Gabriel despertó maniatado y en una postura poco favorable, le dolían las piernas, los brazos y las alas. A un lado de la habitación se podía ver una figura, no se podía distinguir muy bien, pues la habitación, se encontraba en la penumbra, débiles rayos de luz entraban por la pequeña ventana.
-Quien eres? - Logró preguntar el débil angel entre jadeos.
El sujeto guardo silencio, se volvió hacia él, y con unos potentes ojos rojos le miró, le recorrió el cuerpo entero, como un cazador analizando a su presa. Gabriel retrocedió lo poco que pudo, asustado, se trató de esconder tras sus alas, no sirvió de mucho, pues la presión que ejercían los ojos de aquel ser permanecía, lo sentia a la perfección.
Poco después, el tintineo de unas cadenas le hizo apartar un poco las alas para ver de que se trataba. Grave error, se vio de lleno con los ojos rojos de la bestia, que gruñía y enseñaba toda la hilera de colmillos, se abalanzó contra el, pero nunca llegó aquel ataque, vio como el ser era frenado por la cadena en su cuello y caia de bruces al suelo y se retiraba otra vez a la esquina.
Gabriel suspiró aliviado, se retorció y luchó contra las cadenas que le apresaban, no consiguió nada.
Gabriel estuvo luchando un largo tiempo contra aquellas cadenas, pero no optubo resultado, derrotado, se dejo caer, apoyando su espalda contra la pared fria.
El ser de ojos rojizos levantó las orejas y miró a la puerta, clavando sus ojos en esta, inmovil, alerta. El responsable de tal comportamiento abrio la puerta y se dirigio a Gabriel y le tomó del pelo, el susodicho se resistía como podia, pero no sirvió de nada, le arrastraron fuera de la habitación.
-Dejame! -Gritaba a pleno pulmón.
El sujeto le pego una fuerte patada en el estomago, haciendo que el pobre ángel soltase todo el aire de sus pulmones, y que boquease desesperadamente, tratando de recuperar el aire que le había sido arrebatado con tal violencia.
Inmóvil, se dejo arrastrar, temiendo sufrir otro ataque. Gabriel es arrastrado asta una camara fria, sin mucha luz y que olía con fuerza a productos de limpieza.
Le tumbaron y amarraron en una mesa de metal, Gabriel forcejeo, pero no duró mucho, no se sentia con fuerza. Otro hombre entra en la sala, seguido de el una mujer.
-Este es el nuevo? No parece muy fuerte. -Siseo con una voz tenebrosa el hombre.
-Es lo mejor que tenemos, ya sabes que los ángeles están demasiado bien escondidos. -Gruñó en otro hombre.
-Bien... Rejina, traeme la muestra.
La mujer asintió y traje un pequeño baso de plástico, en su interior había un líquido azul y se lo hicieron beber.
La garganta del ángel ardia tras el paso del liquido, para después que Gabriel callera inconsciente.
-No aguantara. - Advirtió el hombre recien llegado.
-Eso lo veremos ahora. -Dijo el otro hombre, el que había arrastrado asta ese lugar a ángel.
______________________________________
El sonido de los metales chocando se escuchaban por todo el lugar, el ruido era rítmico y desenfrenado. Dos cuerpos combatían con furor en las cercanias de una aldea. Ambos jadeaban y sudaban, pero ninguno de los dos se detenía.
-No está nada mal. Eres mejor de lo que pensaba. -Decía el demonio.
Machael seguia en silencio absoluto, concentrado de tal manera que nisiquiera escucho como Artemisa les llamaba.
ESTÁS LEYENDO
Encerrado en un amor imposible(Yaoihard +18)
RomanceAdvertencia. Esta historia tendrá cosas explicitas y distintas formas de sexo. Se recomienda discreción y que no lo lean los menores (A quien pretendo engañar, ni yo tengo 18 xD) Gabriel es un ángel sumamente torpe quien vive en una rutina aburrida...