De regreso a ti - Tsunade & Tu

Sello maldito.

Con pasos rápidos, pero tratando de no llamar demasiado la atención, Tsunade buscó por toda la aldea a la joven. Aquel nudo en la garganta y aquella presión en su pecho se hacía cada vez más fuerte a medida que transcurría el tiempo. No quería pasar por aquella situación, pero como Hokage no podía permitir que nadie jugara con ella.

Tras unos minutos más caminando, Tsunade pudo divisar el saco del Clan Hatake desde lejos, estaba en una pequeña colina mirando hacia la nada. Sentada sobre un tronco con sus brazos apoyados en sus rodillas. Al menos sus manos ya no estaban manchadas, pero podía verse aun el estado de shock y el dolor que tenía.

—Se que estás ahí.

Tsunade pegó un salto a ser descubierta, pero no tardó en acercarse. 

—Lo siento, estaba buscándote.

—Voy a estar bien — _____ la observó —¿Deseabas algo de mí?

Mirando aquellos ojos grises, Tsunade por poco pierde la poca cordura que había juntado, pero no dejó que pasara. Sacudió un poco su cabeza y la miró seriamente.

—¿Tienes sellos por fuera de la aldea? En la isla quizás.

—Tengo uno en la isla. ¿Por qué?

—Llévanos.

Mirándola extrañada mientras Tsunade apoyaba su mano en el hombro con un rostro serio, percibió algo malo en ella. Pero aun así, sin protestar, cerró sus ojos levantando su mano hasta su mentón para realizar el Jutsu. No le llevó más de cinco minutos detectar al del puerto del país del fuego como intermediario ya que se trataba de una gran distancia para usar el de la isla.

—Muy bien, llegamos — habló de espaldas una vez que pisaron la arena de aquel lugar. 

Al sentir que Tsunade se había alejado de ella, pretendía voltearse para poder preguntar la razón de su traslado allí, pero antes que pasara, se encontró con una combinación de manos que ya bien conocía.

—Jutsu fuerza de un centenar— su palma pegó justo en su pecho, mandándola a volar varios metros hasta chocar con una roca. Tsunade no había usado todo su poder para matarlla, pero si lo suficiente para ganar tiempo y sacarle el chakra corriente que tenía.

Pero debido a que se trataba de ______, convenía actuar rápido. Entonces llegando rápidamente a estar sobre ella, puso sus piernas a los costados de su cintura y sus dedos sobre el diafragma para usar su Genjutsu paralizador.

—¿Qué es lo que te sucede? — logró susurrar con mucho esfuerzo tras aquel semejante golpe. Por más que podía luchar contra aquel Jutsu paralizador una vez que extrajera el chakra reservado de su cuerpo, quería saber el verdadero motivo por el cual Tsunade estaba haciendo aquello.

—Te daré una única oportunidad de decirme la verdad, antes de arrebatarte en este preciso momento la banda y matarte — gritó con la rudeza que la caracterizaba, sus ojos brillaban con furia y gran decepción.

—¿De que estas hablando?

—El reporte que me dieron, algo no me cerraba. Pero por suerte no estableciste esa falsa confianza con todos, y pude atar cabos.

Debía admitir que esperaba saliera a flote el error que había cometido al estar tan ida en el momento que se entero lo de Itachi, pero no de esa forma. _____ trató de buscar la manera de salir de esa situación, pero las manos de la mujer en ella y sus ojos envueltos de odio no la dejaban pensar —Tsunade.

—Fuiste a verlo ¿Verdad? Te alejaste del grupo, y apareciste en la batalla de Akatsuki para luego irte a la ubicación de los Uchiha, aquella que se suponía que nadie conocía.