1.- La verdadera pesadilla

141 25 22
                                    

— ¡Te has tardado mucho! Oh...¿Qué te pasa? ¿Estás bien?—preguntó Francis al ver mi aspecto.

Por supuesto que no, ¿cómo podría estarlo en ese momento? No podía respirar, mi lágrimas escapaban sin poder impedirlo y mis piernas no tenían la fuerza suficiente como para sostenerme en pie.Me estaba comenzando a sentir mareado, esto no pudo haber pasado, no es cierto, es un sueño...NO, una pesadilla más bien, solo tenía que despertar. Vamos, despierta. ¿Por qué dolía cuando me pellizco? No es cierto... .simplemente no lo es.

— Me estás asustando, Carlos, ¿qué, ha, pasado?—acentuó cada palabra.

— Él....yo....me duele.

Francis era mi mejor y uno de mis pocos amigos, sabía todo sobre mí, al igual yo de él. Pero al querer contar que pasó, mi garganta se cerró y no podía articular palabra alguna.

— ¿Quién es "él"?—su voz denotaba preocupación, normal, era la primera vez que me veía así.

— Roberto...—ese es el nombre de mi profesor de física, la persona más horrible del mundo...bueno, llamarlo "persona" era demasiado, no merecía ni ser tratado como humano.

— ¡Ese cabrón! Si te ha hecho algo, lo mato.

— Vamos a un lugar, más...privado, por favor—Me intenté incorporar, estaba nervioso por si me lo encontraba en los pasillos, el hecho de que a Francis le preocupase me dio la suficiente tranquilidad como para poder hablar.

Agarré su brazo y le arrastré a la salida, no podía quedarme en la escuela, así que opté por ir a mi casa, que quedaba a tres minutos andando, allí al menos no habría nadie, mi madre trabajaba a esas horas y su novio igual, y total, si estuviese en casa, tampoco le importaría si estoy con Francis, a hacer una orgía o a comprar drogas.

Entramos en mi habitación, no era nada nuevo, habíamos estado allí cientos de veces, pero en ninguna estaba temblando como ahora.

— ¿Y bien? ¿Qué con tanto secretismo?

— La verdad es que Roberto...— trataba de buscar una palabra adecuada, pero no había otra forma de decirlo sin sonar horrible—...me violó

Mi mente no soportaba más, todo parecía tan irreal. De esas cosas horribles que crees que no pasan a nadie...hasta que te pasan a ti. Los restos de lágrimas que había reprimido antes, salieron a la vez, sin poder detenerlas.

— ¿Que hizo qué? —su cara se tornó totalmente seria— ¿No es una broma, verdad?
— N...No—negué entrecortadamente por culpa del sollozo.

— Oh por Dios, esto es muy serio, tienes que ir a denunciar, ¡ahora!—me miraba fijamente, con tal intensidad que parecía que me quería fundir— Primero, ¿podrías contarme que fue lo que exactamente pasó? Bueno, si sientes que puedes...

Se acercó a mí rodeándome con sus brazos. No le veía la cara, pero sentía su cuerpo alrededor mío, dándome un abrazo. Mi cuerpo temblaba ante cualquier tacto, pero era Francis, estaba a salvo.

Creo que pareció darse cuenta, pues se despegó rápidamente.

— Perdón...

Respiré hondo y me dispuse a contarlo.

Todo comenzó alrededor de hace un poco más de ocho meses, cuando comencé el último año del instituto medio* y elegí las clases que mejor me conviniesen. Entre ellas estaba física, la verdadera pesadilla.

En sus clases Roberto siempre trataba de hacerme sentir inútil, avergonzarme delante de todos , burlarse de mis ideologías y sobre la que suponía que era mi sexualidad, sumándole incontables "reuniones" después de clase a las que obligatoriamente debía acudir, supuestamente para hablar de mis notas, que en su clase eran pésimas, todo lo contrario a las demás asignaturas...aunque al final siempre hacía...demasiado contacto y eso verdaderamente me incomodaba, quizás no pareciese mucho una mano en la rodilla o una caricia en el hombro y si lo comentaba a alguien me tildaría de paranoico.

☾En el centro del vacío☾ 【Gay┊BL】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora