Capítulo 5.

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Juntos, Baekhyun y Chanyeol volvieron a la casa de este último en total silencio. Chanyeol se quejó porque ese día ya no tendría entrenamiento ni nada más qué hacer, por lo que se fue a su cama y aprovechó para dormir un poco. Solo se despertó cuando notó como alguien le lamía el cuello y le provocaba cosquillas. Soltó una pequeña risita y se removió un poco, aun con los ojos cerrados, pero al sentir un aura muy amenazante a su lado y algo pinchando en la piel de su cuello, se despertó de golpe y se intentó apartar de aquella amenaza.

Lanzó un grito de terror al ver sobre él a Baekhyun con los ojos muy rojos y unos colmillos que sobresalían de sus labios. Intentó apartarle pero solo le consiguió mover un poco.

—¡¿Qué haces, Baekhyun?!

—Tengo hambre. —Baekhyun miró a Chanyeol con una expresión que le dejó temiendo por su vida. La voz con la que lo dijo le dejó paralizado, era una persona totalmente distinta y no el chico que había salido de un coma de dos años.

Baekhyun se lanzó de nuevo a morder el cuello de Chanyeol, pero este pateó el estómago del Burakkutora y rodó por el suelo para alejarse de él. El chico le gruñó con rabia cuando se hubo recuperado de su patada y le encaró sin importarle nada más. Se colocó en cuatro, sus uñas arañando el suelo, su cola negra moviéndose de lado a lado y sus labios abiertos, rugiendo mientras enseñaba sus dientes.

Un fuerte dolor de cabeza le hizo encogerse en el sitio. Cerró los ojos y dejó poco a poco de gruñir, volviendo en sí.

—¿Qué ha pasado? —Baekhyun abrió los ojos y parpadeó, volviendo a mirar a Chanyeol que le miraba con miedo desde un esquina de la habitación. Empezó a sentirse mareado y toda la habitación se movía, por lo que no podía enfocar bien su mirada.

—¡B-Baekhyun! —logró escuchar que Chanyeol le llamaba.— ¡Tus ojos! —no entendía nada. Sus brazos y piernas fallaron y se derrumbó en el suelo, intentando aun mirar en la dirección de donde estaba Chanyeol.— Baekhyun, tus ojos... ¡Son plateados!




Volvió a despertar en la misma cama que antes, salvo que esta vez no estaba sola. Chanyeol se encontraba allí junto a otro chico que no conocía.

—¡Ya se ha despertado! —anunció Chanyeol al ver que había abierto los ojos.

—¿U-Um? —Baekhyun aún se encontraba adormilado. Ahora que se paraba a pensarlo, ¿cuántas veces había caído inconsciente en los últimos días? Eran demasiadas para tratarse de un Burakkutora, pero podría tratarse a que estaba débil por culpa de la herida en su brazo.

—Vaya, así que tú eres el famoso Burakkutora del que todo el mundo habla, ¿no? —habló el chico desconocido.— Soy Junmyeon, el hijo de JunYeong y ahora rey, pero me suelen llamar Suho, encantado. —se presentó.

—Vale... —susurró Baekhyun.

—Eres monísimo. —rió Suho.

—Em... ¿Eres el hijo de JunYeong?

—Sí. —la expresión del chico cambió drásticamente a una de tristeza.

—Supongo que has venido a matarme.

—¿Eh? No, no, no. —negó con la cabeza.— Solo he venido a hablar contigo. Tengo algo que decirte.

—Ah... pues dilo.

—¡Baekhyun! —se quejó Chanyeol.— Sé más educado. Ahora él es el rey.

—No pasa nada. —volvió a reír Suho.— Él no está acostumbrado a hablar con reyes.

The Other Side { EXO & NCT }Donde viven las historias. Descúbrelo ahora