EL ÚLTIMO REY (Saga de Tren Infernal - VI)

Capítulo XIII

            Las fuerzas Asonadas fueron avisadas del importante logro. Vana, la mujer quien había organizado toda esta estrategia fue condecorada con los mayores honores y respetos de los bayous aliados. Los soldados opositores exclamaban con gran alegría cantos de victoria, yendo a sus naves espaciales y despegando de la Base Secreta, de inmediato salen del Sistema Irgo para ir a las últimas coordenadas donde habían fallado en la caótica batalla estelar. Óctuplo se dirigió al Centro de Comunicaciones junto a Plauddeh Il, en este punto Alaya'h y Vana eran quienes estaban controlando todo. Las señales que utilizaban ahora eran plenamente abiertas, así que pudieron contactarse con los Planetas aliados- quienes ya habían iniciado su levantamiento entre los Regímenes Opresores Oscuros que tenían dominado su hogar-, además desde ese punto es que se podrían comunicar las Naves Asonadas entre ellas. Óctuplo quería presenciar el momento desde el Centro de Comunicaciones, tenía la gran certeza de que esta vez sí ganarían la batalla. No había palabras cómo expresarles la gratitud a Vana por lo que había hecho, sin embargo Óctuplo utilizó sus mejores palabras para agradecer a la mujer humana:

- ¡Gracias a ti logramos lo imposible, Vana!- exclamó-, después de que acabe la guerra me aseguraré que tengas lo que merezcas. Pasarás a ser parte de la historia. Te lo aseguro, porque has luchado por ello y lo conseguirás- dijo.

- No se preocupe en lo absoluto, Cervacio- contestó humildemente- esto lo he hecho por mi hijo, quien está siendo cuidado por nuestras enfermeras. Lo que quería para él es que se desarrollara en un ambiente de paz y libertad, que tuviera una verdadera vida. Ese era el sueño de Bordamir- recordó.

- Lamento que no haya podido vivir su esposo para presenciar este glorioso momento- comentó Alaya'h- te aseguro que hubiera estado muy orgulloso de ti, seguramente ya lo estará viéndote desde otro lugar. Lo importante es que hiciste que su muerte no haya sido en vano, le diste significado- añadió.

- Espero que sea como dices- le respondió Vana con unas cuantas lágrimas en su rostro, de felicidad-, pero no nos concentremos en eso ahora, lo que tiene gran importancia es guiar a nuestras naves hasta el Ejército Oscuro y realizar el ataque final que tanto esperábamos. Así que todos a sus posiciones, todos tenemos mucho trabajo por hacer. Nuestras fuerzas nos necesitan- comentó.

Las Naves Asonadas habían entrado al hiperespacio, después de haber conseguido la velocidad luz. Esta vez, los que piloteaban y tripulaban sus naves, habían conseguido experiencia desde su última batalla estelar. Tenían una idea de cómo las fuerzas aéreas oscuras atacaban, de cómo derrotarlas con más facilidad y ahora que estaban descontroladas sería aún más sencillo. Al salir del hiperespacio, todas las naves juntas provocaron luces destelladas que cegaron a los Comandantes Oscuros desde sus Navíos. Más adelante se encontraba el Bloqueo que había hecho el Ejército Oscuro con sus mejores Naves, las cuales reemplazaron a la barrera que ya había caído. Desde lejos, los Asonados se colocaron en posición de ataque y verificaron que todos los transportes espaciales estuvieran presentes. Las caras de las bestias oscuras en sus Navíos habían tornado a un rostro de preocupación y venganza. Los Navíos Mayores enviaron una enorme cantidad de defensas aéreas que no tenían comunicación con sus Líderes lo cual les hizo perder el ritmo y jamás habían pasado por estas situaciones, en cambio los Asonados sí. Cuando ya estaban acercándose unos con otros, habían empezado a dispararles a sus objetivos, de tal manera comienza la batalla estelar entre Asonados y la Autocracia.

Unos cuantos pilotos se estaban luciendo dentro de la batalla, habían mostrado muchas habilidades y acrobacias de vuelo mientras destruían por completo las defensas oscuras. A la vez que se destruían 50 pequeñas naves oscuras, apenas lograban tumbar a una de los Asonados. Entonces las fuerzas opositoras estaban logrando movilizarse y llegar hasta el Centro del Bloqueo, donde los Navíos Oscuros estaban seguros que los opositores no llegarían hasta ellos para destruirlos, pero tal vez pudieran sorprenderlos, después de todo. Los Navíos Principales de los Asonados enviaban potentes disparos a sus objetivos y podían destruir hasta 10 naves de un solo ataque; lo cual impresionó a los Comandantes Oscuros de las Naves Mayores, fue entonces cuando se les informó con respecto al Centro de Mandos el cual había sido atacado y reiniciado todo su Sistema... y fue mayor el dolor cuando avisaron sobre la muerte de su querido General- Jean Cassidy-, esto hizo enojar a los Comandantes Oscuros, creándoles la intención de escapar de aquel remoto lugar y huir de las fuerzas Asonadas, pero estas ya se estaban acercando al punto del Bloqueo y no dejarían que nadie se esconda de su ataque.