Té con unas ricas tostadas. Ya habían entrado las lechuzas, como cada mañana, con el correo para los estudiantes, extrañamente a Malfoy no le llegó nada. Su madre solía escribirle cartas. Al terminar el desayuno, sacó un pergamino de su túnica para ver cuál era la primera clase que le tocaba. Siendo las ocho de la mañana, su primera clase era Pociones con Gryffindor.

El joven guardo el pergamino en su túnica y se dirigió a las mazmorras.

Al llegar había varios estudiantes de Gryffindor y Slytherin en la puerta. Al parecer sucedió algo.

— ¡Oye, Crabbe! —Dijo Malfoy en tono malhumorado- ¿por qué nadie entra al salón? -el joven rechoncho lo observó asustado.

—Al parecer el idiota de Longbot... —Crabbe no logró terminar la frase porque una niña choco contra él y se le cayeron los libros al suelo. — ¡Hey! Fíjate por donde caminas! — le gritó a una estudiante de Gryffindor. Era Hermione-

—No lo hice apropósito. -respondió Granger tomando sus libros y de a poco se incorporó con la ayuda de Ronald, su amigo pelirrojo. Draco la observó y quiso ayudarla pero estaba mal hacerlo así que le dedicó una mueca.

Luego de unos minutos apareció el profesor Snape diciendo que el desastre que había causado Neville ya había sido limpiado y que podían pasar. Draco, junto a Crabbe y Goyle, entro al salón y se dirigieron al fondo del salón. Malfoy decidió sentarse solo, a lo que los amigos fortachones del rubio se dirigieron a otro lugar del salón. A los pocos segundos entraron al salón, dos chicos y una chica Gryffindor. Harry, Ron y Hermione algo molesta ya que decidió sentarse sola. Potter y Weasley la miraron extrañados y ambos se sentaron juntos en otro lugar del salón.

—Señorita Granger siéntese al lado del señor Malfoy. —dijo Severus a los segundos de que haya entrado al salón. Hermione bufo y tomo sus cosas dirigiéndose al lado de Draco. El la miro unos segundos pero dirigió su mirada rápidamente al profesor. —Hoy trabajaran con su compañero de banco.

—¡¿QUÉ?! —gritó Hermione y todos los alumnos la miraron. — Me niego a trabajar con él.

—5 puntos menos Gryffindor y señorita Granger, si sigue con esa actitud le aseguro que puedo hacer que la expulsen de la escuela. —dijo Snape y esas palabras pusieron demasiado nerviosa a la joven ya que no dijo otra palabra en toda la clase.