The Secret Of Vixx

18

Dicho y hecho, Leo estaba de vuelta en casa, o lo que para mi era una.
Llego tan serio, tan frío como es el. Con los cabellos rosados, pero deslavados. No habló. Solo me miró desde un extremo de mi habitación. Yo estaba expuesta ante el, como un pequeño ciervo a punto de ser atacado por un león.

-¡Hyuk-ah!.-Gritó sin quitarme la mirada de encima.

-¿Ah?.-El menor no tardó en contestar desde la otra recámara.

-¿No debías salir a dar una vuelta? Hacen falta cosas en casa, Alex te está esperando afuera.-El tono de voz de TaekWoon era tranquilo, pero impaciente. No podía distinguir muy bien que era lo que quería. Era evidente que Hyuk se fuera.

-Hyung...-A través de las paredes se escuchó como Hyuk se levantó molesto diciendo unas cuantas malas palabras.

-Ya te divertiste un rato, ¿no es así?

-¡Ya! Ya me voy.

TaekWoon cerró la habitación y esperó a que la puerta del departamento se cerrará para así dirigirse a mi mientras iba quitando su ropa, dejándola tirada entre la brecha de la puerta de mi habitación y mi cama.

-Estoy muy cansado.-Al llegar a mi cama, este cayó boca arriba únicamente en bóxer.

-Yo debería...

-No. No quiero sexo, solo quiero descansar un poco.-Él cerró sus ojos. Sentía ganas de tocarlo y de sentir su piel.

-¿Sabes que esto está en contra de tus propias reglas?

-¿Qué más da? Son mis reglas, puedo romperlas si quiero. Tu estás rompiendo una.

-¿Ah si? ¿Cuál?.-Me acosté boca arriba a lado de él.

-No estas llamándome como deberías. 

-Lo siento, Daddy.

-No importa, de todos modos estoy muy agotado como para levantarme a golpearte. Por hoy estas libre de tratarme como quieras.

Al escuchar eso sonreí y me levanté para sentarme y mirarlo.

-Si estás tan agotado, ¿qué haces aquí?

-Alex me dijo que me extrañabas.

-Mentiroso.-Fue lo único que salió de mi boca.

Si. Extrañaba a Leo y su rara manera de tratarme. Cualquiera pensaría que es una locura aun sabiendo que me lastimó, que me abusó. Pero finalmente eran mi nueva familia. Vixx era mi familia ahora y era lo único que tenía. 

-Eso no dijo Alex. 

Leo aun permanecía con los ojos cerrados. Yo no tenía idea de lo que estaba pensando o de lo que ahora estaba haciendo, tomando en cuenta que no sabía cuanto tardarían en volver Hyuk y Alex. Me levanté de la cama y caminé a la puerta de mi habitación para ponerle seguro. Parecía ser la mascota de la que Leo temía, pues no tardo en preguntar "¿Que estás haciendo?"
No respondí más que con un "Shh".

Mis pies descalzos se deslizaban en mi recámara como si en verdad yo supiera lo que estaba haciendo.
En el armario justo hasta abajo permanecían los regalos que TaekWoon me mandaba con sus notas: "Úsalo cuando te vea."

Tomé una de las pequeñas cajitas y saqué el contenido, sentía la necesidad de complacerlo.

No era la gran cosa, o más bien, para mi no lo era. Deje caer al suelo el blusón de seda color crema que cubría mi cuerpo y comencé a poner las medias de algodón rosa pastel que acompañaban mi outfit. La lencería era muy sencilla, un sostén con encaje y bragas del mismo color que mis medias. Por un momento me entró el temor de que a el no le gustara. Para terminar, coloqué un vestido corto de una tela brillosa, pero suave.

Sin dudarlo caminé hasta la cama y me subí sobre él haciendo que mis piernas quedaran a sus costados.

-Daddy~ No duermas, quiero jugar.

Leo abrió poco a poco los ojos, al parecer si se había dormido. En cuanto me vio le regalé un puchero repitiendo lo que ya había dicho antes.

-Juna~, ¿qué estas haciendo?.-El mayor posó sus manos sobre mis piernas mientras me miraba.

-Sé que Daddy tal vez está cansado.-Recargué mis manos sobre su pecho mientras aquel comenzaba a mover sus manos acariciando mis piernas suavemente.-¿Jugamos?

No se en qué momento sucedió. Estaba a merced de Leo. Mi contrario de un momento a otro quedó sobre mi, besando mi cuello mientras soltaba pequeños jadeos.
Sus manos recorrían delicadamente mi piel, pasando por mis pechos hasta llegar a mi ombligo haciéndome sentir cosquillas.

-Da-daddy~ haces cosquillas...-Reí con mis ojos cerrados disfrutando del tacto entre mi mayor y yo.

-Creí que después de Hyuk no estarías de humor.

-¿Desde cuando te preocupa que no este de humor?

-Tienes razón.-El semblante de Leo cambió e incluso se volvió más serio de lo que normalmente es.-Supongo que hoy no pasara nada, solo quiero dormir.-Se movió de encima mio y regreso a la posición de antes.

-Leo...-Por un lado estaba consiente del cansancio de mi contrario, pues días antes Hongbin me había contado lo ocupado que estaba con su debut.-Entiendo, quizá deberías ir a tu habitación.

-Quiero quedarme aquí.

-Bien... ¿Entonces por que corriste a Hyuk?

-Porque quería verte y el mocoso iba a tardar en salir de tu habitación. 

Algunas acciones de los chicos me desconcertaban... ¿que le estaba sucediendo a Leo?

-Ahora solo quiero dormir, ¿de acuerdo?

-De acuerdo...